Narnia necesita ayuda

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Esta historia es propiedad de Luna_hermione (de potterfics)
la publicó aqui por ser un sitio más amigable
tengo todo el permiso y autorización para publicarla
pero el crédito es de ella.

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Al llegar a la reunión todos nos dieron la bienvenida calurosamente, nosotros éramos los únicos que faltábamos
—te trajiste los aretes que te regale en Navidad —observo Eustace
—oh si —conteste —creo que son perfectos para la reunión
— ¿y cómo te fue en la universidad? —me pregunto Jill
—genial —conteste
Luego todos nos sentamos a cenar, fue una cena muy sabrosa, luego nos sentamos a tomar el té empezábamos hablar de Narnia y empezamos a recordar algunos aspectos de la historia Narniana que no estaban bien claros
—es como jamás contamos a Susan que Caspian se casó con Liliandil —comentó Edmund
—si —corroboro Peter —lo hicimos porque pensamos que le iba a doler pero cuando nos dimos cuenta que no le iba a doler ya se le había olvidado Narnia
Todos nos reímos porque sentíamos estar demasiados felices pero de pronto algo se empezó a formar delante de nosotros una sombra que luego se convertiría casi en una persona aunque luciera como un fantasma, era un rey guapo y se encontraba amarrado, Creo que todos pensamos estar soñando, pero al intercambiar miradas nos dimos cuenta que era real, Eustace Jill y yo nos pusimos de pie el profesor hizo un brusco movimiento, Peter apretó los puños antes de decir:
—Habla si no eres un fantasma tienes aspecto Narniano y nosotros somos los siete amigos de Narnia
Al mirar con detalle nos dimos cuenta que intentaba decir algo pero no escuchábamos nada, todos teníamos los nervios erizados, finalmente Peter agregó:
—sombra, espíritu o lo que sea, si vienes de Narnia, te ordeno en nombre de Aslan que me hables. Soy Peter, el sumo monarca
Al terminar de decir esto vimos que empezaba a desaparecer, todos intercambiamos miradas y se oyeron comentarios:
—se desaparece
—miren se desvanece
Luego ya no había nada un presentimiento se embargaba a todos, nos volvimos a sentar, Edmund dijo lo que todos pensábamos:
—algo está pasando en Narnia, hay que enviar ayuda
— ¿pero cómo? —Cuestione —sabes que no podemos volver
—tienes razón Lu —intervino Peter —pero nadie dijo que Eustace y Jill no pudieran regresar ¿o sí?
—no…Aslan no dijo nada —respondió Eustace
—eso significa que casi podríamos regresar —añadió Jill
—pero uno no vuelve con solo desearlo —declaro la tía Polly
— ¿entonces? —pregunté
Todos se quedaron en silencio luego se oyó la voz del profesor Digory
—hay una forma de entrar a Narnia ¿la recuerdan?
Todos negamos con la cabeza
—los anillos —continuo
Se oyó un murmullo entre todos ¡claro pero que torpes! ¿Cómo no se nos había ocurrido?
— ¿Qué sugiere profesor? —cuestiono Peter
—que los usen Eustace y Jill…ya sé que a los demás les gustaría pero no creo que funcionen si Aslan dijo que no podían regresar y al igual si funcionaran seria ir en contra de Aslan
—lo sabemos —dijo Edmund solemnemente, por un momento, solo un momento lucio con todo el resplandor, seriedad y solemnidad del rey Edmund, el Justo
— ¿pero dónde están los anillos? —pregunto Jill
—enterrados en el jardín de mi antigua casa —respondió el profesor
—hay que sacarlos —dijo Peter
Después de discutir la situación quedamos que Peter y Edmund irían a sacarlos, luego nos veríamos en Cambridge todos el fin de semana, y Jill y Eustace los usarían
Cuando llegue, cansada después de la cena y pensando en todo lo que pasaría, me recosté en mi cama y vi mi teléfono tenía un mensaje de Jesse este decía "amor no olvides que mañana grabaremos el sencillo donde Andrew", lo había olvidado prácticamente, sin embargo confiaba en que me sabia la letra, al día siguiente la universidad transcurrió normalmente, me pareció aburrido con la aventura que aguardaba bajo los anillos y la cena del día anterior
—estas distraída —me dijo Jesse —¿paso algo malo en la cena de anoche?
—No —le sonreí —todo va bien
— ¿segura? —pregunto dudoso
—segurísima —le respondí dándole un beso —te quiero
El me cogió la mano, yo se la aferre pero note que temblaba un poco, sin embargo él no se alcanzó a percatar, más tarde fuimos a la disquera, Andrew nos recibió amablemente y afirmo estarnos esperando, luego nos hizo a entrar a la cabina y empezamos a grabar era un hermoso tema y me encanto

Los Pevensie una historia moderna III, La graduaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora