El Amor Es La Clave [HunHan]

Epílogo - Luhan.

Miré a la pequeña Yoona correr torpemente hacia su padre mientras Jisung la perseguía.

Habían pasado dos años desde ese día y hoy, finalmente, tenía la oportunidad de ver a Victoria. Habíamos viajado a casa de mis padres para pasar unos días con ellos y se me ocurrió preguntarle a mi papá Henry por ella, él dijo que estaba mucho mejor, que sus amigos creían que sería capaz de verla esta vez sin problema, pero que aún así tendría que entrar con un guardia, en caso de que comenzara a tener un episodio.

Miré la hora en mi celular y me levanté. Eran casi las dos de la tarde y tenía que irme. Las horas de visita comenzarían pronto.

-ShìXūn, tengo que irme.- Le dije y los dos niños se detuvieron y me miraron. Sehun asintió y cargó a Yoona mientras Jisung caminaba a su lado.

-¿Puedo ir contigo, papi?- Preguntó Jisung.- Yo puedo cuidarte. Soy casi tan fuerte como papá.

Sonreí ante lo adorable que era mi hijo. Jisung comenzaba a mostrar todas las señales de un alfa y estaba seguro que en un par de años, cuando se hiciera la prueba, ese sería su resultado. Sin embargo, en este momento, él era sólo un niño y yo no iba a exponerlo a un peligro.

-No cariño, no sabemos cómo reaccionará Victoria y no quiero que te pongas en peligro...pero puedes ir con papá a recogerme y te prometo que iremos a comer algo delicioso más tarde, ¿trato?

Jisung asintió emocionado y Yoona comenzó a aplaudir. La pequeña tenía una fascinación por su hermano y le encantaba verlo sonreír. Yo la entendía, Jisung había heredado muchas facciones de Sehun, pero cuando sonreía iluminaba el mundo. Al menos el mío.

Sehun le revolvió el pelo a nuestro hijo y dejó que cargara a su hermana mientras se acercaba a mí y me daba un casto beso en los labios.

-Ten mucho cuidado, Xiǎolù.

-Yo siempre, amor.- Le di una sonrisa antes de besarlo y apartarme un poco de él.- Te veo más tarde.

* * *

Saludé a la secretaria de la entrada en cuanto entré.

-Estoy aquí para visitar a Song Qian. Mi nombre es Luhan.- Le dije con una sonrisa tensa.

Sentía mi estómago hecho nudos por los nervios. Estaba preocupado que verme le hiciera mal y todo el progreso que tenía se arruinara. Yo no quería que Victoria se pusiera mal.

-El doctor Huang está esperándolo en su oficina, él lo acompañará en su visita.

Asentí y fui por donde la mujer me indicó. Toqué una vez y la voz del doctor me indicó que pasara.

-Es un gusto conocerlo en persona al fin, señor Wu... ¿o debo llamarlo señor Park?

-Soy Park desde hace siete años.- Le dije con una sonrisa y el hombre asintió.

-Bien, mire, la situación es así...La señora Song ha tenido una recuperación muy buena, de vez en cuando pregunta por usted, pero ya no lo ha llamado su hijo. Los primeros meses lo hacía.- Dijo el doctor y yo asentí.- Hace unas semanas se reunió con el señor Zhoumi y todo salió bien. Ella no actuó agresiva ni mucho menos...no sabemos cómo reaccionara cuando esté frente a usted, sin embargo.

-¿Cree que le afecte verme?

-A veces tiene episodios donde comienza a gritar que su hijo la necesita, se pone agresiva, pero no ha tenido uno en más de seis meses, pero es una posibilidad, por eso me gustaría acompañarlo.

Asentí y ambos salimos de la oficina hacia una sala de estar llena de almohadones y una estantería llena de libros.

Victoria estaba recostada ahí, leyendo un libro.

-Victoria, alguien ha venido a visitarte.- Llamó el doctor.

Victoria levantó la mirada de su libro y se encontró con la mía. Su rostro se convirtió en una sonrisa, que desapareció al instante, sustituida por una mueca de tristeza. Se levantó y se acercó tímidamente a nosotros.

-Hola doctor Huang...Luhan.- Dijo ella con la mirada gacha.

-¿No quieres que el señor Park esté aquí, Victoria?- Preguntó el doctor y vi a Victoria alzar la mirada rápidamente.

-Yo no...sí, sí quiero, pero me temo que estoy bastante avergonzada para enfrentarlo.

-¿Recuerdas lo que hemos hablado en tus sesiones? Dile cómo te sientes, tal vez eso te ayude.

-Yo...- Victoria me miró, sus ojos se llenaron de lágrimas.- Sé que una disculpa no es suficiente, Luhan...Te he hecho tanto daño que no sé cómo podré compensártelo...Estaba tan equivocada y...

-No estoy molesto contigo, Victoria.- Le dije tragando el nudo en mi garganta y sonriéndole.- Todo eso quedó en el pasado. Yo sólo...me gusta verte bien. Quería asegurarme que estabas bien.

-Lo estoy.- Dijo ella rápidamente.- El doctor Huang ha sido muy bueno conmigo, todos aquí lo son...También quería darte las gracias Luhan...Sé que tú y tu familia están pagando por mi tratamiento, a pesar de todo lo que les hice.

Yo me encogí de hombros.

-Yo sólo sugerí ayudarte, mi compañero fue quien se ofreció a pagar todo, al igual que Henry.

-Ya le he agradecido a Henry, pero... ¿podrías agradecerle a tu compañero de mi parte? Y también dile que lo siento.

Yo asentí con una sonrisa y después me distraje cuando nos pusimos a ver una película juntos. Cuando llamaron a Victoria para comer me levanté y me despedí.

-¿No te quedarás a comer?- Me preguntó y yo negué.

-No puedo, lo siento...Le prometí a mi hijo que iría a comer con ellos.- Le dije con una sonrisa y ella suspiró.

-Está bien, lo entiendo... ¿Puedo...puedo abrazarte?

Me acerqué a ella y la abracé con fuerza. Sentí como se sacudía mientras lloraba, pero no dejé que mis lágrimas salieran. Tenía que ser fuerte.

-Gracias por ser tan buena persona, Luhan...Estoy seguro de que eso es algo que traías en los genes. Probablemente lo sacaste de Henry.

Me reí y me despedí de Victoria, no sin antes prometerle llamarla pronto.

Cuando salí del instituto, Sehun y los niños me esperaban en el auto y yo sonreí mientras me acercaba a ellos.

Después de todos estos años, yo seguía muy enamorado de mi compañero y cada día agradecía al universo por darme a la mejor familia del mundo.