¡Papi, sonríe! |NamJin|

DIECIOCHO.

—¿Y los mocosos? —preguntó el pelinegro al entrar al departamento.

—Yoongi no les digas así a mis bebés —respondió Jin mientras acomodaba los recipientes con comida en una bolsa.

—¿Y los angelitos? —murmuró.

—En su habitación, están acomodando sus juguetes —lo miró— Yoongi, de verdad gracias por cuidar de ellos.

Yoongi sonrió y dio un vistazo a lo que Jin estaba poniendo en la bolsa.

—No es nada, eres casi el hermano de mi novio y me hace bien entretenerme. Pero si quieres pagarme puedes cocinar algo e invitarme —habló despreocupado.

—Lo haré —Jin sonrió.

Los niños salieron corriendo y llegaron a la cocina.

—¡Tío Yoongi! —gritaron al unísono.

—¿Están listos? —preguntó su padre.

—Más que listos —Jimin sonrió y acomodó su mochila.

—¡Llevaremos a Tan! —respondió Taehyung alegre.

—Hmm cierto —Jin fue a la pequeña terraza que tenía el departamento, le colocó la correa al cachorro y se lo dio a Yoongi— Cuida que no le den dulces, por favor.

Yoongi asintió y miró al perro, este le ladró y después movió su pequeña cola.

—Yo creo que le caes bien —Taehyung se acercó a su cachorro y lo acarició.

—¿Qué raza es esta bola de pelos? —preguntó Yoongi mientras miraba al perro.

—Hmm es raza Yeontan —respondió Jimin.

—Ese es su nombre —Yoongi lo miró.

—No sabemos —Taehyung se encogió de hombros— Lo adoptamos en un refugio cerca de nuestra otra casa.

—Es pomerania —respondió Jin.

—Poperania —mencionó Jimin mientras fruncía el ceño.

—No, Chim —miró a su hermano— Es pomeramia.

—Pomerania —Yoongi los corrigió.

—¿Le han enseñado a no meterse en peleas de hermanos? —le respondió Taehyung al mismo tiempo que colocaba sus manitas en su cintura.

—Taehyung, no seas grosero —su padre lo reprendió.

—Sólo decía —volvió a acariciar a su cachorro.

—Bien, entonces nos iremos ya —avisó el pelinegro.

—Vayan con cuidado y no dudes en llamarme si pasa algo —respondió Jin mientras recordaba aquel accidente provocado por Jaehwan.

—Así será.

Los pequeños se despidieron de su padre y se fueron felices con Yoongi.

Por su parte Jin terminó de empacar y salió directamente a la tienda donde trabajaba Namjoon, echó un vistazo a su reloj y vio que iba con el tiempo justo.

Al llegar al lugar vio que Namjoon se despedía de sus compañeros y caminaba hacia la salida, Jin sentía su corazón acelerarse con consideración pero dejó el miedo a ser rechazado a un lado y se acercó justo cuando el moreno salía de la tienda.

—Namjoon...

El nombrado volteó a verlo, no iba a negar el hecho de que se sentía feliz de ver a Jin pero la situación no era la mejor y él aún estaba un poco molesto.