Capítulo 39.

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* Donde estas, me han dicho que has salido de casa

° YO... No quería estar en casa sola con tu tío

* Estoy en casa, necesito que vengas es hora de la comida

° Si, en minutos ire

Cuelgo y llegó a la auto, lo enciendo y me voy, tardo unos minutos y llego a casa, entró a la casa, llegó a la cocina y solo está su tío

Debo admitir, que jamás había visto así a Gustavo -Habló y lo mire seria -. Llegar a casa y que no esté su querida mujer sin respuesta alguna, lo puso histérico

Si me busca estaré  arriba -Hable y salí de la cocina, justamente topandome con Gustavo, estaba serio, estaba en pans color negro y una playera blanca, nuestros ojos se toparon, le decía lo e la chica o no, llego hacia mi y me abrazo y beso mi frente

Para la próxima porfavor, avisame a donde vayas -Se separó

Si tu me dices lo mismo -Hable seria y él negó

Nena -Habló en puchero y negué  

Quieres confianza -Hable y él asintió -. Tú también dame eso para confiar en ti

Subo las escaleras y voy a mi cuarto, siento los pasos detrás mío, me detiene una mano, me giro y Gustavo, me lleva a su cuarto lo cual es enorme, cierra la puerta con seguro , me mira -. Siéntate, si quiero que confíes en mí, por eso te voy a contar donde estaba

No era necesario cerrar la puerta de la habitación -Hable y él niega

No es solo eso -Suspira y presiento que esto será una larga charla, me siento en un sillón para dos personas, y es muy cómodo -. Se que estabas ahí, por lo que se que quieres saber la historia de mi madre y te la voy a contar

No era necesario esto, no quiero que te sientas presionado por la confianza -Hable

Solo escuchame necesito desahogarme con alguien -Habló y asiento

Mi tío siempre acoso a mi madre, mi padre no lo creí pues claro, como su propio hermano haría algo así, yo lo creía a mi madre, porque ya los había visto, pero mi padre tampoco me creía, una vez mi padre salió de viaje y yo estaba en mi cuarto, tenía una pésima cruda, un dia antes me fui de fiesta, mi madre estaba en su habitación, escuche un grito, cuando salí y llegué corriendo al cuarto de mi madre, no lo podía creer mi tió tenía a mi mama a la fuerza haciendola suya, la peor imagen de toda mi vida, el peor recuerdo, golpe a mi tió y justo en el momento justo que entró mi padre y culpo a mi madre de una maldita zorra -Lo mire y tenía los ojos cristalinos -. Nunca pude hacer nada

Me paro y lo abrazo por detras -. No digas más, no te tortures, entiendo que estabas con ella

Perdon por no decirte -Hablo y niego, de pongo frente a él  y me siento en la mesa, limpió sus lágrimas

En ese caso, puedes salir de casa las veces que quieras, si es por ella, yo lo entiendo, no me voy a entrometer -Hable y él me mira

Eres tan linda -Me abrazo y me tomo de la cintura para colocarme en sus piernas y abrazarme, me siento tranquila, nos quedamos por unos minutos y alguien toca la puerta

Sobrino -Estaba aquí, detrás de la puerta, Gustavo cierra los ojos

Ya quiero que se vaya -Hablo en bajo

Lamentablemente acaba de llegar nuestra pesadilla -Reí y él sonrío

Sobrino, es urgente -Toco y me pare, Gustavo se para y camina hacia la puerta, me siento de nuevo mirando hacia la puerta, Gustavo la abre y tío entra, me mira, alzo la ceja

La Princesa Del Narcotráfico IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora