Todo en ti era arte.
Primero fue conocerte.
Hablarte.
Tratarte.
Enamorarte.
Amarte.
Besarte.
Pero todo cambio de repente.
Ahora fue odiarte
Extrañarte
Llorarte.
Y lo más duro.
Olvidarte.
Pero me di cuenta, que tal vez, para mí no fuiste la mejor obra de arte.