Mi vida diaria con chicas M.O.N. (M.O.N. Musu.)

Capítulo 12. Mi vida diaria como coordinador.

Narrador POV:

En la casa de nuestro anfitrión favorito, encontramos sentadas solas en la sala de estar a una unicornio sosteniendo unas pancartas junto a una jackalope tratando de concentrarse, mientras un baso de chupitos y una botella de whisky permanecían en la mesa. No se trataba de un simple juego de beber, era la forma en la que

-Muy bien Kalolo-san, ahora intenta traducir esta frase: 私の家は大きい-

Kalolo se concentró en leer el texto, tratando de recordar el significado de cada kanji por separado -My... house... is... big?-

-Muy bien Kalolo-san- felicitó la rubia del cuerno que salía de su frente -Ten, te has ganado otro trago- dijo sirviendo otro trago de whisky en el pequeño vaso que había sobre la mesa.

-¡Yay!- dijo Kalolo alegre tomándoselo de un trago.

De manera inesperada, su anfitrión llegó a casa sin compañía, pues este había salido para proseguir con el entrenamiento de las chicas que formaban parte del escuadrón. -¡Ya estoy en casa!- saludó.

-Oh, Toru-san, bienvenido- saludó Keros -¡Hiiiiii! :3- hizo de igual modo Kalolo.

El rubio no tardó en fijarse en las pancartas que Keros sostenía y en seguida dedujo lo que estaban haciendo -Oh ¿Estás enseñando a Kalolo a leer el Japonés?- preguntó.

-Así es. Me sirve para pasar el rato cuando me quedo con ella sola en casa- admitió la unicornio -Además, no tengo muchas más cosas que hacer dado que no puedo salir sin compañía...-

-¿Dónde están las demás, master?- preguntó la lebrilope.

-Las he dejado en el centro para que entrenen, como ahora trabajan para el gobierno tienen permiso para andar por la calle sin acompañante. Así aprenden a ser más independientes- respondió -Yo solo he vuelto porque tengo trabajo de coordinador que hacer por la zona-

-¡Oye, oye master!- decía la peli-plateada llamando su atención -¡Deberías llevarnos a nosotras también!- propuso.

-¡Eh? ¿Pero que estás diciendo, Kalolo-san?- preguntó Keros sorprendida.

-Es que aquí todo el día me aburro... y no puedo salir de casa hasta que me vuelvan a llamar de la revista- dijo inflando los mofletes.

-Kalolo-san, no seas tonta- dijo Keros -Toru-san tiene cosas más importantes que hacer que llevarnos de paseo mientras trabaja, él tiene que ocuparse de hacer inspecciones y otros asuntos importantes que...-

-Claro, me parece bien- contestó él sin mas dejando sin palabras a la equina mágica.

-¡Yippie! ¡Vamos de excursión!- celebró alegre la jackalope.

Al rato, los tres se encontraban caminando por el barrio de camino a los diferentes destinos de su anfitrión como coordinador. Mientras caminaban, Keros le seguía de cerca mientras Kalolo canturreaba alegre; el rubio, por su parte, les explicaba su trabajo como coordinador llevando su característico fular acompañado de gafas de sol.

-Tengo que pasar por varias casas del barrio para comprobar la estancia de los otros estudiantes de esta zona- explicó -Hoy todas las casas quedan cerca, así que podemos ir andando sin problemas-

-Debe de ser muy fascinante ocuparse de un trabajo que te permite conocer a tanta gente, Toru-san- comentó Keros.

-Bueno, no es realmente para tanto- respondió con modestia -Sólo me aseguro de que los estudiantes reciban un buen hogar en el que quedarse durante su estancia-