Invalid 》無効です | KookV

Capítulo 41

Necesitas probar un poco de tu propia medicina
Porque estoy harto de tragar
Mírame conducir como tu, sin sentirme como tu

(...)

— ¿¡Qué hizo qué?! — SuRan dejó caer la ropa que sostenía en mano.

Tae acudió donde su hermana, HoSeok se quedo en la entrada de la habitación, vio al Kim tocar el hombro de la mayor, queriendo ver si ésta estaba bien, puesto que se cubría su rostro con ambas manos.
Pero resultaba que la chica no estaba llorando, ni nada de lo que los dos presentes pensaban, sino, estaba hecha una furia. Sus ojos soltaban lágrimas de enojo e impotencia.

— Suran Noona...— llamó TaeHyung mientras la veía tomar unas pocas cosas echandolas a un bolso.

— No. TaeHyung. Hermano, debo hacer esto yo sola por favor. Partiré a Busan, tú sólo...cuida de mi Jiminnie. Con esa mujer nos vamos a juicio. — la chica castaña sonrió acariciando la mejilla del menor con dulzura. — todo va a arreglarse definitivamente, ten fe. Podrás decirle todo lo que quieras cuando nos veamos en los tribunales, tú acotación será importante cariño.

La mano de un pálido color canela tocó la delicada y lechosa de la chica, acariciándola también terminando por asentir.
No le molestaba esperar, pero, sentía que siempre quedaba fuera de alguna u otra manera, aún así sentía que era lo mejor.

— Tae...— llamó HoSeok en voz baja.

— ¿Uhm..? ¿Qué sucede Hobie? — inquirió, observó a su hermana salir de la habitación ya lista y simplemente ponerse una bufanda.

— Jeon te busca, creo que me vio. — se encogió de hombros.

— No pasa nada, iré a ver que quiere tu si quieres quedate en mi habitación o puedes venir. Como prefieras...

— Iré al Jardín...porque tengo entendido que el pequeño Yoongi esta con Jimin, asique ahí no iré. — soltó una risa corta.

El peli grisáceo tan sólo asintió, yendo hasta la entrada de la casa, abriendo de inmediato la puerta. El castaño lo quedó mirando fijamente a los ojos para sonreír prontamente.

— Hola Taetae. — las manos del chico se ocultaban en su chaqueta por el frío que hacía. Tae observó todo de él, invitándolo a pasar.

— Hola, Kook. — dijo sin más y curvó sus labios en su tan encantadora sonrisa cuadrada. — estás muy casual para ser día de semana, en los cuales trabajas. — comentó.

— Me dieron el día libre, además...tenía que acompañar a Soyeon a la ultima radiografía. — dijo con desgano sobre eso.

— Y...¿por qué tan desanimado? Se te nota demasiado que no estás bien, Kookie. — murmuró para que eso solo quedara entre los dos, se lo llevó a la cocina donde le preparó un café como él contrario le había dicho hace ya tiempo que le gustaban.

— Soyeon no quiso ver a su hijo. Por más que me dijo que no se iría, presiento que algo malo está pasando por su mente, y no se como ayudar. Está ensimismada en su mundo, como si estuviera en una burbuja sin fin. Tae, creo que ella huirá.

El de piel canela lo observó procesando la información mientras ambos se sentaban cuidadosamente en uno de los sofás de la sala.

— No se que decirte es...muy repentino. — habló acarició los nudillos de las pálidas manos del Jeon. — A lo mejor solo esta asustada...no puedo decirte que conozco a Soyeon creo que la chica dulce y boba que yo conocía nunca fue real..demonios...Kookie lo siento no sé que decirte, o que hacer sólo..

— Sólo abrazame...Tae, por favor. — habló, con la cabeza agachada y la voz quebradiza.

TaeHyung atinó a cumplir su petición, abrazándolo y pegándolo contra su pecho, normalmente se hubiera sentido incómodo si el suceso que acontecía en ese preciso momento hubiera tenido lugar tiempo atrás, pero actualmente, no se sentía de esa forma. Sólo era algo cálido, tener a JungKook de esa forma entre sus brazos, se sentía lindo, acogido.

Y ni hablar del chico que era el consolado. Por un momento, olvidó todo el melodrama que le atrapaba y se envolvió en una burbuja de ternura, cerró sus ojos apoyando su cabeza en el hombro del menor, dejándose hacer, dejándose abrazar y querer por tan sólo aquel pequeño instante.

El Kim lo apegó brevemente más a sí mismo, acarició su cabeza con dulzura, de forma protectora, y sin pensar en todo lo que a él le agobiaba consoló al chico, que para muchos no era el mejor, para todos había cometido errores terribles, pero para él, que había decidido comenzar de nuevo, sólo veía un chico frágil, tal vez un poco tonto. Y de cierta forma, ambos se necesitaban ahí, se complementaban perfectamente bien, y sin querer podían pasarlo bien sin siquiera sacar las risas a la luz. ¿Cuando el tiempo había dejado que todo sanara? ¿Desde cuando, ya no se sentía herido?.

— Te quiero, Jungkook. — murmuró casi inaudible.

El castaño sonrió suavemente, solamente calló y sus brazos rodearon ahora, al de cabello grisáceo dándole un masaje tímido en su cien.

— He cometido muchos errores, y no sé si me siento merecedor de quererte, ni de que me quieras. — susurró en el oído del de piel canela.

— Kookie...— TaeHyung con una sonrisa suave levantó su cabeza que mantenía apoyada en el pecho formado del otro.

Se miraron a los ojos unos minutos y sin más, involuntariamente el menor abrió la boca de repente para finalmente decir de forma precisa;

— Bésame. — murmuró ya a escasos centímetros.

Jeon estupefacto pero al mismo tiempo con ternura soltó una pequeña risa, con sus grandes manos tomó entre éstas la carita tersa del contrario y unió sus labios, TaeHyung ladeó su cabeza para encajar mejor, éste dejando sus manos en el cuello del más pálido.

Ninguno sabía, o estaba tomando consciencia de lo que hacían, involuntariamente, por sus deseos de calidez, amor, y ternura por el otro, sólo logró darse el momento, sin alteración, sin peleas nada. Sumidos en cada uno, en los sentimientos que desbordaban.

¿Qué importaba ya si los demás los veían bien o no?.

(...)

Lo siento tanto por desaparecerme asiií perdón linduras :(❤
Espera les guste, realmente lo siento.
Las/os amo 💕

Space Chim
☕