Capítulo 11

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Dos meses después

Los meses que han pasado fueron muy largos y parecería que hubiera pasado más tiempo, las cosas no han mejorado... Han empeorado.

Akane se ha vuelto muy apegada a Mayu, y cuando digo muy apegadas es MUY apegada y no estoy exagerando, desde hace mucho tiempo Mayu ya no conversa conmigo, nos vemos en los recreos pero nadie habla conmigo durante la comida, todas hablan entre ellas y pareciera que yo no existo para ellas, mientras jugamos tampoco me prestan atención, fue ahí cuando Mayu y Akane se volvieron muy unidas: conversaban mucho las dos, se sentaban juntas, jugaban las dos, intercambiaban secretos, siempre hacían los trabajos juntas e iban a todas partes... Juntas.

Yo no sabía cómo sentirme, ella ya no me exigía cosas, ya no me pegaba, más bien no me decía nada, podría alejarme de ellas sin tener discusiones o problemas, podría iniciar de nuevo, podría ser libre... Pero no es lo que yo quiero.

Aquí nadie me aceptaría en sus grupos, porque desde el principio nadie me aceptó.... Solo ella, ya no tenía a nadie, Mayu ya no tenía lugar para mí en su corazón, pero yo no iba a dejar que me olvide o que me sacara de su vida completamente, aunque ella no sea mi amiga... Yo seguiré a su lado.

Días después

Estaba sentada en mi banca sola, pasaba todos los días por el puesto de Mayu intentando hacer que hablara conmigo, pero siempre me rechazaba, pero no me iba a rendir, siempre intentaba seguirla cómo siempre lo hacía, pero aveces se enojaba, pero no me importaba, cómo siempre ya que nadie se me acercaba en los tiempos libres, avía empezado a ver películas de terror, al principio me daba miedo pero recordaba lo que mi papá decía: "tu abuelo decía que no hay que tenerle miedo a nadie, ni si quiera al diablo".

Pensaba mucho en esas películas mientras pasaban los ratos libres, al parecer tenía mucha imaginación ya que me imaginaba a mi misma en las películas que veía e incluso agregaba escenas nuevas en mi cabeza, también inventaba historias que solo yo conocía y las pensaba mucho, incluso mientras estaba en clases.

Ahora justamente estaba pensado en una de esas historias hasta que alguien se para en frente de mi banca, cómo estaba distraída, ese alguien tuvo que llamarme dos veces... Era Mayu junto a Akane.

- Hola Nana - dijeron las dos al mismo tiempo, no saben cómo me molestaba que hablaran de esa manera, cómo si ellas se conocieran de toda la vida, ¡NO ES CIERTO!, Akane llegó este año, solo la conoce desde hace un par de meses, a mí me conoce desde el principios de curso, antes de entrar a primer grado, ¿y ahora ella es su mejor amiga? Cabe recalcar que esto es sarcástico, me molestaba tanto que alguien que acaba de llegar sea su preferida.
- Hola - dije con una sonrisa falsa dirigida a Akane, quien sonreía sínicamente.
- Queremos jugar contigo - dijo Mayu sonriendo, yo me puse feliz por el hecho de que volviera a hablarme y querer jugar conmigo, me levanté de mi banca y me paré en frente de ella.
- ¿A qué jugaremos? - pregunté muy entusiasmada.
- A las peleas - dijo aún sonriendo, yo por mi parte no sabía que decir, no me gustaba el juego, pero tampoco quería negarme porque era lo primero que me pedía después de no hablarme por mucho tiempo, así que dije...
- Está bien - dije con una sonrisa forzada.
- Pero esta vez pelearás con Akane y yo seré la referi de la pelea - dijo alejándose para darnos espacio.

Al saber que iba a pelear con Akane una parte de mi sí quiso pelear con ella, más que todo, trapear el piso con su cara por haberme quitado a mi mejor amiga y alejarla de mi... Voy a acabar contigo.

El vacíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora