Los Pevensie una historia moderna III, La graduación

Recuerdos I

Esta historia es propiedad de Luna_hermione (de potterfics)
la publicó aqui por ser un sitio más amigable
tengo todo el permiso y autorización para publicarla
pero el crédito es de ella.

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Aún estaba en el cementerio, mientras la lluvia le mojaba el cabello, y borraba los rastros de las lágrimas. Su corazón latía lentamente, jamás se recuperaría, jamás lo haría. Se colocó de pie como pudo, para tambalearse y volver a caer en el lodo, cortándose con una piedra que no había visto. Maldijo por lo bajo, que más le pasaría, ¿Qué más? ¿Un rayo, morir quemada? Si era lo que faltaba, que pasara, porque no podría seguir soportando cosas malas en su vida, no podría. Volvió a colocarse de pie, observando su corte en su mano, le dolía, pero no más que la muerte de sus hermanos. Era solo una pequeña cosquilla, nada grave, su verdadero dolor era mental, no físico.
ya no tenía familia, sus padres y hermanos habían muerto, cerró los ojos y recordaba todo claramente, había sido una mañana en la que estaba a punto de finalizar el invierno, había llovido el día anterior llevándose así mucha nieve, se habían embarcado en un viaje en coche hasta Cambridge, Susan iba conduciendo, Peter iba de copiloto y atrás iban Lucy y Edmund
—será un fin de semana estupendo —comentó Peter
—tienes razón —correspondió su hermano
—llevamos mucho tiempo sin pasar vacaciones los cuatro —había añadido ella
Ya estaban bastante lejos de Londres, era una carretera rural y se mostraba húmeda y fría, no iban muy rápido puesto que temían patinar por una capa de hielo que se había formado
—es una hermosa vista —había comentado Lucy mirando por la ventana
—ni la mitad de hermosos que los de… —comento Edmund estuvo a punto de decir que los de Narnia pero prefirió no molestar a Susan con el tema, así que añadió —otras partes del mundo
Lucy supo lo que estaba pensando su hermano así que le sonrió, el también correspondió la sonrisa, luego Susan preguntó
— ¿Qué es la misión importante por hacer?
Edmund, Lucy y Peter intercambiaron miradas, ninguno quería decir nada al respecto
— oigan ¿creen que papá y mamá estarán ya de camino? —Preguntó Peter para no tocar el tema
—de pronto —respondió Susan —pero respondan lo que había preguntado
Edmund se osó a responder:
—queremos ver qué pasa con los anillos del profesor, Jill y Eustace los utilizaran
— ¿para regresar a dónde? —Pregunto Susan burlonamente — ¿a Narnia?
—Pues si —contesto Lucy decidida
—no puedo creer que el Profesor y la tía Polly se presten para apoyar esa locura —les dijo
— ¿locura? —contesto Edmund calmadamente pero era una calma que indicaba que estaba furioso —tu eres la que te estás haciendo la loca con todo esto de Narnia
— ¡yo no soy loca! —Afirmo Susan empezando a gritar —ustedes son la parranda de locos que creen en un mundo imaginario….
— ¡no es imaginario! ¡Es real!, nada de lo que me digas me obligara a dejar de creer —alego Edmund también con gritos
—y si te digo que eres loco por creer en algo que no existe ¿Qué te parece? —Le respondió ella furiosa girándose a verlo y luego mirando al frente nuevamente
—pues yo te digo…
— ¡ya paren los dos! —Interrumpió Peter —que vivamos sin peleas al menos en un viaje
—tu cállate —le respondió Susan mirándolo con decepción —eres otro loco igual que ellos
— ¡ya me arte Susan Pevensie! —Dijo Peter estallando por fin — ¡he intentado hacer todo lo posible!...pero es imposible alguien que no quiere abrir los ojos
— ¡¿no querer abrir los ojos?!...¿a qué?-contesto furiosa
—no puedes creer nada —intervino Lucy por primera vez con voz bastante alterada —estas ciega no crees en nada...ni en ti misma
—tal vez pero no soy una egoísta como tú —contesto gritándole
— ¿me dices Egoísta? —Refuto Lucy —pero si…
—tiene razón —intervino Edmund luego le grito a sus hermana mayor — ¡eres tú la más egoísta!
