My Brother, My Love || Thor x Loki ||

• Capítulo 1: Desaparecido. •

A lo largo y extenso del palacio de Asgard, el silencio y la calma gobiernan el lugar. Hasta ahora.

Unos llantos interrumpen el silencio de aquel lugar, un nuevo miembro de la familia real de Asgard, un nuevo 'hijo' para el padre de todo.
Los llantos de aquel bebé inundaron los pasillos, llegando a la cocina, el comedor, las salas principales, etcétera.
Esto ha llamado la atención del pequeño Thor, quien jugaba inocentemente con uno de los guardias en la galería del palacio.

— ¿Qué es eso? —cuestionó el infante.

— ¿Eso? Es el llanto de un bebé.

— ¿Un bebé? ¿Qué es?

— ¿Por qué no vas y le preguntas a tu madre?

La idea le agradó al pequeño rubio y accedió rápidamente a visitar a su madre, quien se encontraba en el patio, adornado con árboles de todo tipo, fuentes, y grandes jardines mágicos.
Corriendo por los pasillos, entre más se acercaba a los jardines, aquel llanto se hacía más claro y fuerte.

Su vista fue cegada levemente por el sol que reinaba en aquel lugar, llamó por la mujer y ésta suavemente le respondió.

— ¡Madre!

— Oh, Thor, que bueno que vienes.

— ¡Mamá! ¡Mamá! ¡Tengo una pregunta!

— Y yo seguramente tengo una respuesta.

El infante se acercó a su madre sin percatarse de que aquel llanto había cesado por fin. Pero de lo que si se percató, fue de la cuna que estaba en frente de la mujer, sin saber que había allí, se asomó con curiosidad.

— ¿Qué es eso? —cuestionó, refiriéndose a lo que ahí había.

— Thor, no es qué, es quién.

— ¿Quién es?

— Es tu nuevo hermano, Loki.

— Hermano... —pensó— ¡Quiero jugar con él!

— No grites o lo despertarás.

La dulce voz de Frigga fue el arrullo perfecto para el pequeño Jötum ahí presente, pero la chillante voz del infante arruinó ese momento.
Loki despertó luego de aquello, pero no emitió llanto. Inmediatamente posó su vista al pequeño rubio, a quien observaba en silencio. Frigga los veía con cierto asombro, sentía en ellos una fuerte conexión con apenas minutos de conocerse.
Thor le regaló una extensa sonrisa a su nuevo hermano, Loki en cambio, estornudó sin previo aviso.

— Veo que de llevarán muy bien... —susurró Frigga.

— Ya quiero jugar contigo. —habló Thor.

El bebé extendió su mano, quería tomar uno de los cortos mechones rubios del mayor. Thor notó aquello y ofreció su mano, a lo que el menor tomó su pulgar.

— Te voy a proteger siempre. —añadió.

Eran estos los constantes sueños que Thor presentaba cada que dormía pensando en su hermano menor. Momentos que pasaba con Loki siendo niños, siendo amigos, siendo hermanos.
Hasta el mismísimo dios del trueno puede demostrar sus sentimientos, pues le dolía que su propio pariente le intentara asesinar a apuñaladas cada que pudiese.

— ¿Tanto me odia? —pensaba mientras veía al techo— Sí supieras cuánto te amo, Loki...

A veces, el impulso de ir y decírselo a la cara inundaban su cuerpo, pero temía, temía a no ser correspondido, o a finalmente dejarse asesinar por él.
Deseaba ir, verlo a sus ojos esmeralda, abrazarlo y decirle que lo ama, que a pesar de lo que ha pasado, él siempre estará ahí para darle el cariño que necesita.

Tantos años han pasado, tantos relatos que pueden ser contados sobre su vida junto a Loki, tantas travesuras que soportó y supo reír.
Thor está cansado de tantas amenazas, tantas batallas, tanto peso del bien de la sociedad en sus hombros. Quiere volver al pasado, el pasado donde sólo eran él y Loki, donde estando con él eran juegos y risas, donde Loki le ganaba por ser el mejor estratega y Thor en fuerza.

¿Cómo podrá un dios demostrar el amor que le tiene a otro? ¿Cómo podrá Thor cautivar a su hermano? O mejor, ¿Cómo lo va a enamorar?
Thor quiere hacer de esto algo especial, algo donde se note que lo ama, pero a modo de que no se de cuenta o sospeche. Quien sabe si el gran dios de las mentiras puede llegar a sentir amor, o darse cuenta de que hay alguien que sí lo ama. En especial alguien como Loki, quien no tuvo un lindo pasado.

— ¡Thor Odinson! —llamó un guardia en la puerta.

— ¡Ah! —exclamó al ser interrumpido en su pensamiento— Estoy aquí, ¿Qué pasa?

— Su padre solicita su presencia en la sala del trono.

— Sí, en un momento.

Levantándose de la cama, colocó las vestimentas que le faltaban. Preguntándose qué necesitaba ahora su padre, en especial si sólo se trataba de él.
En minutos, se encaminó a la sala del trono, donde al parecer no sólo estaría él, habían guardias, cocineros, escuderos y gente de la nobleza, todos abriendo paso al camino al trono.

— Aquí estoy.

— Muy bien, ¿Dónde está esa sabandija?

— Se negó a acompañarnos, mi señor. —respondió un guardia.

Thor entendió entonces que se referían a Loki, pero le molestó el hecho de que Odin llamara 'sabandija' a su hermano.

— ¿Qué le pasa a ese hombre? Ha estado en su habitación por semanas.

— Seguramente está planeando algo para destruirnos. —sugirió una noble doncella.

Aquel comentario causó murmullo y pánico entre los presentes. Pero finalmente, Thor calló a la gente.

— ¡Suficiente! A veces todos necesitamos tiempo solos, ¡¿Sabían?!

— Como sea, la reunión se hará con o sin Loki, así que, adelante. —dijo dando señal a un guardia que leería el aviso dado por un mundo vecino.

Aquello al parecer era importante, un nuevo heredero había reclamado su lugar como rey en otro mundo, pero primero debería ser analizado por Odin, el padre de todo.

— Mañana se celebrará una ceremonia especial en honor al nuevo rey, gente de ambos mundos se harán presentes, reyes y herederos, será una gran fiesta. —finalizó.

— Ya entendieron todos, lo mejor de ustedes para mañana. —añadió Odin, luego hizo que Thor se acercara a él— Necesito que transmitas esto a Loki, es obligatorio que ambos se hagan presentes mañana.

Thor no respondió, simplemente se retiró a paso veloz hacia las habitaciones, rumbo a la de Loki.
No era por el hecho de que recibió órdenes de Odin, sino porque le preocupaba el hecho de que estuviera ahí por semanas, sin salir, y posiblemente sin comer.

— ¡Loki! —llamó tocando su puerta, sin respuesta.

Se preocupó aún más y abrió la puerta de una patada, entrando y fijando su vista a donde sea que Loki estuviera.
Pero no había señales de su hermano.

— ¡¡Loki!!