Katekyo Hitman Reborn Z

Tormenta

Perdón por tanta espera, el combate que sale en este capítulo me ha dado muchos dolores de cabeza al intentar escribirlo y encima no he logrado poner absolutamente nada que me agrade, esté es el capítulo que menos me gusta entre todo lo que he escrito hasta ahora.

Acababa de amanecer, los recuerdos de la noche anterior todavía rondaban por la cabeza de Tsuna mientras miraba la caja en la que tenían que guardar los anillos completos que hubieran recuperado en la cual solo estaba el del sol, al final terminó regañando a algunos de sus chicos, ¡COMO SE LES PODÍA HABER OCURRIDO ESA LOCURA! ¿Como habían llegado a pensar eso? Pensar que el pondría esos estúpidos anillos por encima de sus seres queridos, ¡que estupidez! Aún si se pensaba que por su herencia de sangre preferiría los combates a la salud de sus seres queridos, ¡eso era una vulgar mentira! Joder, prefería perder el combate antes que ver la muerte de algunos de sus amigos, e iba a hacer que a esos locos idiotas les entrase esa idea en la dura cabeza inconsciente que tenían aún si debía enviarles él mismo al hospital de urgencias. Después de todo lo haría para que ellos entendieran que su salud es más importante que esa tonta competición en la que los había metido su imbécil viejo.

Haru casi había muerto por culpa de esos estúpidos anillos. Estando al borde de sus fuerzas; cuando ya no podía seguir luchando y aún así en vez de rendirse, que era lo que Tsuna rezaba que hiciese para que ni ella ni ninguno de sus amigos sufriese más, volvió a alzarse para seguir luchando. Y no solo Haru, durante el regaño dado al terminar el combate por no valorar su propia vida, a Hayato se le ocurrió soltar la maravillosa perla de que sus vidas no valían nada si no podían cumplir con las misiones o trabajos a los que les mandase Tsuna; empeorándolo al añadir que su actual misión era conseguir los anillos de Vongola.

Vale que lo había notado... esa energía de nuevo... la que usaban los guerreros z cuando luchaban por proteger al planeta humano al igual que el día anterior con Riohey. Haru la había despertado segundos antes de caer inconsciente por el combate, no sabía si la muchacha se había dado cuenta o no pero él no se lo diría por ahora para que ella no se sobre esforzarse de más.

Y encima el otro imbécil estando de acuerdo con Haru. Tsuna miró por el rabillo del ojo al chico en cuestión, Hayato. Un suspiro de cansancio salió de lo más profundo de Tsuna, al parecer el de plateados cabellos aún no entendía el motivo de su enfado... y de que su amado juudaime se hubiese quedado afónico regañándolos a Haru y a él.

El joven moreno juntó a sus dos problemáticos guardianes y con la voz ronca por el dolor de garganta volvió a repetirles lo mismo de nuevo con distintas palabras.

— Ha ver — se aclaró la garganta, para que el malestar que sentía en ella se atenuase un poco —, os repito. Los anillos no me importan ni una mierda. Si he aceptado que participemos en estos combates, a parte de la emoción de una buena lucha, fue para que el jefe de nuestros actuales rivales no pidan nuestra cabeza en una pica por culpa de una rápida rendición... por lo que pido de favor, ¡QUE PONGÁIS VUESTRAS PROPIAS VIDAS POR ENCIMA DE ESOS ESTÚPIDOS ANILLOS! — un fuerte ataque de tos lo detuvo de seguir gritando agravando el daño de garganta ya existente con antelación por lo que terminó ya casi sin voz — ya que si no lo hacéis me aseguraré de fundirlos para que nadie vuelva a morir por su culpa, menos aún aquellos a los que yo aprecio incluyendo a vosotros dos.

——————————————————————————————————————————————————

Por fin lo había entendido, y él se lo demostraría. Regresaría a su lado como un buen guerrero, no por nada había notado como siempre estaba observando las noticias cuando hablaban de alguno o de todos ellos... los Guerreros Z. Juudaime los admiraba, y observando su modus operandi, vio que ese fuerte grupo de grandes luchadores nunca dejaba a nadie atrás aún si parecía que lo hacían, pero en realidad aunque casi siempre intentaban luchar en un uno contra uno si notaban a alguno de sus miembros en problemas con rapidez iban a ayudar a esa persona en lo que pudieran.