Capítulo 7: Todo en orden otra vez...

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  Séptima entrega, Ángeles 

 Las chicas no estaban al despertar, ni Valen, ni Mil, ni Mateo. Apretados los tres nos recostábamos sobre la seca maleza esperando el regreso de los chicos, pero cada vez se hacia mas y mas grande el retraso y menor nuestra paciencia. Decidimos bajar, pensando que los demás no lo aprobarían pero su ausencia hacia nulo su voto o voz.

  -¿Pasa algo, preciosa? -se me acercó Alex, entre sus abrigadas camperas- Te ves inquieta...

 -Es solo que, cuando Val o Mili no están me ponen nerviosa, con las cosas que pasaron extraño lo que se siente dormir bajo el calor de una manta en una cama decente...

  -¿No te parece suficiente el calor que emané cuando te abracé a la noche? 

Un pequeño y corto silencio me invadió, él sabe que si me agradó.

  -Sabes que mentiría si lo hago...


 Soltó una sonrisa y me abrazo por lo bajo, era toda una tentación y claramente sabía lo que hacía. Comenzamos a caminar de vuelta a la caseta, las cosas deberían mejorar ya pasadas las 12 horas, Mili pasos atrás nos acompañaba procurando no estorbar entre la escena, en cierto punto era placentero no preocuparme por lo que ella hiciera, a diferencia de la otra Mili ella es tranquila y solo se preocupa por sus series de anime. Mil tiende a entrometerse sin saber cuando molesta en el momento.

 No se vio ni un alma al llegar hasta allí, todo era silencio y vació, ¿se habían ido?   cómo podrían... Cruzamos la pesada puerta de entrada y nos topamos con más de lo mismo. Nos dispersamos por todo el lugar, deseando encontrar a alguien, pero nada.

  -Chicos... escuche un ruido por aquí... -Mili nos guió entre susurros hacia la fuente de origen de este y fue donde nos topamos con otra puerta, ya perdía su toque sospechoso, al abrirla descubrimos a todos nuestros compañeros...al menos aquellos que permanecían con vida...


 La profesora nos miró con amenaza reflejada en sus ojos, nos temían y por un solo segundo ella... ella pareció no reconocer a sus propios alumnos. Tenía un antiguo y añejo pilar de mesa entre sus manos, mientras que sus discípulos se ocultaban debajo de las mesas que se situaban a las esquinas de la sala principal, el afecto sobre el pequeño incidente ocurrido recientemente complicó las cosas y todos se veían muy mal... Digamos que, los entiendo pero prefiero no pensar en ello ahora, Alexis es una gran distracción...

  Pasaron unos segundos con las manos en alto hasta que nos reconocieran y nos recibieran con un rostro preocupado y un abrazo, formaron una ronda alrededor nuestro haciéndonos preguntas tales como; <¿DÓNDE ESTABAN?> o <¿POR QUE DESAPARECIERON?

  -Nosotras les advertimos, ustedes insistieron en ocultarlo... Vimos al asesino y nos ocultamos pensando que... pudiera venir a matarnos... por ser testigos...

  -¿¿NO PENSARON QUE NOS PREOCUPABAN?? ¿DÓNDE ESTÁ VALENTINA O MILAGROS O MATEO?? - la maestra se acercó rápidamente y tomándonos de los hombros comenzó a gritar - ¿POR QUE HICIERON ALGO TAN EGOISTA?

  -No creían en ellas, por qué deberían confiar, principalmente en usted profesora-   intentó justificar Alexis.

   Ella retrocedió unos pasos y luego escuchamos un inesperado: <¿y Mili?> que salió de la boca de Franco, Mili se aproximo hacia su rinconcito y le respondió: <Como creo que no te refieres a mí te diré que si piensas hacerle algo te asesinaré, porque sé lo que pasó... Profe, ellos tres desaparecieron al amanecer.>

Crimen Imperfecto: BarilocheWhere stories live. Discover now