El muñeco de trapo (Jungkook-Jimin)

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El muñeco permaneció durante mucho tiempo solo y olvidado en un cuarto vacío, hasta que finalmente los dueños de la casa decidieron deshacerse de el, pues solo servía para resucitar recuerdos tristes

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El muñeco permaneció durante mucho tiempo solo y olvidado en un cuarto vacío, hasta que finalmente los dueños de la casa decidieron deshacerse de el, pues solo servía para resucitar recuerdos tristes.

Arrancaron de su traje una vieja tarjeta, donde aún podía leerse "feliz cumpleaños", y se la dieron a un vecino pobre, que vivía de vender objetos de segunda mano en los mercadillos callejeros. Por aquellas mismas fechas, un hombre andaba buscando regalos de Navidad para sus dos hijos. A Jin, el mayor, le regaló un móvil, pero a el pequeño Jimin le compró un muñeco que encontró en un puesto del mercadillo.

Ni él mismo podría explicar por qué eligió aquel viejo muñeco de segunda mano en vez de uno nuevo. Quizás fue porque aquel día caía una ligera lluvia sobre la ciudad y las gotas de agua que resbalaban sobre las mejillas de el muñeco le hicieron pensar en lágrimas, como si aquel pobre juguete lamentara su soledad. Fuera como fuera, Jimin aceptó encantado aquel muñeco, a el cual, con candor infantil, le adjudicó rápidamente un nombre de persona: Jungkook. Cuando sus padres le preguntaron por qué había escogido aquel nombre, Jimin, muy serio, les respondió que no lo había escogido el, sino que el mismo muñeco le había susurrado que se llamaba así, junto con otras muchas cosas. Los padres sonrieron y no dijeron nada, pues sabían que Jimin tenía mucha imaginación y optaron por seguirle la corriente. En cambio, Jin (que tenía once años y, por tanto, ya se consideraba "mayor") no dejaba de burlarse de su hermanito por "hablar con muñecos".

A menudo aquellos chistes provocaban discusiones encarnizadas entre ambos niños, que sus sufridos progenitores debían detener con serias reprimendas para ambos contendientes. La madre llegó a sugerirle a su marido que sería mejor deshacerse de "Jungkook" para que Jimin dejara de imaginar "cosas raras", pero a él le pareció una idea demasiado cruel y se negó a llevarla a cabo. Una tarde, los niños se quedaron solos en casa. Jimin estaba jugando (y quizás "conversando") con "Jungkook" en su cuarto, mientras Jin escuchaba música en el suyo. Entonces un desconocido entró en la casa, forzando la puerta sin que nadie se enterara.

Entró primero en el cuarto de Jimin, lo amordazó antes de que pudiera gritar y lo dejó atado sobre la cama, al lado de su muñeco. Luego entró en el cuarto de Jin, que era su verdadero objetivo. Por culpa de la música, el muchacho no se había enterado de nada, así que el intruso consiguió sorprenderlo. Tras atarlo y amordazarlo, lo arrojó sobre la cama e intentó violarlo, pero entonces se oyeron gritos pidiendo auxilio, procedentes del cuarto de Jimin.

El hombre, asustado, huyó de la casa antes de que acudieran los vecinos. Cuando estos entraron para ver qué sucedía, encontraron a los niños atados y amordazados, tal como las había dejado el intruso. Cuando liberaron a Jimin, este dijo que había sido su muñeco Jungkook el que había gritado pidiendo auxilio, pero, por supuesto, nadie le hizo caso. Como aquello ya era demasiado, el padre, muy a su pesar, decidió deshacerse de el muñeco antes de que el niño acabara realmente trastornado. Al día siguiente, mientras Jimin estaba en el colegio, se llevó el muñeco y lo tiró en un vertedero lejano.

✞✘ BTS SECCIÓN  TERROR✘✞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora