ᴄᴏɴғɪᴅᴇɴᴛ [∂íα 4]

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Kirishima había terminado de vendar el brazo izquierdo de Bakugou y había comenzado con el diestro, su pelea con Midoriya le había dejado varias heridas, en especial dos grandes que habían abierto la piel de su cuerpo.

Ambos se encontraban en silencio, el pelirrojo había escuchado el pequeño revuelo que tenían en la sala y cuando escuchó a su vecino llegar a su habitación, salió a verlo, estaba sorprendido por sus palabras y al preguntar que había pasado Bakugou simplemente se quedó en silencio y entró a su habitación dejando la puerta abierta.

Eijirou había entendido el mensaje, por lo que ahora se encontraban ambos en la habitación del rubio, más de cerca, puso un curita en su mejilla, donde esta había comenzando a inflamarse, Kirishima había logrado escuchar de una pelea con el peliverde pero no sabía la razón.

Las manos de Bakugou se mantenían apoyadas sobre sus piernas luego de haber sido vendadas, Eijirou llevó una de sus manos hasta la izquierda del rubio y la coloco encima.

-¿Quieres hablar de lo que pasó?

Kirishima sabía que en cualquier otra situación, Bakugou le habría hecho estallar la cara pero en esta ocasión nada vino, solo silencio.

-Eres mi bro ¿no? Creo que has pasado por mucho y no te he preguntado de forma correcta el como te sientes. Y solo... -el pelirrojo soltó un pequeño suspiro y agradeció que estuviera algo obscuro pues lo próximo había hecho enrojecer sus mejillas -Eres tan importante para mi que no puedo evitar preocuparme de esta forma.

Bakugou se había tensado al escuchar aquello y se pudo notar en su cuerpo que apretó su puño, lo que hizo que Kirishima retirará su mano, el rubio no sabe si fue por impulso o por algo más pero volvió a tomarla para mantenerse unidos, no lograba entenderlo bien.

Kirishima también había estado detrás de él, también había sido insultado, rechazado y seguía a su lado, tal como Midoriya pero lo sentía tan diferente. Con Eijirou no se sentía fastidiado, no le molestaba hacer equipo, ni siquiera sentía su orgullo herido por ser rescatado y salir volando para tomar su mano, con el pelirrojo todo era diferente.
Sintió que Eijirou había entrelazado sus dedos y sólo le siguió para terminar sediendo a él, como siempre.

Kirishima siempre había tenido algo que le había hecho aceptarlo y tratarlo como un igual, no lo veía como alguien débil o un estorbo, estaba acostumbrado a su compañía que sí se fuera de su lado podría sentirse raro.

Sin embargo, aún no sabía cómo explicarle el como se sentía, ni siquiera pudo retenerlo cuando soltó su mano y se levantó de la cama.

-Tú puedes contar conmigo para lo que quieras, puedes hablar, gritarme, incluso aguantare tus explosiones, sabes que mi quirk lo puede aguantar -Kirishima alzó su puño poniendo su brazo duro, sonriendo a su amigo pero no vino nada de él -Trata de dormir, vendré antes de ir a clases. -lo observó un poco más y salió de la habitación.

Katsuki apretó ambos puños con fuerza ¿por qué no le dijo nada? Eijirou había estado para él desde que lo conoció. Por supuesto que Bakugou no era tonto, podía notar como sus compañeros lo juzgaron desde el inicio y mantuvieron ciega distancia con él pero Kirishima fue diferente, él insistió en quedarse a su lado sin importar que.

Habían pasado un par de minutos desde que el pelirrojo había salido de la habitación, se sentó en su cama y apoyó su espalda contra la pared que separaba la habitación con el pelirrojo, luego de unos minutos, esperando que el otro estuviera dormido, comenzó a hablar.

-Es culpa mía, que All Might tuviera que retirarse, so hubiera sido más fuerte, si yo fuera realmente fuerte, hubiera matado a miembro de la ligar. En lugar de eso, ustedes bola de idiotas bastardos, tuvieron que ir a rescatarme poniendo su puta vida en riesgo y haciendo que All Migh revelará su secreto. Acabe con él, con el simbolo de la paz. No soy más que puta basura.

Todo se quedó silencio, aunque era lo que esperaba. Luego de un par de segundos después el sonido de la cama vecina, pasos corriendo y puertas empujadas, ya tenía al pelirrojo sujeto de su cuello, abrazándolo fuertemente. El rubio abrió los ojos por la sorpresa.

-No es tu culpa y no eres débil, eres más fuerte que cualquiera de nosotros. Es por eso que la liga te quería, por lo valioso que eres. Estoy seguro que cualquiera de nosotros hubiera cometido cualquier error que nos costará la vida pero tú, te mantuviste firme. Eres tan masculino, Bakugou, eres el hombre más masculino que conozco.

¿Por qué Eijirou siempre lo hacía sentir de esa forma? ¿Por qué no se sentía débil con él y creía sus palabras? Cada maldita palabra la sintió tan real porque sabía que Kirishima no sería capaz de mentirle nunca.
Se aferró a su camisa con fuerza sintiendo como sus lágrimas corrían por sus mejillas, mierda, se sentía jodidamente mejor luego de todo eso.
Eijirou tenía algo especial que sentía que podía confiar en él, apoyarse en él.

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Bakugou abrió los ojos luego de sentir pequeñas cosquillas en su nariz. Lo único que veía eran los cabellos rojos y sueltos de su amigo, luego de unos segundos notó que su mano se mantenía sujeta a la cintura del otro. Seguramente se había quedado dormido mientras se aferraba a él y habían dormido juntos.
Bueno, es Kirishima quien está a su lado, así que sabe que no hay nada de que preocuparse porque luego de la noche anterior, sabía que Eijirou era en quien más podría confiar.

Fin

KiriBaku Week 2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora