Le Heroína Más (In) Útil

Capítulo 2

"Oh vaya poder tan inútil que tengo." Se quejaba aquella chica de ahora aspecto felino, sintiéndose como el ser más inútil en la tierra.

"Me rehuso a seguir transformándome en un maldito gato cada y que me asusto... Me rehuso a... ¡Ayuda! Un ser extraño me está secuestrando." Pensaba en desesperación al ser cargada por nada más y nada menos que: Genos. Aquel rubio de ojos ámbar acariciaba con amabilidad al pequeño felino.

—Sensei...— habló Genos sin saber cómo continuar aquello que quería decir. No sabía simplemente cómo hacerlo sin sonar como si fuese un niño pequeño. —... cree que podríamos llevarlo a casa.— habló en voz baja. No sabía cómo sentirse respecto a aquella petición

"¡No! ¡No! Y ¡No! Tú maldito cyborg hermosamente rubio me vas a bajar en este maldito instante y dejarme ir a casa ¡Ahora! Y ya deja de acariciar mi maldita cabeza es molesto..." Se quejaba con furia ___; podría maldecir o simplemente usar todas las maldiciones combinadas en un oración, Genos y Saitama sólo iban a escuchar un simple maullido por parte de ella.

"Les juro que si alguien más me toca la maldita cabeza le voy a morder..."

Y así fue todo el camino a casa lleno de quejidos o mejor dicho, maullidos. Maullidos de enojo, furia, estrés, palabras altisonantes y uno que otro halago al rubio. Pues a ojos de aquella, este era atractivo y además de atractivo le encantaba ayudar a los demás por lo que en cuestión de horas se volvió un encanto de persona y es ahí en ese momento que ella ya tenía cierto interés; pero tal situación parecía un secuestro por lo que; nuevamente empezó a maullar desesperadamente haciendo que Genos estuviese cambiando su plato de comida constantemente desde simples pedacitos de jamón hasta algún guiso de carne pero él simplemente no comprendía qué era lo que necesitaba aquella pequeña criatura.

—Oye Genos, no crees que pueda estar enfermo y por ello es que está maullando; por alguna clase de agonía que pasa. — Genos lo pensó por unos segundo e inmediatamente tomo a la pequeña criatura en brazos acariciando sutilmente detrás de la oreja y esta comenzó a quejarse. "¡No estoy agonizando solo quiero ir a mi maldita casa! ¡Solo suéltame!" Entre más maullaba solo creía más en aquella teoría en la que el pequeño gatito agonizaba.

—Si es así será mejor que lo lleve con un veterinario cuanto antes. Puede ser que solo sea algún malestar y con una inyección se solucione sencillamente. — "No piedad inyecciones no." Miedo a las agujas. Aquel miedo le hizo pensar de una forma diferente por lo que dejó de maullar escandalosamente y comenzó a ronronear tratando de ser algo convincente para que le soltase. —Vaya al parecer le gustó que acariciase detrás de su oreja.

El gato solo soltó un leve maullido seguido de más ronroneos.

—Quizá desde un inicio quería eso.— habló Saitama. — Y bueno ya pensaste en un nombre para el pequeño ¿O no tienes ninguna idea de cómo llamarle?

—Quizá Kuro sea un buen nombre, por ser negro.

—Meow. — "Soy una dama al menos un nombre más elegante o bonito."

—Vaya al parecer te agradó tu nuevo nombre. — dijo Saitama acariciando al pequeño gato.

—Meow meow — En otras palabras ella dijo "Soy una maldita mujer, odio ese asqueroso nombre de mie... ¡Una rata!" E inmediatamente ella se subió al primer lugar alto que pudo encontrar.

—Genos tu mascota es un poco miedosa.

"Por qué demonios mataría yo una rata; es asqueroso."

De un instante a otro aquella rata fue cocinada por Genos.

—Oye Genos, no era necesario usar tus armas en contra la rata simplemente la pudimos haber atrapado y metido en la jaula.

—Quería ver si el felino siente cierto interés por el aroma de la rata y eso le conmueve a cazarlas cuando las vea.

"Eso no va a pasar maldito cyborg loco de bellos cabellos rubios. Además en algún momento regresaré a mi forma humana... " aquella chica simplemente no sabía cómo regresar a su forma original, solo esperaba a que el efecto de pasara, así como podía tardar un par de horas podían ser días. Solo era esperar a que su organismo hiciera todo el trabajo por ella.

La noche había caído, ella tenía hambre pues no había comido nada de lo que habían puesto en su plato; más que tomó algo de agua algunas veces.

"Daría lo que sea por un estúpida pizza." Pensaba mientras su estómago rugía de hambre; caminó sutilmente al cuarto del Calvo -así le decía ella- para  verificar que estuviese dormido y así fue, se encontraba en un profundo sueño; prosiguió y se fue al cuarto del rubio pero para su mala suerte este no estaba dormido; se encontraba simplemente acostado en la cama viendo la televisión; uno de los programas que a la chica le gustaba ver. Fue entonces que sin pensarlo mucho se subió a la cama de este a acostarse a ver el programa; él aprovechó a tomar al pequeño felino y cargarlo entre brazos para acariciarlo un poco e inconscientemente ronroneo ___.

Ambos se quedaron dormidos. Genos abrazando suavemente a aquella bola de pelo.

Nota: si hay algún error ortográfico háganme saber uwu.

Nota 2: Los domingos actualizo c;