Capitulo 3:"Amigos"

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Se sentía muy presionado.

Las miradas de desacuerdo ante su decisión lo desconcertaban.

Mahad no quería saber nada de Hasani. Seth menos, e Isis dudaba. No podía culparlos, porque al fin y al cabo realmente era un desconocido.

- Podría ser un espía mi Faraón -dijo su primo.- No confío en el -cruzó los brazos.- Estaba a punto de entrar a la sala de trono.

- Pero estaba muy confundido, se perdió -intervino Isis.- Además, en el pergamino se pide que sea alumno de Mahad...

- ¿Pero quién? ¿Cual pueblo? -preguntó Mahad. También ya empezaba a dudar.

- Eso lo iremos viendo -Atem se levantó de su asiento.- Pero mientras tanto se quedara en el palacio, no podemos dejarlo tirado.

- Pero Faraón... -quiso intervenir Mahad.

- He dicho que se quedara, y mientras que esté podrán hacerles las preguntas que quieran -caminó hasta la puerta, la cual se abrió y salio del salón de juntas, suspirando.- Mejor iré al jardín, de seguro Mana está allí.

(...)

El joven se sentó al lado de la morena. Le sonrió.- ¿Puedo sentarme? -preguntó con timidez. La joven asintió.

- ¡Claro que sí! -dijo con alegría.- Me siento muy feliz de tener compañía.-el joven le dedicó un pequeña sonrisa tímida y se sentó a su lado.

- ¿Acaso siempre estás sola?

Negó con la cabeza.- Las clases de Mahad son aburridas sin compañía. Desde que Atem se volvió Faraon está muy ocupado -comentó. Al darse cuenta que dijo el nombre de su amigo se tapó la boca.- ¡Olvida lo último que dije!

- Esta bien, no te preocupes -intentó calmarla.- Labios sellados -junto sus labios e hizo como si cerrara un cierre. Mana se río.- "Así que Atem..."

- ¿Estas ansioso por empezar?

- Estoy nervioso -se rascó el brazo.- No se como me irá... Tengo miedo de que desconfien de mi.

- ¡Claro que no! Yo si confío en ti -junto sus manos con las de él. Hasani se sorprendió.- Estoy muy segura que seremos grandes amigos.

Hasani se centró en los ojos verdes de Mana.

Era perfección pura.

- También pienso lo mismo -apretó sus manos.

Ambos sonrieron.

- ¿Te gustan las flores de Loto? -preguntó soltando lentamente sus manos, perdiendo la calidez de su tacto.

- Si, son hermosas -acerco una de sus manos a una flor de loto azul que flotaba en la fuente. La agarro entre sus manos.- Siempre me fascinaron las flores y lo que los dioses le ofrecen a la naturaleza. ¿Y a vos?

- Me a llamado la atención -dijo.- "Es lo que necesito"

- Ten -lo saco de sus pensamientos al sentir la flor en sus manos.- ¿Lo cuidarías por mí?

- Claro que sí -agradeció la gran calidez que portaba las manos de Mana.

- Parece que se están llevando bien -ambos se sorprendieron al escuchar una voz. Miraron al Frente.

- ¡Faraón!

(...)

Al estar ya en el jardín, los guardias reales se inclinaron ante el y volvieron a sus puestos. Según le contó Mahad, Mana estaba en el jardín leyendo como castigo. Ambos sabían internamente que Mana estaría haciendo todo lo contrario. Eso sería divertido de la situación.

Se adentró completamente, pasando por los rosales. Una gran palmera le daba sombra.

Se detuvo al escuchar una risa junto al agua cayendo.

Mana y fuente. Lo único que necesitaba saber.

Segundos después se encontró a Mana y Hasani tomados de las manos.


Incomodo.


Por instinto se escondió detrás de una de las palmeras. Sacaba a penas la cabeza para observarlos. Levantó una ceja por no comprender la escena que estaba presenciando.

"Yo también pienso lo mismo" -escuchó por parte de Hasani.

"¿Pensar que?" -se sintió más confundido que nunca. Vio como ambos se sonreían. Algo se revolvió en su estómago.

"¿Te gustan las flores de loto?"

"¿Por qué te interesaría saber eso?"

Como era de esperarse, y más de Mana, afirmó alegremente. Se dio cuenta que estaba tratando de alcanzar una. También de como Hasani ponía cara pensativa.- "¿Que pensará?"

Pero lo que más lo desconcertó fue el hecho que Mana juntara -de vuelta- sus manos pero con la flor. Comprobó aún con la piel bronceada del joven que se había sonrojado.

Bien, esto ya no le gustaba.

Sin más salió del escondite, y acercándose como si no hubiera visto nada, se puso frente a ellos.

- Parece que se están llevando bien -fue lo único que su boca logró decir.

- ¡Faraón! -dijo Mana sorprendida, sin soltar aún sus manos. Eso hizo que por un segundo Atem frunsa el ceño.- ¡Me alegra que la reunión termine!

- A mí también...

Hasani inclinó la cabeza en signo de respeto. Sin que el procese nada, Mana lo había levantado sin soltar aún sus manos.

- ¡Nos estamos llevando de maravilla!

Y Atem sonrió falsamente.




"El secreto del Loto Azul" Yu-Gi-Oh (AtemxMana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora