EL CUARTO DE AURA

Nuevo hogar

Cuando llegamos al pequeño departamento en el que vivíamos en el centro de Monterrey me contaron que habían adquirido una linda casa a las orillas de la ciudad, una casa que según Diana parecía de los cuentos de fantasía. Pues tenía una linda fachada que le daba un gran toque histórico y era de las más hermosas del área ya que se encontraba en un área boscosa y que a la vista trasera de esta se alzaban grandes cerros que le daban un toque mágico a la vivienda.
Me habían dicho que en dos días nos marcharíamos a esa gran casa ya que estaban esperando que le dieran los últimos toques.

En mis primeros dos días con ellos no hubo mucho ajetreo pues entre la mudanza y eso de que era viernes y Martin 'mi padre', se encontraba dando clases en la universidad donde tiempo a tras había conocido a - Diana 'mi madre'. No tuvimos tiempo de celebrar en grande mi bienvenida.
Eso sí no puedo quejarme pues el primer día me recibieron con un gran pastel y una cena muy íntima entre los tres para celebrar que ya era parte de la familia.

Ya en sábado Martin pudo adelantar lo de la mudanza para poder disfrutar de esa gran casa nueva el resto del fin de semana.
Pudimos dar marcha al plan y salimos con la mudanza del departamento a esa gran aventura como le llamaba Diana.

Al ir avanzando notaba que cada kilómetro que recorríamos de esta gran ciudad nos alejábamos cada vez más de los grandes edificios y comercios y llegábamos a una zona más residencial pero con mucha clase y sofisticación.
A la poca distancia, un par de kilómetros para ser precisa, notaba como grandes cerros se alzaban en aquella zona dándole un toque hermoso al área que si de por sí con estas casas antiguas se miraba hermoso, con aquellas montañas parecía un pueblo de ensueño.

Al llegar al final de la última calle noto como una casa grande de unos tres pisos con fachada de casa americana y un gran portal en la entrada nos recibía. No me lo podía creer, era la casa más hermosa que había visto. Nunca me imaginé que pudiera vivir en un lugar así.

  —Te gusta.—  Me dice Diana con gran asombro al voltear entre el asiento del auto para ver mi extrema alegría.

  — Si!...Es muy hermoso aquí. —  Le digo mientras abro la puerta del coche para bajarme a ver la gran casona que se alzaba frente A mi.

La casa tenía un gran toque, era como esas casas enormes que en los libros las describen como casas de grandes aventuras y misterios. Era muy hermosa y estaba rodeada de otras con el mismo porte y elegancia cómo está.  — que misterios guardara ahí adentro.—  me preguntaba mientras examinaba la fachada. lo que no sabía es que esta gran mansión por así llamarla tenía un enorme misterio que terminaría por descubrir y me vería envuelta en grandes misterios que estaban ansiosos de que les descubriera.