Capítulo 6.

491 36 7
                                    

Narra Tn.

—¡Al fin te encuentro, estúpido Guren! —gritó Yuu-chan corriendo hacia Guren con las intenciones de patearlo en la cara, pero Guren le agarró el pie.

—Sigues siendo tan predecible como siempre —dijo Guren aún con el pie de Yuu en su mano, y éste último quería zafarse.

Yo llegué caminando detrás de Yuu.

Yuu-chan logró zafarse, resbaló y corrió hacía atrás para no caerse. Chocó conmigo y detuve su caída.

—Me vendría bien algo de diversión tras haber escuchado a esos idiotas —dijo Guren.

—¡No tiene nada de divertido! —dijo Yuu mientras se liberaba de mi agarre—¡¿Cómo te atreves a desaparecer por diez días sin haberme dado mi arma demoníaca?!

—¡Eso!

—¿Tanto ansían la venganza?

—¡Por supuesto que si! ¡Es mi única razón de vivir! —dijo Yuu.

—¡Eso, eso! —decía yo.

—La única razón, ¿eh? —Guren nos miró —De acuerdo. ¿Quieren formar un contrato con un demonio? Después los mandaré al campo de batalla.

—¡¿Eh?! ¡¿En serio?! —preguntó Yuu-chan.

—Si, ¿por qué no? Olvídense del entrenamiento —Guren puso una mano en mi cabeza —Pero si la arruinan será su culpa.

—¡Hecho! ¡Ningún problema! —se alegró Yuu-chan —Solo quita tus sucias manos de mi hermana —jaló de mi brazo y me abrazó protectoramente.

—Yuu-nii, déjame —me quise zafar.

—Eres un verdadero idiota, ¿lo sabías? —le dijo Guren a Yuu riendo y yo hice lo mismo. Reí. —Ah, por cierto, Yuu.

Yuu volteó. Guren le dio una patada en la cabeza—¡Como vuelvas a tratar de darme una patada voladora te mato!

Yuu cayó inconsciente al piso.

—Qué cansador esa tratar con idiotas —dijo Guren mientras se iba.

—Te entiendo —le dije y cargué a Yuu.

(…)

Yuu-chan al rato despertó y se fue al comedor. Luego lo alcanzaría.

Una vez allí vi a Shinoa muy pero muy cerca del rostro y del cuerpo de mi hermano. Y Yuu-chan sonrojado.

Me dio un tic en el ojo y una venita sobresalió de mi frente.

Fui caminando hacia ellos enojada y cuando llegué. Aparté a Yuu-chan de ella y lo abracé posesivamente.

—Mío.

—Qué posesiva eres, Tn-chan —dijo Shinoa con burla.

Fruncí el ceño y escondí mi cara en el pecho de Yuu-chan. Éste último acarició mi cabeza, luego de reír y besó mi frente.

Shinoa se fue.

—Al fin podremos destruír a esos malditos vampiros —dijo Yuu-chan mirándome.

—Si... Yo soy una te lo recuerdo y es hora de que me alimentes —dije mirando hacia su cara.

—Claro —dijo y corrió su camisa un poco para que mordiese su cuello y así lo hice. Él rodeó mi cintura y yo puse mia brazos alrededor de su cuello para que pareciera como si nos abrazaramos.

Me separé y me limpié—Vamos.

(…)

La profesora nos había devuelto los exámenes, dijo que dependiendo de la nota de nuestros exámenes era el rango del arma que se nos daría.

Obtuve cien en todos los exámenes... No había estudiado nada.

—¡¿Cien?! —gritó Yuu-chan mirando mis exámenes.

Luego le dieron los de él... Cero en todos.

—Ooh... Te ayudaré, Yuu-nii—dije observando su examen.

Shinoa apareció detrás de Yuu para ver sus notas y él las tapó. Ella insistía en que la dejará ver.

—Qué pasada.

Shinoa se lo sacó y Yuu la persiguió, Shinoa gritaba y todos miraban.

Me levanté y fui hacia ellos que peleaban.

Cuando Yuu la atrapó, ella ya no tenía el examen. Lo había dejado en una mesa donde los chicos pudieran verlo.

Había escrito las respuestas en Hiragana el idiota.

Me acerqué a los chicos y les arrebaté el examen y golpeé a todos.

—Dejen de joder —los miré mal y le devolví el examen a Yuu.

Me volví a sentar.

Yuu fue a hablar con Shinoa.

Cómo estuvimos toda nuestra infancia entre vampiros se nos da, o al menos a mí, muy bien el inglés y el latín.

Ahora los que peleaban era Yuu-chan y Kimizuki.

Luego entró Guren. Yo solo golpeaba mi cabeza contra la mesa cansada de todo.

Hasta que Kimizuki dijo que ya eramos lo suficientemente fuertes como para tener un arma demoníaca.

—Qué ilusos... ¿En serio creen estar preparados para eso? —preguntó Guren.

—¡Por supuesto que lo estamos! —dijo Yuu-chan — Kimizuki puede que no, pero Tn y yo estamos más que listos.

—¡Cierra la boca! —dijo Kimizuki.

—¡¿Por qué no la cierras tú?!

—Callense los dos —dije con la voz sombría. Se callaron.

Se callaron si... Pero se pegaron.

—¡Si alguien lo arruina que se culpe a sí mismo por no entrenar lo suficiente! —dijo Guren sacando su espada, de ella salió una especie de humo negro.

Y clavó su espada en el piso. Todos empezaron a caerse y a agarrarse el pecho, todo se sacudida y era violeta con esa especie de humo saliendo del suelo.

Todos estaban en el piso, menos Yuu-chan, Yoichi y yo, que me había levantado para frenar a Yuu-chan. Kimizuki apenas se mantenía en pie. Shinoa y Kaito también estaban de pie.

—¿Qué está pasando? —preguntó Yuu-chan.

—No sé yo—dije mientras miraba a mi alrededor.

Luego todo volvió a la normalidad.

Jajajaja Guren le dijo a Shinoa que se muera. Me cae bien Guren.

Los que seguían de pie teníamos que seguir a Guren y eso hicimos.

Todos estaban de acuerdo con que Yoichi regresará porque era muy débil.

Yo lo abracé, no quería que se fuera, él debía ser más fuerte. Además, me había encariñado con él. Es muy lindooooooo.

Y al final seguimos.

Fuimos a un ascensor y bajamos. Claro sin antes una "pelea" entre Kimizuki y Yuu-chan.

Cuando llegamos entramos a una habitación rara.

Habían cuatro caras raras de demonios con colmillos raros y feos.

Bueno, estas armas pertenecían al demonio Negro, por lo tanto, son las más poderosas.

Guren nos dijo que eligieramos las armas que más nos gustara y fuéramos al círculo que había en cada demonio.

Yuu-chan y yo nos sentimos atraídos por dos katanas iguales que habían en el demonio con un colmillo para arribe y el otro para abajo.

Saqué la katana y me posicioné en el circulo de estrella. Y todo se oscureció.

¿Puedo besarte? (Mika x Tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora