Capítulo 11. Mi vida diaria en una misión.

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Narrador POV:

Sábado 3 de abril, 11:22 am, Centro comercial de Shibuya Steam. Las puertas estaban cerradas y el edificio se encontraba rodeado por la policía. Cientos de personas encerradas dentro las puertas metálicas que aislaban el edificio desde el exterior, la única pista de que ocurría en el interior del edificio: una voz ronca que hablaba a través de los altavoces.

-¡Atención! ¡Al habla el líder de la Organización Goblin de Constructores, Saqueadores y Don nadies! ¡G.O.B.L.N!- comenzó a hablar desde el altavoz de la sala de dirección el líder del grupo terrorista, un ser humanoide de piel verde con orejas y nariz puntiagudas y baja estatura -Nos hemos adueñado de este centro comercial y reclamamos como nuestra su mercancía y todo el dinero en efectivo de sus tiendas y su clientes, pero no se apuren, los goblins no somos bárbaros, en cuanto nuestros hombres hayan tomado hasta el último yen y producto de nuestro interés nos marcharemos sin tocar a un solo rehén... pero si encontramos a un solo policía entrando en este edificio, volaremos la plaza de la fuente donde tenemos reunidos a los rehenes, y para que vean que no vamos de farol...- el jefe goblin sacó un mando a distancia de su bolsillo e hizo explotar una parte del edificio, el piso superior voló en pedazos volatilizando la mercancía que se encontraba ahí reunida -Díganle adiós a la sección de ropa de caballero. ¡Huajajajajajaja!- dijo una carcajada -Y no crean que no nos daremos cuenta si entra alguien, hemos tomado la sala de control y tenemos goblins de sobra por cada rincón de este centro comercial. Desalojaremos el edificio en 6 horas, hasta entonces... no quiero un maldito movimiento. Líder verde, corto-

Desde una tienda de campaña cercana al edificio, se reunían el jefe de la policía junto con el secretario de asuntos exteriores y el director del centro comercial, sin duda esta era una situación de crisis.

-¡Maldita sea!- gritó el jefe de la policía dando un golpe a la mesa -¡Unos orcos tomando rehenes en una pequeña tienda de manga es una cosa, pero goblins en un centro comercial entero es otra! ¡Le digo que hay que ser mas rigurosos con los semihumanos que entran y salen del país!-

-Hemos investigado a los goblins que han conseguido captar las cámaras, señor- informó una agente -Muchos de ellos son goblins que entraron en el país por negocios según afirmaban en sus papeles, sospechamos que era una tapadera para reunirse aquí en secreto-

-¿Cuántos son?-

-Creemos que alrededor de setenta...-

-¿Solo setenta?- preguntó una voz que apareció per detrás -Tienen suerte, los goblins suelen atacar en grupos mucho más numerosos-

-¡Oiga ¿Quién es usted?¡- preguntó el jefe de policía mirando al hombre rubio con gafas de sol y fular que había aparecido de la nada.

-No se preocupe, me manda Smith para solucionar su problema-

-¿Smith-san?- preguntó el secretario -¿Acaso es usted un compañero suyo?-

-No soy más que un subordinado- explicó -Pero mi equipo está mas que entusiasmado por participar en una operación como esta-

-¿Me está diciendo que Smith nos ha mandado a un novato contra un edificio entero llenos de terroristas? ¡¿Acaso es una broma?!-

-No se preocupe. Los goblins pueden ser numerosos y muy astutos, pero también son cobardes- explicó -Estoy casi seguro que la amenaza de explosión no era mas que un farol-

-¿Qué le hace estar tan seguro?-

-Volaron la sección de ropa de caballeros ¿verdad?- preguntó -Si es cierto que tienen reunidos a los rehenes significa que allí no había nadie, además estaba en uno de los pisos superiores, por lo que no comprometía la estructura del edificio, y dudo mucho que les interesara esa mercancía-

Mi vida diaria con chicas M.O.N. (M.O.N. Musu.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora