Lentamente mi corazon se cae como flores marchitas.
Las pisadas del caballo se hundían en el fango por lo poderoso de su andar, guiándose a través de la oscuridad del bosque, la bestia era tan majestuosa como el jinete que lo montaba. Luego de más de dos días de viaje, al fin el campamento apareció frente a sus ojos. La primera señal fueron las fogatas que iluminaban majestuosas, dándole la bienvenida.
Un omega alto y esbelto salió a recibir al jinete al reconocer las pisadas y los resoplidos del caballo. Ese trote era inconfundible. Enfundado en una túnica de tela vieja y desgastada, Taehyung le dio la bienvenida al campamento.
—¡Has vuelto!—Su sonrisa cuadrada era un bálsamo para las heridas del alfa.—¡Estaba tan preocupado por ti! ¿Qué noticias traes?
—Nada que tú debas saber.
—¡Ay, por favor!—El omega hizo un pequeño berrinche.—Me estoy ganando mi lugar y lo sabes.
—Cuando seas un alfa le diré a mi padre que te considere para general.—Bromeó Jungkook.
—Soy más capaz que cualquiera de ustedes. No soy un omega indefenso.
Y la luna sabia que era un omega de valor. Taehyung había sido liberado luego de que los invasores del norte lo tomarán como esclavo. Pero lejos de doblegarse, había peleado hasta que lograron rescatar su aldea. Habiendo perdido a su familia y tras quedarse sin hogar, él omega decidió seguir a las tropas del General Jeon. Y en honor a la verdad, en lugar de ser una molestia, era tan fuerte y valiente como cualquiera de los alfas que estaban al servicio del Rey.
—Aún te falta mucho para escuchar las estrategias de guerra.—El alfa descendió de la majestuosa bestia que montaba y le dio las riendas al omega.—Dale agua, comida y pásale un rastrillo. Se lo merece.
—¿Acaso soy tu sirviente?—Taehyung soltó un sonido de queja. Pero tomo las riendas del caballo.—Vámonos, Demonio. Tu amo es un estúpido pero tú no tienes la culpa. Pobrecito... ¿Te ha maltratado con sus exigencias?
—¿Queda algo de comida?
—Pan viejo.—Lo fastidio el omega. —¿Se te antoja?
—Comería hasta el heno que le darás a Demonio.
—En ese caso te conseguiré algo de las sobras que le dábamos a los cerdos en mi aldea.
Jungkook le acarició la cabeza con cariño a Taehyung.
—Eres adorable.
—Nada de adorable. Soy feroz.—Tae le tiro una mordida y se alejó riendo.
Jungkook enderezó su postura y avanzó hacia la tienda de su padre. Adentro se encontraba el General y el Príncipe Heredero, ambos alfas contemplaban en un mapa las futuras estrategias para la batalla.
—¿Qué noticias traes de nuestros enemigos?
Jungkook se inclinó hacia su padre y le hizo una reverencia al Príncipe.
—Se dirigen al paso Dong con alrededor de quinientos alfas. Estarán en esta aldea en tres días si no los detenemos. Su plan es atravesar toda la provincia desde el paso Dong, por esta ruta les será más sencillo avanzar hacia la capital. Si no los detenemos aquí, será casi imposible después.
El Príncipe Heredero gruño.
—¡Todo aquel que se atrevió a cruzar nuestras fronteras está destinado a morir! Vamos a detenerlos en el paso Dong. El terreno de esas montañas es rocoso y resulta muy difícil maniobrar allí. Con una ofensiva estratégicamente localizada para recibirlos en las afueras los tendremos acabados.
Jungkook miró con admiración al Príncipe. Kim Namjoon, el heredero al trono, no era un alfa cobarde. Se caracterizaba por no ser como los demás aristócratas que se escondían detrás de los soldados para protegerse. El alfa estaba al lado de su ejército, defendiendo a su pueblo. Con su metro ochenta y figura imponente, había nacido para liderar.
—Nuestros ejército es escaso. —Protestó el General.—Una confrontación así mermará drásticamente nuestros números.
Jungkook se plantó firme y encaro a los dos líderes.
—Con todo respeto, concuerdo con el Príncipe Heredero, padre. —Se requería de mucho valor para oponerse al General. Pero el joven alfa ya no tenía temor de ser castigado por su padre. Estaba curtido de tantas palizas.—Perderemos más de no intentarlo. Ni siquiera tendríamos que acercarnos tanto a ellos. Con un buen grupo de arqueros, reduciremos sus números sin exponernos tanto, hasta que sea seguro atacarlos con nuestra caballería.
El General Jeon iba a decir algo pero el Príncipe lo detuvo.
—¿Y tú estarías dispuesto a liderar el ataque y darnos la victoria, Jungkook?
Jungkook hizo una inclinación de cabeza y se llevó una mano al corazón.
—O moriré en el intento, Mi Señor.
—Bien. Prepare a sus hombres, General.—El Príncipe salió imponente de la tienda, su capa negra se ondeaba majestuosa tras él.—Cuando nuestros enemigos lleguen, la muerte los estará esperando.
Jungkook se esperaba el golpe de su padre por haber interrumpido y proponer sus ideas sin autorización. Pero el esperado castigo no llego. Levantó la mirada para ver a su padre mirándolo con lo que para el joven alfa no era nada más que orgullo.
—Si me decepcionas, la paliza que te daré no tendrá comparación. Me detendré hasta que vea que ya no respiras. ¿Está claro?
A Jungkook ya nada le importaba.
—Como gustes, padre.
La victoria de ese día fue solo un grano de arena en una inmensa playa de conflictos venideros.
El imperio del Rey Taejo llegó a su fin exactamente cinco años después de conspiraciones e intentos de derrocamiento, el monarca fue encontrado muerto junto a su reina. Asesinados. Las doncellas del palacio habían envenenado la comida bajo las órdenes del consejero real, quien estaba aliado con los invasores del norte y familias reales que deseaban el trono.
La guerra había comenzado.
Una lucha que destrozó aldeas enteras y ayudó a forjar el carácter de un joven alfa que dejó atrás la inocencia y maduro en el campo de batalla. Del alfa cobarde que se encogía ante las palizas del General no quedaba ni rastro alguno. Y menos aún del noble corazón que una vez albergó un amor puro e inocente hacia un omega ingrato.
Jeon Jungkook pronto se convirtió en un alfa despiadado, más aún que su padre el General. Pero eso es lo que las guerras hacían. Endurecían hasta al más noble de los corazones.
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¿Que tal les va pareciendo la historia? ¿Alguien ya se está imaginando el rumbo que va tomando la historia?Gracias infinitas x leer ❤️
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La Marca Del Alfa Jeon•|| Kookmin (Omegaverse)
FanfictionLa aldea de Jimin fue destruida hasta los cimientos y el único botín de guerra que quedó fue él. Delicado, hermoso sin comparación e inocente, es el tesoro que todo el mundo ansía poseer. Sin memoria y desconcertado cae preso en un enlace forjado po...