Capítulo III

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Liam:

Me levanté de mi silla tratando de por fin despejar mi mente, los problemas de matemáticas eran difíciles, no entendía cómo era posible que el primer día de clases ya hubiesen dejado demasiada tarea; llevé la goma del lápiz que sostenía hacía mi boca y entonces pensé "¿Cómo estará Josh?", miré el reloj que estaba colgado en mi pared, eran casi las cuatro de la tarde, "¿Ya habrá llegado a casa?", Salí del cuarto y me dirigí a la cocina, antes de entrar un olor delicioso entró por mis fosas nasales e hizo que me gruñera el estómago, miré a mi madre la cual se encontraba aun preparando la comida, ella me devolvió la mirada. Esboce una sonrisa.

—Mami, ¿Puedes hablar a casa de Josh? —pregunté, ella me miró y sonrió.

—Claro —dijo mientras comenzaba a marcar el número en el teléfono fijo de la cocina, el sonido de espera se hizo presente para que después una voz se escuchara al otro lado de la línea —. ¿Hola?, si soy Karen, Liam me pidió marcar para hablar con Josh —traté acercar mi oreja discretamente para escuchar mejor la conversación —. Ah, entiendo, si ahora le pregunto —mamá puso su mano sobre el teléfono y me miró —Tía Linda dice que Josh ya llegó hace rato e invito a un amigo a su casa —hice una mueca, ¿Por qué no me invitó a mí? —dice que si quieres ir —negué enfadado, ella me miró con reproche — ¿Seguro?

—No quiero ir si hay alguien más con Josh —dije cruzándome de brazos.

—Lo siento Linda, Liam dice que tiene tarea y por eso no puede ir, si, nos vemos —con eso ultimo colgó el teléfono, acto seguido se giró y me miró —. Liam —su tono era el mismo que siempre hacía cuando me regañaba.

— ¿Por qué Josh invita a otros niños a jugar a su casa? —pregunté enfadado, se supone que yo era el mejor amigo de Josh.

—Hijo, Josh tiene derecho de invitar a otros amigos, así como tú —la única diferencia es que yo no tenía más amigos —y eso no significa que tú y él ya no se lleven bien, ¿Okey?, ahora, ayúdame a poner la mesa.

Josh:

Escuché como mamá me llamaba mientras sacudía levemente mi hombro, desperté y la miré ella besó mi frente para después salir de la habitación, hoy era el segundo día de clases y ya no tenía ganas de ir. Sacudí mi cabeza alejando esos pensamientos. Me puse la ropa que ella había dejado doblada sobre mi cama y bajé corriendo a desayunar.

—A un lado tortuga —Ben me empujó antes de que pudiera entrar al comedor haciendo que cayera de sentón al suelo. Me sacudí y sin tomarle mucha importancia me senté a la mesa.

Los huevos con tocino de mi mamá eran los mejores del mundo, gustoso terminé mi plato sin dejar una sola migaja y subí para cepillar mis dientes antes de tomar mi mochila, al bajar corrí hacía el auto el cual pronto arrancó. Miraba por la ventana el camino que me sabía de memoria y una vez que el auto se detuvo me despedí de mi mamá con un beso en la mejilla y de Ben sacándole la lengua, al dirigirme al portón pude divisar una cabellera marrón la cual reconocería en donde fuera.

— ¡Liam espera! —grité corriendo hacía donde se encontraba, sin embargo él ni se inmuto y siguió su camino ¿No me habrá escuchado?, sentí una mano golpear mi hombro miré hacía mi costado y ahí estaba Zayn sonriendo de lado.

—Solo venía a decirte que ya estas dentro — ¿Dentro? —ven, voy a presentarte con el resto —Zayn comenzó a caminar y sin permitirme dudar lo seguí, nos detuvimos frente a un grupo de chicos, todos mayores que yo —. Este es Josh, y ya es uno de nosotros, intenten no espantarlo —el tono burlesco era más que evidente en su voz, sentí sus miradas sobre mí y trague saliva.

¿Por amor o por odio? • Ziam •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora