006: Semilla.

142 8 0
                                    

Todo empezó siendo una semilla, una imperceptible, pequeña y discreta semilla, semejante a mi forma de asomarme al exterior y mantener en míseros segundos la mirada sobre ti, un vago saludo con la mano y la corazonada de habernos visto en algún otro tiempo, en alguna otra temporada de la que ni siquiera yo en su momento sé si llegó a ser real, nunca lo conseguí visualizar claramente, sólo lo sentí. ¿Qué podría saber yo de lo que terminarías causando en mi persona? ¿Qué cosa me podría haber advertido que el muchacho tras la ventana se convertiría en el protagonista que inspira este texto?

Simplemente no lo sabes, ahí está la magia que le dio vida a esa semilla, el misterio que poco a poco la hizo germinar en mi alma, y mi primer pensamiento (aunque para nada justo) es tomarte como el infractor de toda mi realidad, si aquella semilla comenzó a crecer fue por ti, por ser tú, y en ese caso, significa que desde un principio yo ya estaba condenada a salir perdiendo esta partida, no había forma de cambiar el resultado, esa semilla terminaría creciendo sea como sea, porque tú, siempre serás tú, y yo, siempre seré yo, sosteniendo en mis manos la pequeña planta que día con día va siendo más hermosa y vivaz por lo que sigues causando en mí.

Metáforas FugacesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora