Tu Sumisa (Completa)|Editada.

capítulo 26

- Te Quiero en tu debido puesto. - Me ordena y yo sin pensarlo me muevo hacia una esquina de la cama, dejando caer mi toalla de forma inocente, puedo escuchar un jadeo de parte de Anel, pero no estoy segura. Me arrodillo, juntando mis piernas me inclino hacia delante con la mirada fija al piso y los brazos estirados, siento a Anel caminar hacia mi y mi vagina se empieza a mojar rapidamente.

Anel se posa frente a mi haciendo que mi cuerpo se tense. - Mirame. - Me ordena y yo rapidamente le obedesco, miro sus penetrantes ojos calientes como el mismo infierno. -¿Castigo o recompensa? - Me pregunta Anel, con una voz ronca y sexy que solo el puede tener. La idea de la recompensa me suena muy atractiva, pero la de el castigo me hace poner muy excitada. -Castigo señor.- Digo sin pensarlo dos veces. - Me encanta Tenerte asi, Tan pasiva y sumisa. - Me dice.

-Levantate y ven aqui. - Me ordena mientras se sienta en la orilla de la cama, me hace señas para que me acueste sobre sus piernas y yo lo hago inmediatamente, la idea de que me azote me fascina. -Ahora contarás conmigo cada azote que te de, serán diez en total. Si me dices para, pararé pero solo dila si ya no toleras más de lo contrario me enojará muchisimo y no quieres verme enojado ¿verdad?. - Me dice mientras manosea mis nalgas.

- No - Digo esperando ansiosa su contacto. Inesperadamente siento el ardor en mi trasero, es tan fuerte que a la vez se confunde con una piquiña, Me ah azotado durísimo ¡Madre Mía!.

-¿No que? - Dice apretando los dientes.

- No, Señor. - Digo y mi voz tiembla. Siento un tremendo dolor, el posa su mano en mi trasero Y el dolor disminuye.

-¡Cuenta! - Me ordena y yo me preparo y mi entrepierna también.

Siento el primer azote fuerte pero no tanto como el anterior -Uno.- Digo y el mansajea mi nalga derecha que ya ah recibido dos azotes. Aleja la mano y -Dos, Tres, Cuatro, Cinco. -Siento los 4 unos con más dolor que los otros,  uno en cada nalga derecha, izquierda, derecha, izquierda. -Seis -Siento el otro dar en mi vagina y una corriente eléctrica pasea por todo mi cuerpo, siento mis fluidos salir y salir, el masajea mis nalgas y mi vagina, formando pequeños círculos con la Palma de su mano. - Siete -Lo siento en la nalga derecha -Ocho-La izquierda -Nueve- mi vagina -Esa corriente eléctrica vuelve a recorrer mi cuerpo y el mete dos dedos en mi interior haciendo círculos, tambien haciendo una danza arriba y abajo, arriba y abajo y así en una magnífica sintonía, estoy llegando al clímax y siento que mi cuerpo estallará de placer y Anel para. NO NO NO ¿POR QUÉ? -DIEZ- Doy un grito que mas bien parece chillido cuando siento el último azote contra mi vagina, que hace que me corra de manera extravagante soltando fluidos por aqui y por allá, perdiendome en un mar de placer. Haciendo que Anel se pierda conmigo.

-No pensé que aguantarías, me tienes sorprendido, fascinado.- me dice mientras su sonrisa se mantiene sexy y un brillo en sus ojos de orgullo, me hace sentir tan bien.

-Todo por usted señor Anel. - Le digo y me sonrojo y muerdo mi labio inferior. El cierra los ojos y aprieta su mandíbula.

-Sientate aqui.- me señala la silla que esta en la habitación. Me empieza a besar y yo le correspondo el beso igual de fuerte, me siento en la silla y el se agacha y se posa entre mis piernas y empieza a besar, chupar, mordizquear, y pellizcar mis pezones, primero uno luego el otro dándole la misma atención a cada uno, deja besos en mi abdomen, y barriga, pasa su lengua por mi ombligo y yo arqueo mi espalda, baja hasta mi vientre y me besa suavemente, llega hasta mi monte Venus y pasa su nariz inalando mi aroma, Y yo me pongo roja como un tomate.

-Que Bien huele, señorita khaled.-Me dice mientras me mira desde abajo, y se que me eh puesto como un ajitomate. El sigue bajando hasta que llega ah ese punto tan dulce, Me da un casto beso y su lengua empieza a hacer magia.....

Sus labios y su lengua se unian en una perfecta danza de fluidos que yo no paraba de producir, Mis piernas reposaban sobre sus hombros, entrelace mis dedos fuertemente en sus cabellos, mientras el bebía mi éxtasis vaginal. Estaba llegando a la cima y el lo notaba mirandome desde abajo mientras yo arqueaba mi espalda el metio su dedo pulgar en mi interior moviendolo hacia arriba y hacia abajo en un solo frenesí y con su dedo medio empezo a hacer leves círculos en mi ano y eso hizo estar en una nube de placer. Su lengua rodaba mi clítoris una y otra vez succionando, dio un pequeño mordisco, no doloroso si no mas bien placentero y eso me iso correrme, mis manos viajaron a su espalda dejando pequeños rasguños. Cuando pude abrir mis ojos me encontré con esos hermosos ojos esmeraldas. El no quito nunca su dedo de mi ano, seguía haciendo pequeños círculos cada vez metía mas su dedo en mi interior.

-¿Me permites?.- Me dice mirandome fijamente.

- Yo No... Nunca Ehh.. - Le digo poniéndome rojisima.

-¡¿Nunca lo has echo por aqui?! .- Me dice con un brillo en sus ojos.

-Ehh... No.

-¿Me dejas estrenarte?. - Me pregunta y yo asiento.

Se levanta y yo solo lo sigo con la mirada, agarra un lubricante y lo trae hacia mi.

-¿Lista?

-Lista Amo.

Me agarró de la mano me guío a la cama y me puso en pose de perrito y empezó a masajear mi ano con ese líquido, Hace círculos y empieza a meter sus dedos por orden desde el pequeño hasta el dedo gordito, luego de meterlos todos se pone el preservativo y empieza a huntarse el lubricante y empieza a meter su gran pene en mi interior, me da un dolor algo fuerte, pero lo que siento es aun mayor, me siento llena, completa.

Empieza a meterlo y sacarlo, meterlo y sacarlo y me pierdo en un placer intenso. Me siento en un mundo mágico, el mundo mágico al que me lleva mi hombre. Me pierdo en sus movimientos, en la sensación de tener algo que me llena, mi vagina siente un cosquilleo también, es divino.

Rápidamente me da una vuelta y me pone frente a el y se quita el condón dejándolo caer al suelo y deja caer en mi cara el dulce néctar de su virilidad, un dulce néctar familiar, paso mi lengua por los alrededores de mis labios y siento el sabor salado y ácido de mi hombre....

Nos duchamos nuevamente y nos acostamos a dormir. Anel me acurruca y me abraza tan fuerte como evitando que me valla a ir, caemos en un sueño delicioso.

Mañana sera un gran día. Un largo pero gran dia...

Disfruten el capitulo💖