CUENTOS DE TERROR PARA NIÑOS QUE NO SON PARA NIÑOS

ABDUCCIÓN

De lo poco que se sabe del rancho de los Razz es que en su tiempo fueron de la mas grande familia con muchos terrenos llenos de gran cantidad de caballos y ganado por lo que fue una familia bastante acomodada y de gran alcurnia.

con el tiempo los trabajadores y la misma familia también comenzaron a descubrir que los caballos empezaban a desaparecer uno a uno por lo que su preocupación no hizo esperar; de igual modo intentaron de todo para averiguar lo que sucedía en sus tierras, cada velador de seguridad que cuidaba los establos comentaba que al principio todo parecía ir bien y no ocurría nada raro o sospechoso hasta que a la mañana siguiente se descubría una desaparición. 

eso fue suficiente para que la familia se angustiara mas y por lo mismo que instalaran cámaras de seguridad para descubrir que pasaba; lo mas extraño que pasaba era que a mediados de la madrugada las grabaciones se ponían en estática y que al mismo tiempo unos ruidos extraños se escuchaban, después todo parecía volver a la normalidad solo con la excepción de que un  animal desaparecía sin dejar rastro.

la familia comenzó a entrar en crisis y desesperación a tal grado de dejar todo e irse, pero los mas jóvenes no estaban de acuerdo en especial la joven Cornalina Razz que no quería dejar el lugar, en un ataque de ira, tristeza y rebeldía en especial, salio de la casa.

Esa noche todos la estuvieron  buscando por todo lados sin lograr resultado alguno; después del paso de las horas en la madrugada todos fueron testigos de como unas extrañas luces aparecieron en cielo acompañadas de un fuerte destello que tan pronto como apareció se desvaneció.

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Cornalina miraba hacia una enorme luz que la alumbraba mientras que al mismo tiempo varias figuras siniestras parecían seguirla, todo fue un gran caos y confusión, acompañado de un grito de profundo terror.

Con un gran grito se levanto asustada mientras que las luces de alrededor le alumbraban, se movía con tal desesperación mientras sus manos y pies estaban atadas con unas telas de fuerzas pegada a la cama, las enfermeras del hospital corrían a verla mientras que del cuarto salían unos estremecedores gritos...