catorce

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El finde culiao pasó más rápido que la mierda.

Tanto así, que ya estaba sentada en la cama, pegá, mirando una zapatilla con cara de weona.

No había sabido nada de la Ignacia y tampoco del Benjamín, pero a esta altura ya me valen los dos hectáreas de pico.

Igual esta siempre la esperanza que te hablen, te pidan perdón, te aclaren las weas... en resumidas cuentas, ¡qué te busquen!

Pero no po, no pasó nada y esa wea igual me dolió caleta.

Me paré finalmente y busqué mi celular para poner música.

Pa que po, si igual siempre termino poniendo Pablo Chill-e.

PERO ES QUE ME ENCANTA ASÍ MAAAAAL.

Pasaron los minutos y venía mi parte favorita de My Blood.

Y a todo pulmón, vamos chile mierda.

—POLIMÁ CUALQUIER WA' VO SOY SHISHIGANG.

A los segundos cacho que alguien venía subiendo entero rápido las escaleras.

Ay, noooo.

Creo que desperté a Shrek.

Entró mi mamá y al tiro me llegó la chancla en todo el hocico.

Tiene la senda puntería por la conchesumare.

¿Que te creí que son las siete de la tarde, cabra de miechica?—negué con la cabeza, estaba caga de miedo.

Salió de la pieza con el sendo portazo.

—Tshaa, te quedó abierta.—susurré pa mi.

De repente suena una notificación en los parlantes.

POR QUÉ SIEMPRE ME PASA LA MISMA WEA???? Quedó sorda weón.

Tomé el celu, y en la barrita de notificaciones salía un mensaje.

Alex: Buenos días hermosa 💛

Casi se me salió un peo.

Me cambió al tiro la carita.

Sonreí como la reina de las weonas.

Le respondí y procedí a ponerme la caga fea del uniforme.

Me arreglé y peiné. Luego bajé con la mochila en el hombro a tomar desayuno pero no sin antes mirar por última vez mi cama.

Nos vemos pronto mi amorsito, pensé.

Resignada y amurrada, me encontré con mi mamá tostando pan.

**

Como casi siempre, la hora se me pasó volando y ya iba atrasada.

Por lo tanto, le pedí plata a mi mamá pa irme en Uber. Para mi sorpresa aceptó y me dejó 3 luquitas.

Me bajé del auto y me despedí del conductor.

Hoy, mi ánimo estaba como... ni bien ni mal.

PASE LO QUE PASE NO TE VOY A LLAMAR.

Entré a la caga de colegio y ni salude a la inspectora de puerta.

Por vo, me mandan a llamar el apoderao', así que chao pescao.

préstame goma, porfa. [CANCELLED] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora