Bonsoir Monsieur «JIKOOK» ┇ Adap

➤Capítulo➶4

La primera vez que Jungkook había sido acosado por un cliente había sido apenas dos días después de empezar a trabajar en el burdel.

«Está totalmente prohibido la interacción de trabajador-cliente fuera de Bonne Nuit, quien sea sorprendido dando un servicio fuera de la casa con el contrato en curso será sancionado con un castigo de segundo nivel.»

-No sabes cuánto me encantas Jungkook. -gruñía el hombre sobre el cuello del muchacho.

Jungkook estaba a punto de soltarse en llanto, sentía sus asquerosas manos tomando su camisa con fuerza al punto de poder rasgarla mientras su lengua se pasaba por su clavícula.

Jungkook iba a vomitar, su estómago estaba revuelto y el nudo en su garganta cada vez era más fuerte hasta el punto de dejarlo sin habla. Jimin estaba a tan solo una cuadra del burdel,acababa de salir luego de terminar sus horas de trabajo.

Llevaba una chaqueta de mezclilla y una camiseta negra, en busca de no llamar mucho a atención ya que tenía que irse caminando hasta su casa la cual se encontraba diez minutos del burdel. Eran las dos de la mañana y ya nadie se encontraba, y no confiabaen los taxis, prefería irse solo que con probablemente un loco de por allí.

Nunca le había ocurrido nada malo o extraño en esos dos días de trabajo, o eso era hasta que el mismo hombre con el que se había acostado por primera vez en su trabajo lo había seguido hasta llevarlo a un costado de la calle en un callejón oscuro.

Entonces allí se encontraba, en el suelo forcejeando con el hombre y gritando por ayuda.Nadie te ayudará, es muy tarde. Le decía su subconsciente, mientras él lloraba. Ni siquiera había notado cuando ya había quitado su chaqueta, o cuando ya tenía sus manos bajo su camiseta mientras lo tomaba con fuerza, posiblemente dejando marcas a su paso.

Y cuando había pensado que todo había terminado para él. Un hombre había tomado al desgraciado de su cuerpo, golpeando su mandíbula y empujándolo lejos de Jungkook.

-Si no alejas tu asqueroso trasero de aquí te juro que voy a llamar a todos mis amigos y te buscaremos para jodidamente matarte.-

el hombre tirado en el suelo lo miró con rabia y tocó su mandíbula sangrante. Entonces salió corriendo de allí, lejos y dejando a Jungkook con su salvador.

El menor no se movía, el frío empezó a consumirlo, y la agitación por el forcejeo aun lo invadía. Estaba asustado.

-Oye, ¿Me recuerdas? -
Jungkook alzó la mirada y miró a los ojos al hombre, asintió. Era uno de los guardias de seguridad del burdel

-Soy Wonho, soy tu guardaespaldas asignado. -
se agachó y se quitó su saco negro para ponérselo a Jungkook sobre sus hombros
-Vamos, tienes que ira casa, hay mucho frío y mira cómo te dejó ese imbécil.

-Gracias.-

Murmuró en voz baja mientras Wonho lo ayudaba a levantarse

-Yo pudo irme solo, gracias.-
dijo a penas pudiendo caminar, sus piernas temblaban tanto que con trabajo se podía levantar.

-No Jungkook, vamos, te acompañaré a casa, a penas y puedes sostenerte a ti mismo. No me importa si vives hasta el otro lado de la ciudad pero yo voy a acompañarte. No pienso dejarte solo. - Jungkook asintió, sintiendo como los brazos de Wonho lo sostenían cuidadosamente, apoyándolo contra su hombro y ayudándolo a caminar mientras se recuperaba de la situación.

Jungkook había pensado que esa noche iba ser la peor de todas, o eso era hasta que gracias a la situación, Jungkook y Wonho se hicieron grandes amigos.