Capítulo 18 | Preparativos

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Nunca había visto a padre poner tanto empeño en algo que no fuera las guerras, en algo que nadie saliera herido superficialmente, porque podía asegurar que de aquella unión más gente de la que había reparado a pensar iba a salir herida.

-¿Le parece bien, Melissa? – Christopher apoyó su mano sobre la mí con una sonrisa encantadora. Me había despertado de mis pensamientos, donde recordaba el día anterior con Theo paseando por las calles del mercado del pueblo, hablando con los campesinos tranquilamente sin que nadie sospechará de mi linaje, corriendo con los pies descalzos sobre el césped mojado por la nieve derretida mientras escuchaba la harmónica risotada de Theo a diez metros de mí.

-Perdone... - me disculpé pestañeando al ver que había reparado en mi aturdidez.

-Estábamos acordando las flores decorativas que pondremos el día de la ceremonia sobre las mesas de los invitados ¿Le gustaría que vayan acorde su ramo? – repitió un hombre desgastado por la edad, padre había ordenado mandar a alguien para que ayudará a su mentecata hija con los preparativos de la unión.

-¿Es de mucha importancia? – contesté, ambos me miraron de recelo alzando sus cejas – Me refiero, deberíamos darle más importancia a la música, el manjar, la colocación de cada invitado...

-Tiene razón, nadie se fijaría en unas flores teniendo a la más bonita de todas siendo protagonista – Christopher besó mis labios con dulzura, le sonreí fingidamente de vuelta – Así pues, le dejó a su cargo, George.

Christopher me tendió el brazo, correspondiéndole con una sonrisa socarrona. Pasemos por los jardines del palacio, de su brazo a paso lento y en silencio. "Disfrutando" de la compañía del otro y sopesando en el "maravilloso" futuro que nos vendría tras nuestra unión.

- Tiene dudas – afirmó rompiendo el silencio – Sé que es una mujer independiente – abrí los ojos para mi sorpresa y estalló en una carcajada débil – Si, a mí también me asombra, nunca pensé que encontraría una mujer como usted, Melissa. Siempre pensé que sería la princesa que rescataría, pero a la vista está que usted me está rescatando.

-¿De qué supone que le estoy rescatando? – sonreí sinceramente por primera vez, su confesión me había dejado perpleja.

-De mis demonios – inspiró aire – Y de un futuro reinado deplorable de guerras. Sé que usted como mi esposa y reina podemos conseguir acabar con todas aquellas guerras, con toda la hambruna del pueblo y si me lo permite, hacerla feliz.

Le sonreí, me aparté colocándome delante de él ambos cara a cara, enarcó ambas cejas, agarré sus manos rodeándolas tras mi cintura y agarré su rostro estampando mis labios en los de él. Christopher apretó su cadera más a mí, atrayéndome con sus manos y sonriendo entre nuestros labios. Me separé lentamente con mis manos en sus hombros, alzando la mirada hacia sus ojos avellana escondiéndose tras mechones de su largo cabello.

-Sé que seré feliz en este futuro reinado – confesé.

"Con o sin él, pero lo cumpliré."

***

-¿Dos hombres? – Lauren reía ante mi confesión – Hermana mía, estas peor que el loco del pueblo – le pegué cariñosamente haciéndola reír de nuevo – Pero debes vigilar – su semblante se puso serio – No solo te arriesgas a perder a ambos.

-Soy consciente – suspiré lanzándome a los cojines de mi cama – No soportaría perder a Theo...

-¿Y Christopher? – añadió con retintín en su voz, alcé mi cuello hacía ella mirándola con intriga – No le miras igual que antes.

- Sí lo hago, es asco.

- No lo haces, Melissa – dijo seria – Ayer mientras paseaba por los pasillos me asomé a la ventana del patio este del palacio, os vi a ambos besándoos.

Melissa (#1 Saga Reinas Crownswell)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora