|PAUSADA| Kokuryuu ||Akatsuki No Yona X Tu||

#11

El pasto crujía bajo mis pies con cada pisada que daba, ya ni siquiera trataba de ocultar mi enojo, no importaba si Ik-soo o Yoon see despertaban
Con manos temblorosas de rabia comencé a meter lo poco que me quedo tras la caída, en la cual casi pierdo la vida, para salvar a  la desconsiderada de Yona y el idiota de Hak, que puede enfrentarse sin miedo a un ejército entero, pero a la hora de defenderme se queda helado.
Varias ropas y vendajes fueron a parar a mi bolso junto a un par de manzanas y una cantimplora con agua. Debería dejarle una nota a Yoon para explicar el porque de la desaparición de sus suministros, esperaba que fuera comprensivo.
Atando las cintas del bolso para cerrarlo, me lo colgué en el hombro bueno y salí por la puerta, sobresaltandome cuando Ik-soo se interpuso en mi camino.
-Ik-soo!- Me lleve una mano al pecho en donde mi corazón latía rápidamente - Me asustaste.-
-Lo lamento (T/N)-chan, es que tuve un sueño en donde te ibas sin decir nada y desperté hace un rato...- no podía ver sus ojos pero su sonrisa no era del todo real.
Me quedé callada y baje la cabeza... Podía sentir su mirada fija en mi, aunque sus pupilas no fueran visibles.
-No tengo otra opción... Yona me lo ordeno, y sabes que nací para servirle.- dije con sarcasmo, mientras que una sonrisa irónica se abría paso en mi cara.
-Si... Eso también lo vi. - comento cruzándose de brazos, y dándome una sonrisa llena de empatía.- Hablaré con ella.
-No necesito que hables con ella, ya lo dejo bien claro, y honestamente no tengo ganas de seguir siendo niñera, se ve que ella solo quiere a Hak y yo feliz de complacer. - La frase salió de mi boca rápidamente, dejándome sin aire, cuando termine mi pecho subía y bajaba agitado.
-Eso es lo que dices... Pero ¿Realmente lo crees?-  su pregunta me tomo desprevenida
Abrí la boca para hablar pero nada salió de ella.
Yoon Camino hacia nosotros con una expresión agria y el pelo alborotado.
-¿Se puede saber por qué el escándalo?- dijo - ¿Y dónde diablos están el grandulon y Yona?-
Sus ojos se posaron en mi bolsa cargada, mi cuerpo vestido listo para salir a la intemperie y mis ojos angustiados. Sin decir nada ni mirarme fijo a los ojos me rodeó en un abrazo de costado, consolandome.
- Si planeas irte, será mejor que te apures... No tardan en llegar- advirtió Ik-soo, no sé veía feliz por mi decisión, pero por lo menos entendía. - Yoon, ve con ella, por favor.
  Pensé que Yoon iba a hacer un escándalo por su sentido de responsabilidad hacia Ik-soo, pero tan solo asintió con la cabeza y en menos de cinco minutos ya estaba junto a mi preparado y cargado para salir, sin una mínima idea a dónde, pero a mi lado sin importar.
Cuando estábamos despidiéndonos de Ik-soo con un abrazo escuché la voz de Yona.
-Hak! Por favor entiende...- silencio fue la respuesta que obtuvo.- Deja de ignorarme, no es la gran cosa.-
Hak y Yona venían caminando por el mismo camino que conecta la catarata con la choza, Hak con los ojos fijos adelante, los hombros rígidos y la mirada ardiente de enojo, mientras que Yona lloraba tratando de lograr que el la mirara,sin ningún éxito
  Yoon tomo mi brazo y comenzó a caminar hacia la ruta que nos llevaría a la aldea más cercana. 
- Debemos irnos...- fue lo único que dijo
Mire hacia atrás para ver a Ik-soo despidiéndonos con la mano, y a Hak reconociendo nuestros cuerpos, alejándonos. Fue como si un baldazo de agua fría cayera por sobre su cuerpo, ya que paro de golpe y fijó su mirada en la mía, la incredulidad casi palpable, y sin importarle nada comenzó a correr hacia mi. Yona gritando por detrás tratando de que parara. Hak hizo oidos sordos y aumento la velocidad.
Me di vuelta y comencé a caminar más rápido con Yoon.
- Ahí viene, tu solo sigue caminando y no les prestes atención. - Dijo Yoon, tomando mi mano derecha y dándole un apretón, en señal de apoyo.
El sonido de los pasos de Hak Eran cada vez más cercanos, y con cada segundo que pasaba mi corazón se aceleraba cada vez más, las lágrimas amenazaban con salir, y respire temblorosamente tratando de calmarme.
Hak de pronto me tomo por el brazo izquierdo haciendo que volteara hacia el, dejando que mi nombre resbalara de sus labios.
- No puedes irte... Por favor- dijo, apretando su agarre.
- Yona ya lo dejo claro Hak, y no es la primera vez, debo irme, entiende por favor.-Trate de darme vuelta pero Hak no planeaba soltar mi brazo. Volvió a tirar de él y cuando quede de frente a él, trato de hacer que lo mirará acunando mi cara con su mano libre, pero me alejé de golpe al contacto.
Al levantar la vista pude ver lo herido que Hak se había sentido por mi actitud,pero ya era bastante tarde, estaba decidida a irme. Sus ojos saltaban de un lado a otro en mi cara, y luego noto mi mano entrelazada con la de Yoon, y la tension en su mandíbula aumento.
- No tiene por qué ser así... No sé qué le ocurre a Yona, pero podemos solucionarlo- dijo, luciendo derrotado.- No nos dejes... Por favor.
Nunca había visto a Hak actuar tan distinto de si, estaba siendo completamente honesto y vulnerable.
- Además, admitamoslo...no podrías irte en paz sin vencerme en arquería aunque sea una vez. - dijo, y me di cuenta de que había hablado muy pronto.
Su obvio intento por hacerme reír funcionó porque una sonrisa logro escapar, lo cual pareció relajar a Hak, el cual se acercó y me rodeó con los brazos, gesto el cual devolví, sin soltar la mano de Yoon. Mientras me fundía en el abrazo, vi a Yona junto a Ik-soo a unos metros de distancia, con el ceño fruncido y lágrimas de rabia deslizándose por su cara, Ik-soo trataba de hablarle, pero ella no hacía caso. Si iba a quedarme con ellos debíamos hablar de lo sucedido urgentemente, para evitar que Yona me apuñale mientras duermo.
Me separé de Hak y mire a Yoon, señalando con la cabeza a Ik-soo. Él asintió y comenzó a caminar hacia la choza de vuelta sin soltar mi mano.
Volví mi cabeza hacia atrás para encontrarme con la mirada fija de Hak, el cual seguía en el mismo lugar en donde lo dejé. Frené de golpe, causando que Yoon también se detuviera y extendí mi mano hacia Hak, expectante a ver si la tomaba o no, y para mí alivió acorto la distancia y entrelazó nuestros dedos.
Así junto a Yoon y Hak camine hasta Yona, lista para afrontar mis problemas, para dejar de  huir de ellos. Con la sonrisa de Ik-soo dándome ánimos, el fuerte agarre de Yoon dándome fuerza y el peso de la mano de Hak estabilizandome.