#06

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Harry’s POV:

Tanto que decían que iban a hacer una fiesta de disfraces que al final terminó siendo una mentira; va a ser una fiesta común y corriente.

Me siento sobre la cama observando cada movimiento que realiza Isabella, una locura más que cometa y tendré que ir a hablar con Spelbman. Isa está buscando ropa para esta noche; hace ya como cuarenta minutos que está así.

—Hum, esto. —Dice mientras que tira un short blanco a mi cama— y quizá esto veo que sostiene una remera negra con una calavera dibujada, la parte trasera le dejaría semidescubierta su espalda.

— ¿Y por qué no aquel vestido? —señalo con la cabeza hacia el montón de ropa; un vestido rojo está en la superficie.

— ¿Vos decís? —me frunce el ceño.

—Sí, va, no lo sé, solamente te daba mi opinión.

—Está bien —tira su ropa al montón y agarra el vestido rojo corto y unos zapatos negros—, me iré a bañar, ya vuelvo.

Asiento una vez y la veo caminar hacia el baño. Me levanto de mi cama y me dirijo hacia mi armario. Abro la puerta y recorro con mi vista todo el guardarropa; me decido por una camisa celeste y un jean blanco.

Puedo escuchar a Isabella cantar desde el baño: “I feel so close to you right now…”

Niego con la cabeza pero no puedo evitar sonreír. Me bañé hace una hora asique me puedo cambiar tranquilamente. Me saco la remera y el jogging por lo que quedo en bóxer. Camino por la habitación para buscar el desodorante hasta que escucho un ruido.

Un golpe que proviene del baño.

Isabella.

Corro en dirección al baño y comienzo a tener la duda de si debo o no abrir la puerta; la abro. Veo a Isabella envuelta en la toalla debajo de la lluvia, ya está empapada; se calló. Me deslizo por el baño hasta que llego hacia ella y al intentar ayudarla a levantarse, también me comienzo a mojar.

— ¿Estás bien? —pequeñas gotas se deslizan por mi cara. Ella solo me observa —Hey.

—Ah, sí, ¿Qué? —frunce el ceño.

—Te pregunté si estás bien.

—Ah, sí. Gracias por… hum, ayudarme. —se aferra un poco más la toalla a su cuerpo.

En todo este último rato no me percato de que aún seguimos debajo de la lluvia, sino que le otorgo atención a color de los ojos de Isabella, son raros y lindos.

— ¿Qué te pasó? —aún no la he soltado.

—Nada, solo quería saber qué tan bueno era el suelo para poder bañarse acostada —pone los ojos en blanco y ríe — ¿No me vas a soltar? —mis manos están rodeando su cintura, ella apoya ambos manos en mi pecho separándome de ella.

—Sí, claro —me paso una mano por la nuca— entonces… dejo que te hum… bañes tranquila, solo ten cuidado —frunzo el ceño y salgo del baño.

Me vuelvo a secar con la toalla mi cuerpo y luego el cabello. Me cambio para dentro de un rato ir al SUM. Tomo un poco de gel y lo paso por mi cabello; un poco de perfume y listo.

Me recuesto en la cama, conecto los auriculares y me pongo a escuchar música un rato, cierro los ojos y puedo imaginarme lo que dice cada canción, puedo ser parte de ellas.

Luego de seis canciones y aún con los ojos cerrados, siento la sensación de que alguien me está mirando; abro los ojos y ahí es cuando me doy cuenta de que estoy en lo cierto, Isabella se encuentra sonriendo, los labios del mismo color del vestido y los ojos maquillados de un modo en que se los hace resaltar. Su cabello está suelto, sus ondas al natural, está… linda.

Toxic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora