you destroyed me ☹ irwin.

|Cita|

[A/N]: Este es un pequeño regalito por que los amo, y esto no será nada confuso. Simplemente será una cita narrada omniscientemente(O si se me acomoda mejor, la narrará Ashton), y al final tendrá lo mas confuso, por que me gusta ser misteriosa.

Agradezcan a Karla por esto, si no fuera por ella, no estaría escribiendo esto.

Disfruten, xx.

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-¿Que puedo hacer por ti, joven?-La encargada de la tienda le preguntó. El castaño sonrió y señalo hacía las pequeñas flores con una gran orquídea en medio. Un hermoso arreglo, para una hermosa ocasión; pensó este.

Eran las 4 de la tarde, un día soleado adornaba la ciudad.

Anne por otro lado, estaba decidiendo que ponerse.

Decidió ponerse un vestido azul de encaje y tacones lisos negros. Ella estaba nerviosa, muy nerviosa.

Era su primera cita, y era una cita con Ashton había estado nerviosa desde el día anterior, sus sentimientos hacía Ashton habían crecido los últimos días. Lo quería, por no decir que lo amaba.

Para Anne, amar era una palabra fuerte, sus padres se habían separado cuando ella tenia 12 años y en ese momento supo que el amor verdadero era difícil de encontrar.

Anne termino de maquillarse y acomodo su cabello como usualmente lo hacía, y aplico perfume en el cuello y sus muñecas. Agarro su iPhone y camino hacia el sillón de la entrada mientras esperaba a Ashton.

El timbre sonó de inmediato, Anne se paro corriendo y le abrió a su "amigo", quien le entrego las flores.

-Ashton, son preciosas.-dijo Anne sonriendo mientras veía las flores que ahora ella sostenía. Para Ashton, ver sonreír a Anne era su regalo, a el en serio le gustaba su sonrisa.

-Flores para una pequeña doncella linda-Ashton sonrió y Anne lo golpeó ligeramente en el hombro.

-Las pongo en agua y nos vamos, pasa y espérame aquí.-Ashton asintió y se sentó en uno de los sillones favoritos de la castaña. Y, entonces, Ashton vio algo que le llamo la atención.

Un puñado de cartas perfectamente apiladas con el número del 1 al 14.

A Ashton le llamo la atención dichas cartas, ¿para quién serán? se preguntó.

Lo que menos pensaba era que fueran para el.

Anne puso las flores en el florero mas bonito que tenía.

El pequeño detalle de Ashton le había gustado bastante.

Cuando admiro lo suficiente las flores, entro en la sala y Ashton le sonrió.

-¿Lista?-ella asintió.

Los dos se pararon y caminaron hacía el auto del rizado. Cortésmente, Ashton le abrió la puerta del copiloto a Anne causando una risa en ella.

-¿Qué es tan gracioso?-pregunto luego de el subirse. La castaña seguía riendo.

-Fuiste muy caballeroso.-dijo, ya calmada.

-¿Eso es malo?

-Es raro-ella sonrió.

-Lo que sea.-el rodó los ojos y prendió el carro.

El camino hacía su destino fue callado. No era un silencio incómodo, era un silencio relajante.

Ashton estacionó su carro y le extendió un pañuelo a Anne.

-Ponte esto, es una sorpresa-Anne rió y aceptó el pañuelo.

-Que cliché-Ashton le guiño un ojo y Anne sonrió. Se colocó el pañuelo y abrió el carro.-Hey, ayúdame a caminar.