Ocho

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Ciudad de Seul, 01 de enero del dos mil diecinueve. 


Taemin despertó muy tarde, la mañana después de fin de año.

Lo supo nada mas abrir los ojos, ya que la orientación de la luz que alumbraba la habitación había cambiado. No eran las ocho de la mañana como siempre acostumbraba despertar ahora que YunMin estaba de vacaciones, y a pesar de saber que no tendría el tiempo suficiente para arreglar todo para hoy, cerro los ojos mas fuerte y decidió no ver la hora en el reloj.

Sus padres y hermano vendrían a visitarlo; el hecho de que YunMin era el mas querido entre los miembros de su familia hizo mas sencillo el escoger la casa de Taemin como el lugar de encuentro de las festividades importantes, como la de hoy por ejemplo. 

Se desesperezó minutos después, se levanto y entro a darse una ducha rápida. Sus ojos se sentían hinchados y cansados, la noche anterior el sueño se le había sido negado por muchas horas hasta que finalmente su cansado cuerpo lo recompenso y sucumbió al descanso. 

Se vistió cómodamente con unos pantalones de chándal y una de las tantas poleras viejas que Minho le había regalado, esta en particular seguía siendo su preferida incluso luego de todos estos años, ya listo fue a preparar el desayuno de su pequeño. Ni si quiera entro en el cuarto de YunMin, Taemin sabia que la noche anterior no había sido sencilla para su bebe es por eso que era mejor si era recompensado con muchas horas de sueño, ademas que era mas fácil cocinar si no se tenia un ansioso niño de seis años saltando alrededor. 

Se deslizo entre los gabinetes buscando los ingredientes para preparar algo sencillo. Vertió los huevos en la sárten y añadió la verdura que había picado mientras a su vez licuaba unos cuantos plátanos frescos para que los llenara de la energía que seguro necesitarían este dia. 

Una vez el menú estuvo listo, preparo la mesa y fue en busca de su bello durmiente. 

Eso si lo había sacado de el. 

Tal y como en el pasado Taemin lo fue, YunMin podía dormir como un tronco y no despertarse a menos que una bomba nuclear estallara a lado de sus oídos cuando era algún feriado, era casi como si su pequeño cuerpo supiera cuando podía dormir de mas y cuando debía despertar temprano. 

Abrió la puerta con delicadez y encontró a su hijo en una posición extraña, desde su punto de vista Taemin veía que YunMin estaba abrazando algo con mucho cariño; su fiel venado no podía ser ya que este se encontraba tirado a un lado de la cama eso solo hizo despertar mas su curiosidad. Con pequeños pasos Taemin se acerco y vio lo que su hijo abrazaba. 

La foto de su padre

YunMin mantenía muchas fotos de su padre y de sus abuelos junto a el, estaban todos muy bien guardados en su armario pero su foto preferida era una en la que Minho sonreía contento hacia la cámara, recordó haberla tomado mientras regresaban de una pequeña escapada a la playa luego de la Universidad. Su sonrisa era hermosa, tal y como la de YunMin. 

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