La Princesa Del Narcotráfico II

Capítulo 45. Maratón Pt. 4

La comida está lista y estamos en la mesa, listos para comer o eso pensé, Marco ya comenzó a comer

Esto está delicioso -Hablo Marco mirándome 

Pues claro, lo hizo el amor de mi vida -Hablo Gustavo mirándome, niego 

La comida estuvo tranquila, hasta que fue la grandiosa hora de que Sam y Marco se vayan

Se debería hacer algo así en nuestra casa, una fiesta de piscina -Hablo Sam y Marco sonrió

Es una gran idea, una peda como los viejos tiempos -Hablo Marco y Gustavo soltó una risa

De acuerdo, la necesito -Hablo mirándolo, Sam se lo come con la mirada, está chica comienza a sacar de quicios, se fueron, la miro hasta que se va de la casa, cuando sube al auto, Marco no lo nota, ella se gira para despedirse pero ni siquiera levantó la mano solo la miro, ella solo me mira y entró a la casa, quiero estar sola, no quiero ver a nadie 

Alexa -La voz de Gustavo nisiquiera hace que me gire, subo las escaleras y voy a mi cuarto, cierro la puerta de un fuerte golpe, con seguro, me comienzo a desnudar, para entrar a la bañera, que por alguna razón esta lista, pongo algo de música a volumen alto y cierro la puerta del baño, entro esta relajante, cierro los ojos, respiro y me sumerjo... Las cosas están de color negro, salgo del agua con una gran bocada de aire, porque no pude ver nada, salgo de la bañera y me doy un baño seguido para ponerme la pijama, quitó el tapón para que se vaya el agua, hago mi rutina de noche y me recuesto en la cama, ni siquiera he quitado la música, el estómago se me comienza a revolver, me siento en la cama, el mareo es intenso, corro al baño y vomito todo lo de la comida, duró minutos en la taza, me levanto para lavarme la boca, le bajo al baño, llegó a la cama de nuevo, me recuesto, el mareo llega de nuevo, corro al baño de nuevo, comienzo a vomitar

Señorita -Una chica que trabaja para Gustavo corre hacia mi, me detiene el pelo, mi vista se nubla

Estoy bien -Hablo despacio

Le hablaré a su pro.. -Habla pero la interrumpo 

No estoy bien -Bajó la taza, trato de pararme pero no puedo 

Señorita no se ve nada bien, por favor déjeme ayudarla -Hablo y niego -. Esta muy palida 

Señorita Carrington - Martín corre hasta mi -. Que ha pasado, llama a un doctor 

Pero la señorita -Habla la chica

Corre -Martín le grita

Solo me han hecho daño los mariscos -Hable despacio y me acerque a la taza para vomitar

El doctor viene para acá -Hablo la chica, Martín me toma del pelo, para cuando terminó, me toma en brazos y me lleva a la cama, siento escalofríos -. No creo que hayan sido los mariscos

Martín la mira y me coloca un trapo húmedo en la frente -. Por qué lo dices

Todos comieron y a ninguno le hizo daño, por que a la señorita sí -Habló y comencé a toser 

Dónde está el señor Gustavo -Habló Martín 

En el gimnasio -Habló otra voz varonil -. Llegó el doctor

Todos se quitaron y comenzaron tomar mis síntomas, me hizo algunas preguntas, no se cuanto tiempo tiene aquí, pero quiero estar sola, me ha puesto una piquete y me mira -. Si no se siente bien, por favor hablame

Que le ha puesto -Hablo 

Un antídoto, comió algo que le haya hecho daño -Hablo y todos se miraron 

Mariscos -Hablo Martín 

Pero a los demás no les hizo daño -Hablo la señorita

El cuerpo de todos es diferente por lo que reacciona diferente a las defensas ella se pondrá bien -Hablo y las voces en la habitación comenzaron a quedar pocas, el sueño comenzó a hacerse pesado, hasta quedarme dormida