15 de enero de 1978:
Querida Rachelle:
Ahora te vi en receso.
Tan linda como siempre.
Con tu hermosa sonrisa.
Con todos tus amigos.
Y con tu... Novio.
Desee algún día ser el.
Se fueron del instituto.
Después, te peleaste con el.
Y deje de desear ser el, desee ser mejor que el.
Te vi llorando y me puse triste.
Te vi llegando a tu casa.
Tu madre te recibió.
Cuando entraste a tu habitación mire a mi ventana y te vi.
Cortandote.
Me dieron unas ganas tremendas de ir a abrazarte y consolarte.
Pero no lo hice.
Después, escuche que estabas gritando a tu celular.
Seguro le gritabas a el.
Y ahora ya te haz ido a dormir.
Pero te escapaste.
Te fuiste.
Me dejaste solo en la noche.
En la oscuridad.