Puppy [TodoBaku]

🍳Huevito🍳

Los diálogos entre "comillas" es donde Katsuki habla, o piensa, ya que... los perritos no hablan ;;;

°•○●🍳°•○●

Hoy era ese día del mes, sí, odiado por uno y agradable para otro. Así es, día de corte de pelo... o pelaje... del pequeño Kats.

-Kats vamos, ven, vamos al parque-

El heterocromático estaba algo apurado, justamente hoy en la empresa había una reunión que no recordaba y tenía que llevar a Kats a su cita con el "estilista" o como se le llamase al que corta el pelo de los perritos.

"NO VAMOS AL PARQUE IDIOTA, YO LO SÉ"

¡JA!, eso de ir al parque Kats no se lo creía ni de chiste, su humano nunca se arreglaba tan guapo... formal mejor dicho, para una sola salida en el parque.

Como no puede hablar humanoide, solo se escuchaban los ladridos por la casa, realmente esa miniatura tan tierna tenía unos pulmones impresionantes.

-Kats vamos, ven por favor, no me hagas tener que suspender el sobre que tanto te gusta esta semana-

"Mierda, mi sobre favorito"

Soltó un par de gruñidos y fue directamente a correr a la puerta donde estaba Todoroki .

"No puedes resistirte a mi, vas a caer bastardo"

Katsuki a usado tecnica carita de cachorro atropellado.

-No, esa carita no...- el heterocromático no pudo evitar cargar a su bolita de pelos y restregar su cara contra el pelaje esponjosito de esta.

El Todoroki menor, al que todos tenían alto respeto y algo de temor por ser siempre muy serio; en estos momentos estaba muriendo por dentro de ternura debido su bolita de pelos. A sus ojos era la cosita más tierna del mundo, su Katsuki era un rey, miniatura, un mini rey.

Y acto seguido, con el pomelian en brazos agarró las llaves, su maletin y la correa de Kats, para salir corriendo a su carro después de cerrar la puerta de su casa.

°•○●🍳°•○●

El camino al "estilista" del pequeño, fue tranquilo, iba en el asiento del copiloto, sentado muy elegantemente según él.

Cuando llegaron al local, la recepcionista los hizo pasar al "area" donde cortaban el pelo y uno de empleados se acercó a Shouto.

Cabe decir que el heterocromático y su pomelian ya eran clientes del lugar.

-Buenos días señor, tiene algún corte en especial que quiera esta vez para Katsuki?-

Y justamente en ese instante Shouto recibió una llamada, y como traía el audifono de manos libres en la oreja, no se dio cuenta que el empleado le había hablado.

-Sí, sí...-

-¿Qué le gustaría? Puedo traerle uno de los catalagos de cortes que van en pomelians que están muy en tendencia- el joven muy animado estaba al ir por uno de los susodichos catalagos pero se detuvo al escuchar a Shouto hablar.

-Huevo...-

-¿Huevo?-

-Sí, huevo. No lo repetiré dos veces-

-¡Ah! Sí, no se preocupe, ¡un huevo entonces!

Y el joven muy confundido se fue a por sus instrumentos de corte...

En lo que Shouto colgaba su llamada, creyó haber escuchado a alguien hablarle, pero como no tenía nadie al lado suyo, lo dejó pasar.

Y así con su bolita de pelos en la estetica perruna, pudo ir a su reunión. El ingenuo de Shouto no sabía que tendría una sorpresa regresando al local.

°•○

Ya había salido de su reunión y era la hora de recoger a Katsuki de la estetica, así que se dirigió en su auto por su canino.

Y cuando vio a su bolita de pelos se quedó como una piedra.

No sabía si reír o llorar.

Katsuki el huevo con patas.

Katsuki era un huevo.

Katsuki huevo.

Katsuhuevito.

Huevo.

-¿Por qué?-

-¿No le gusta? Hice mi mayor esfuerzo para que Katsuki quedara ovalado como me dijo, un huevo-

-¿Qué? ¿Cuándo dije eso?-

-Justo antes de que se fuera pidió un nuevo corte, y me dijo que un huevo-

El pobre empleado temblaba, Todoroki era un cliente frecuente y además una persona muy importante, ya sentía como iban a correrlo del local por hacer algo mal al cachorro de el señor Todoroki.

-Ya lo recordé...- solo pudo pasar sus manos por su cara, en realidad estaba hablando para ordenar algo de comida y el huevo era un complemento que quería para acompañar. Ahora por su culpa Kats era un huevito.

"Ahora qué mierda me hicieron par de idiotas"

°•○🍳°•○●

Para Todoroki regresar a casa después de un terrible día de trabajo le reconfortaba, pero cuando veía a su pequeño Katsuki se ponía feliz.

Y qué decir, casi que quería morir de ternura y actualmente morir pero de la risa por su Katsuhuevito paseando por la casa. Era muy gracioso ver al huevito pasear altareno con esa forma ovalada.

Ya hasta tenía una foto enmarcada de Katsuhuevito.