Sayuri
Bajé del autobús, no sin antes limpiarme las lágrimas.
Realmente no me esperaba eso, Shū, casado.
Suspiré, para entrar al gran edificio.
Omnisciente
Todos los estudiantes que asistían al instituto observaban sin discreción alguna a la chica, la cuál ignoraba las mismas. Cuando llegó a su casillero lo abrió para dejar sus libros y algunos cuadernos.
"Qué cliché..." pensó, sacó su celular verificando si había alguna notificación, pero éste no tenía nada.
—¿Eres nueva, verdad? —la castaña se asustó y cerró fuertemente el casillero. El chico, éste tenía el cabello de un color anaranjado y sus ojos eran amarillos, su cuerpo era alto y delgado, que le habló estaba a su lado izquierdo a la vez que recargaba su mano en los casilleros, por lo que su mano fue aplastada, o se suponía que debía de haber sido aplastada, ya que había traspasado la puerta del casillero. La chica asintió.
La contraria lo miró sin semblante alguno, más estaba sorprendida. —Tú... ¿Cómo-? —la pregunta quedó en el aire.
El pelinaranja sonrió. —Soy Ryuchi, un gusto. —estrechó su mano con la de la castaña, ella sólo dijo su nombre con una sonrisa. —Vamos, te mostraré la escuela y después te explicaré lo que acabas de ver. —bueno, fue algo rápido, pero la castaña ya conoció a alguien.
En menos de diez minutos recorrieron todo el instituto, entre risas y bromas. Hata que llegaron a los que sería su primera clase.
Álgebra.
El de pelo anaranjado suspiró frustrado. —Cuando el viejo entre, lo más seguro es que tendrás que presentarte, yo estaré sentando por... Allá. —señaló un pupitre hasta el fondo del aula. —¡Adiós! —se despidió para tomar su lugar.
En eso el profesor entró.
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Lilith y Eva... Su renacer. ||Diabolik Lovers||
De TodoSayuri ha fallecido... Los hermanos están rotos, la mujer que antes creían amar les había arrebatado a la mejor persona que podrían imaginarse. Pero, después de unos meses, regresa. Renace de entre los muertos junto con algo... O mejor dicho... Algu...