—Yo no soy egoísta —dijo volteándolo a mirar sin prestar atención al volante
— ¡conduces! —Le grito Edmund — ¡podrías prestarle atención!
—no me dices que hacer —le contesto aún más fuerte sin embargo hizo lo que su hermano decía al darse cuenta de su imprudencia
—siempre has hecho lo que se te da la gana —le grito Lucy
—yo no hago lo que quiero por creer en un país para locos —grito Susan
—y dale con lo de locos —le grito Peter logrando que Susan le echará una mirada furiosa — ¡estás loca por no creer en Narnia!
—Entiéndeme una cosa —dijo mirando a Peter y luego mirando uno por uno a sus hermanos —Jamás ¿me entienden? ¡Jamás creeré en Narnia!, no creo en NARNIA ¡NO CREO!
Para los tres fue como un balde de agua fría se dieron cuenta enserio que su hermana no creía en Narnia, era como si tu descubrieras que te han dicho que tu madre está loca y te negaras a creerlo pero llega un día en el que te das cuenta que verdaderamente lo está, lo mismo represento para ellos, era algo sencillamente horrible, y luego Edmund y Lucy percibieron algo espantoso en la carretera, habían dos autos accidentados, al parecer se habían estrellado de frente
— ¿ese no es el auto de nuestros padres? —pregunto Lucy con voz temblorosa
—y el otro ¿no es en el que viajaban Eustace, Jill, el profesor y la tía Polly? —añadió Edmund con voz quebrada
Susan agudizo su vista y con horror vio que lo eran, sintió una enorme opresión en el pecho, giro a ver el rostro de sus hermanos pequeños y vio que el rostro de ellos habían palidecido terriblemente, sin embargo esta fue la peor distracción de su vida, el carril opuesto estaba obstruido y todos los carros circulaban por el carril de ellos, incluso un camión, lo último que oyó Susan fue el grito de Peter:
— ¡Cuidado!
Ella se giró y vio con horror como el camión se dirigía hacia ellos intento desviarlo, pero las llantas del carro patinaron dejando el carro más encima del camión y de manera diagonal, demasiado tarde el camión los golpeo con fuerza provocando que el carro volara por los aires, cayera aún lado de la carretera y diera innumerables vueltas, no recordó nada mas solo despertarse en un cuarto de hospital
las lágrimas corrían en su rostro sin cesar, si no hubiera peleado con ellos jamás hubiera pasado el accidente o hubiera tenido su conciencia en paz, ahora una enorme carga estaba sobre ella, hacia su corazón pedazos, ¿por qué les había gritado todo eso?, cuanto daría porque sus últimas palabras hubieran sido de amor, cuanto les quería decir ahora, se limitaría a nunca contradecir a Peter si esto le devolviera a su hermano, se limitaría a ahorrarse sus historia y escuchar atentamente a Edmund si esto lo trajera de vuelta, se limitaría a vestirse igual que Lucy y dejar las modas si esto le devolviera a su hermana.
-Peter, Edmund, Lucy-susurro sus nombres
se limitaría a colaborar eternamente en la cocina si esto devolviera a su madre, se limitaría ayudarle con el coche a papá y oír sus aburridas historias sobre el trabajo si esto regresara a su padre. Recordó luego cuando se despertó en el hospital, su tía Alberta estaba mirándola atentamente
—despertaste —le había dicho su tía —al fin
— ¿Qué ha pasado? —Se sobresaltó Susan — ¿Dónde está mi familia?
—Cálmate linda —le dijo Alberta
—dime por favor ¿Qué paso? —le suplico Susan mientras sentía que un sentimiento horrible se apoderaba de su ser
—es horrible querida —le respondió su tía — ¿segura que…?
