Yo... Uff... Que difícil es empezar a escribir una y que historia. Bueno, primeramente tendría que presentarme, pero antes de decirles mi nombre les voy a decir quien soy, o quien NO soy; bueno no soy normal. ¿o si? ¿es normal no ser lo que uno llama normal?
No soy una chica a quien las cosas le fueron difíciles en la vida, nunca me toco sufrir problemas de dinero, ni problemas de divorcios de padres, ni problemas escolares, digamos que siempre tuve una vida lo suficientemente calmada como para aburrirme a limites insospechados. Lo cual no quiere decir que haya tenido una vida perfecta; muy por lo contrario, creo que tanto aburrimiento me llevaron a angustiarme por la nada misma .
Considero que una vida tranquila no es divertida, envidio aquellas personas que han experimentado todas las emociones, y que no estén siempre neutral, así me considero; neutral.
El tema es que en vez de jugar a las barbies yo leía cuentos infantiles y no tanto.
Siempre me gusto la libertad de los libros. A diferencia de las personas un libro lo puedes leer cuando quieras, a ratos perdidos y sin necesidad de dar ninguna muestra de respeto: al pasar las paginas bostezas o te ríes si te apeteces, con toda libertad.
Recuerdo tomar los libros que mi madre dejaba olvidados encima de las mesas o arriba de la tapa del retrete.
Pero por sobre todas las cosas: no tenia amigas. Literalmente y no estoy exagerando, no tenia a una sola amiga. Siempre fui demasiado buena, creo que ese es mi problema. Lo que decían de mi me afectaba absolutamente demasiado y, seamos sinceros, los comentarios de los infantes pueden ser muy destructivos. Sobre todo si tienes 15 años y pesas 89 kilos. Si, 89 kilos. Media poco mas que un elfo enano y ya pesaba mas que Santa Claus. Era escandalosamente gorda. Abominable. Moby Dick en persona. Bueno quizás no tanto, pero eso pensaba YO que los demás pensaban de mi. Hasta hace poco creo que mi imagen personal era buena, que mi autoestima era elevada y reposaba en limites correctos o esperados. Pero después me di cuenta de que no era, que no tenia amigas por ser gorda, sino que era gorda porque no tenia amigas ¿entiendes?
Mis padres son todo para mi, los únicos en los que mi confianza descansa, se que me quieren como soy y no juegan conmigo, juegan por mi. Cuando era mas pequeña dieron todo por mi, es mi deber dar todo por ellos.
Me dejo guiar por los consejos y las miles de historias que he leído, no se tomar una decisión propia. He vivido en un mundo de entonaciones en el cual la realidad no existe, o si existe solo no tengo el valor suficiente para verla. Supongo que es parte la realidad de la vida.
Tengo miedo a descubrir esa realidad y salir a ella, tengo miedo a fracasar. Si, tengo miedo al fracaso. Por eso odio los exámenes y odio que mucha gente lea esto y pueda criticarme.
Pero con el tiempo y con los retos de mi vida me di cuenta de que lo que piensa la gente no me interesa, o que al menos puedo fingir que no me interesa y puedo hacer que la gente crea que soy autosuficiente (aunque en realidad crean que dependo de mis padres)
Lo cierto es que me interesa por demás de la linea de lo normal o esperado. Si, claro. Siempre excediendo esa linea.
Esta es mi primera advertencia, quien por gusto se enreda, que se salga como pueda.
Esa soy yo: Margo o Mary como me llaman mis padres.
...
Hola, me gustaría agradecerles por su lectura, si les ha gustado da like y comenta.
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La vida de Margo
Teen FictionMargo se ve frustrada por su repentina obsesión con el amor. Su vida en estos momentos se define; en como tratar de conseguir el amor, estudiar, cuidar su casa, trabajar. Sumándole a esto sus problemas de salud.