My Brother, My Love || Thor x Loki ||

• Capítulo 4: Dulces Sueños. •

El silencio nocturno se apoderó de Asgard, obviamente siendo medianoche.

Loki no podía visitar la sala de curación estando castigado por Odin, habían guardias custodiando toda la noche, todas las salas, incluso su habitación.
El pelinegro se las ingenió para hacerse un 'laboratorio' improvisado, su hechizo debía estar listo antes de que los cristales tocaran materia asgardiana.

Claramente, si quería asesinar a su padre y hermano, no podía ser directamente del cristal, tenía que ser algo de lo que nunca sospecharían: Algo para beber.

Era tarde, pasaba de medianoche, ninguna luz de algún caserío en Asgard se podía ver. Todos dormían plácidamente, mientras que él planeaba ocasiones para asesinar a sus parientes. El poder de dominar los nueve mundos se le había subido a la cabeza, deseaba la riqueza y el mandato total y bueno, ser el legítimo rey de Jotunheim no era suficiente para el codicioso corazón de Loki. Podía cambiar su pensar, su carácter y su sentimiento. Pero la envidia y el orgullo habían opacado a un corazón que no sentía amor, ni lo recibía.

— Amor... —pensó cuando reposaba su vista de tanta lectura.

Se preguntaba si algún día llegaría a amar, o si alguien llegaría a amarlo. ¿Era eso lo que faltaba en el hechizo de su vida? ¿Amor? No lo sabía, pero cuando pensaba en ello, su ser estaba en paz, donde deseaba hacer el amor y no la guerra. Su carácter cambiaba inmediatamente.
Aquel pensamiento le hizo recordar lo que vivió luego de que Thor llegara a Jotunheim en su búsqueda.

Thor no era el mismo sin Mjolnir, no podía atacar directamente y su control sobre los truenos era distinto. Desde el Ragnarok, Thor cambió, no sólo en su apariencia que ahora lo hacia ver más atractivo y masculino, sino también habilidosamente. Qué tiempo aquel en el que su relación con él cambió mucho, ahora eran unidos y Thor era el más bromista. Como cuando niños.

¿Qué habrá llevado a Thor a buscarlo? ¿A sacrificar su vida en un mundo tan frío como Jotunheim? ¿Hasta el grado de llevar consigo siete perros que mantenían su rastro? ¿Amor quizá?
Quizá Thor sea el único que le ama, y más que un simple hermano adoptivo.

Pensar en que su hermano mayor lo amaba provocaba en su rostro una extensa sonrisa, incluso al grado de ruborizarse. A veces su impulso de matarlo desaparecía, es como que no puedas morder la mano que te da de comer. Aquí no puedes matar al hombre que te ama. Sin embargo, Loki dudaba.

— El hechizo puede esperar... —pensó mientras organizaba sus libros, aquella sonrisa quedó tatuada en su cara.

¿Acaso Thor no tendrá rencor con él después de todas las veces que lo intentó matar? Y si es así, entonces no había razón para ir y buscarlo, o para llegar casi corriendo descalzo a su habitación para saber de su estado.
Un cosquilleo en su frente lo había despertado de un sueño peculiar, era como un recuerdo de su pasado, pero sólo estaban él y su hermano. Fue cuando despertó y vio a Thor realmente cerca de él, fue frustrante para Loki haber sido despertado de tan encantador sueño.

Sus párpados pedían unirse y conciliar el sueño, mañana era un gran día, debía emprender otra búsqueda. Porque su hechizo no estaba completo. Tenía ganas de hacer realidad el sueño que había tenido, donde llegaba a las puertas de la habitación de Thor para poder dormir con él y el rubio nunca se negó. Thor contaba chistes y Loki le leía hasta que quedaban dormidos, a veces abrazados.
Sí, Loki tuvo el mismo sueño que Thor.

Nada arriesgaba con intentarlo.
Tomó solamente su almohada y abrió la puerta suavemente, no había nadie en el pasillo, caminó descalzo hasta la habitación de Thor y entró sin ningún problema.
Ahí estaba él, dormido justo en el medio de su gran cama, ahora solía dormir sin camisa, lo hacia sentir fresco pero a veces pasaba frío.
Loki, en silencio, se subió a su cama y gateó hasta el cuerpo de su hermano. Se quedó un momento viéndolo dormir, pero le pareció raro que su rostro mostrara cierta tristeza o preocupación, ¿Se deberá a algún sueño o a algo que tuvo con su día?

Loki se asustó cuando Thor hizo un violento movimiento hacia la derecha, dándose la vuelta mientras intentaba despertar, estaba teniendo una pesadilla.

— ¡Thor! —exclamaba mientras lo movía— ¡Thor despierta!

— ¡Ahg!

Loki se le quedó observándolo con asombro, Thor le devolvió la mirada, donde su único ojo quería despedir una lágrima.

— Thor, qué pa- —fue interrumpido cuando el rubio se abalanzó a abrazarlo.

— Gracias... Gracias por venir... —decía en voz baja.

A Loki le parecía raro aquello, era incómodo el abrazo pero no quería deshacerlo por nada.

— ¿Cómo supiste que te necesitaba? —cuestionó con cierta calma.

— Este... Quien te necesitaba era yo... —dijo, debía hacerle parecer que era una situación normal.

— ¿Qué tienes?

— No puedo dormir. —excusó.

Thor observó por su balcón, y notó que era más de medianoche.

— ¿Revivimos nuestra infancia? —cuestionó con emoción.

— S-Seguro...

Thor sonrió y se hizo a un lado, dejándole espacio a su hermano, Loki se acomodó en ese espacio tan cálido y compuso su almohada. Ambos se acostaron y vieron el techo unos minutos.

— ¿Estabas teniendo pesadillas?

— Bueno... Últimamente he estado soñando contigo. —Loki calló cuando le escuchó— Pero éste era diferente.

— ¿Por qué? —se atrevió a cuestionar.

— En éste te perdía para siempre. —hizo una pausa para recordar, luego siguió— Un tipo raro de tez morada se acercó a ti, uno de sus subordinados me había atado con metales, estábamos en una nave y todo estaba hecho trizas. Tú le entregaste el Teseracto y lo destruyó, le juraste lealtad y quisiste matarlo, pero su poder era realmente grande. Te tomó por el cuello y... Te asesinó.

Los relatos de Thor dejaban frío en la piel de Loki, pues ya conocía a ese tipo de tez morada.

— Lo más cruel fue que dejó tu cuerpo en frente de mí, al liberarme sólo pude abrazarte, pero no sentir tus latidos.

Loki dio su vista a Thor, aquel sueño si que afectó a su hermano. Estaba aterrado y preocupado, al igual que él.
Sin decir nada se corrió más a su lado donde pudo estar más cerca de él, era un gran momento para un abrazo, y así fue.

Thor correspondió al abrazo, cubriendo el cuerpo de su hermano con sus robustos brazos. Se sentía más seguro, solo deseaba despertar y tener a su lado a Loki, se preguntaba si ya se dio cuenta de que lo ama, y si es así, está muy feliz por que Loki esté correspondiendo.

Finalmente durmieron, dándose calor y dulces sueños.