—Dime —dijo Susan casi gritando —lo último que recuerdo fue ver estrellado el auto de mis padres ¡mis padres! Contra donde iba Eustace y los demás y por ultimo recuerdo que iba conduciendo con mis hermanos directo a un camión …
—por eso digo que todo es horrible —interrumpió la tía Alberta mientras evitaba llorar —eres la única sobreviviente de ese accidente
Como si una daga se hubiera clavado en su corazón fue lo que sintió Susan en ese instante, estaba totalmente paralizada, cientos de pensamientos cruzaron su cabeza, mientras tanto oía la voz de su tía que continuaba con lo sucedido
—el auto de tus padres se estrelló de frente contra donde iba mi pequeño Eustace, todos murieron, tu padre, tu madre, Jill pole , el profesor Digory, la señorita Polly y Eustace —en ese momento su voz se quebró volvió a tomar un respiro y continuo —solo se usaba un carril por el accidente solo había una vía y un camión se estrelló contra el carro donde iban tú y tus hermanos, cuando llegaron donde estaban ustedes te encontraron muy mal herida, duraste en coma dos meses saliste de ese estado hace un par de días y acabaste de recuperar la conciencia…por otra parte tus hermanos no contaron con la misma suerte, ellos murieron al instante….
— ¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! —El grito de Susan hizo sobresaltar a tía Alberta —no puede ser no me puede pasar esto ¡no! —Susan se hallaba llorando histéricamente, se hallaba gritando — ¡me quiero morir! ¡Quiero estar con ellos!
—cálmate —dijo la tía Alberta intentando comprender el dolor que sentía, ella también había perdido a su Hijo y sabía lo que sentía, ahora no imaginaba como se sentía la joven Susan al perder a toda , toda su familia
Los médicos la hicieron tomar algo que poco a poco fue calmándola sin embargo no paró de llorar todo el tiempo se quedó dormida y al despertar el dolor la invadió nuevamente, sin embargo esta vez no lo expreso, sencillamente parecía como si hubiera muerto como alguien muerto en vida, Yuto llego al otro día a visitarla, llego con un enorme ramo de flores
—me alegra que hallas despertado —le dijo intentando besarla sin embargo ella aparto su rostro
— ¿Qué tienes? —Preguntó preocupado Yuto, luego añadió —siento mucho lo de tu familia….
—no —dijo Susan fríamente —no puedes saber lo que siento ojala jamás tengas que sentirlo...estoy sola
—no estás sola —dijo Yuto intentando consolarla —me tienes a mí
—no —le volvió a responder Susan de la misma forma gélida —no quiero tenerte ...Quiero a mi familia
—Su pero ellos ya no están —dijo yuto intentando comprenderla —hay que empezar de nuevo, no es apropiado pero acércate a mi yo te...
—no —insistió Susan —entre más me acerqué a tu mundo me aleje más del de ellos. Ya no quiero que sea así…lo siento pero adiós
— ¿esto es el fin de nosotros?
Susan asintió con la mirada perdida, Yuto solo puedo decir:
—pero te amo
—pero yo a ti ya no —respondió secamente Susan
Yuto dejo caer al piso las flores que traía en la mano, luego se marchó sin decir nada, Susan solo lo miro marcharse, en otra época hubiera llorado pero ahora solo tenía lágrimas para su familia, volvía a llorar, el sentimiento de soledad la volvía acompañar
Ella Veía en línea las 5 tumbas de sus hermanos y sus padres —no estoy yo —se dijo, tristemente, como deseaba estar allí, a ver muerto también pero hubiera sido feliz, porque estaba con su familia, no sola en el mundo como estaba en ese momento. La familia de su primo Eustace, con el dolor de la partida de su hijo, decidieron mudarse a Norte América para comenzar de nuevo. ¿Cómo comenzaría ella? No había forma de conocerlo. Había dejado de asistir a la Universidad, hace un año de la partida de su amada familia, y sentía como si hubiera sido ayer. Aun con las manos llenas de lodo, se secó las lágrimas. Se dirigió al taxi que la esperaba, el hombre leía una revista, mientras esperaba a la joven Pevensie, para regresarla a su casa. -Adiós —lanzo un beso a las tumbas, y con pasos torpes subió al taxi