Imposible. {Gareth Bale}

Capítulo 38.

-¿Cómo es que has perdido al bebé?-Dijo Gareth con lágrimas en los ojos.

-Porque cuando te fuiste sin decir nada, salí a buscarte y una panda de imbéciles me golpearon el estómago. Llevo toda la noche en el hospital, ¿sabes?-Dije y me fui a llorar a la habitación pero Gareth me siguió.

-Espera Selena.-Dijo sin resultado.

Entré en la habitación seguida de él y empecé a darle golpes a la pared.

-¿Por qué me pasa esto a mi? ¿Qué he hecho para merecerme esto?-Grité sin dejar de llorar.

-Selena mi amor cálmate. Todo está bien. Lo siento. Todo está bien. Es mi culpa, lo siento.-Dijo él también llorando cosa que me sorprendió.

-Te quiero Gareth. Te quiero.-Dije llorando mientras ponia mis manos en su cara y junté mi frente con la suya.

-Y yo a ti mi niña.-Y nos tumbamos en la cama abrazados hasta que caimos dormidos.

Yo estaba tan cansada que no me desperté hasta el día siguiente y por lo visto Gareth no se había movido de mi lado tampoco.

-Buenos días capitana. ¿Cómo has dormido?-Dijo acariciando mi pelo.

-Buenos días. Súper bien la verdad. Estaba muy cansada.-Dije.

-¿Te apetece si hoy vamos a pasar el día por ahí?-Preguntó él.

-Claro, claro que me apetece. Voy a ducharme.-Me levanté y me fui directa a la ducha.

-Yo me voy al baño de bajo a ducharme.-Gritó él.

Decidimos ir a comer a algún restaurante de la playa.

Paseabamos de la mano sin prisa disfrutando del buen día que hacía cuando derrepente vi a una pareja con un carrito y un bebé.

Me imaginé a mi con mi bebé paseando con Gareth y me eché a llorar.

-Eh, no llores mi vida. No es tu culpa.-Dijo cogiendome la cara con las manos haciendo que le mirara a los ojos.

-Pero no es justo. Era nuestro bebé.-No podía parar de llorar.

-Te quiero y te voy a querer siempre así que tendremos los hijos que quieras, ¿vale?-Dijo él abrazandome. Cosa que me calmó.

1 semana después...

Mañana vienen Elizabeth y Cristiano. Luke estaba con nosotros en casa pero esta noche iba a ir a casa de Luna y Juarmi a dormir ya que iban a irse de fiesta. Yo preferia disfrutar de la última noche a solas con Gareth.

-Voy a por una cosa a la cocina.-Dijo Gareth levantandose del sofá.

Al rato volvió con el bote de nata en la mano.

-¿Para qué quieres eso?-Pregunté sonriendo.

-Vamos a jugar va.-Dijo sonriendo.

-No creo que sea buena idea ya que...-Intenté decir pero cuando quise acabar la frase Gareth me levantó y me llevó hasta la habitación como si fuera un saco.

-Gareth sueltame por favor.-Dije sin parar de reir.

Cuando llegamos a la habitación me tumbó en la cama y me echó nata en la boca.

-Vamos a empezar.-Dijo sonriendo con cara de malo.

Yo no podia hablar y en menos de un segundo Gareth ya se estaba acabando toda la nata que me habia echado en los labios.

Nos pasamos así un buen rato. Y volvimos a lo de siempre. A sentirnos uno del otro.