Bonnie era una chica castaña de enormes ojos zafiro, una tez pálida como la luna, unos delgados labios carmesí, y su hermosa dentadura de perlas, todo en una compacta estatura de 1.54.
Bonnie tenía demasiados problemas, siempre los habías tenido... pero el detonante había sido la muerte de su hermano. Fue cuando empezó a tomar los antidepresivos.
Si ves a Bon jamás imaginarías lo que hay detrás, su cara angelical, su presencia tan alegre. Le hacía honor a su nombre, era como un dulce conejo. Todo cubierto por esa vistosa sonrisa. El único que sabía lo que Boonnie escondía era Dylan, un pelinegro de chinos... su mejor amigo.
Dylan no sabía por elección de Bonnie. Lo sabía porque se conocían desde los 3.
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Todo parecía pintar mal para Bonnie, 3 materias reprobadas, las discusiones de sus padres, su novio terminándola por Clarissa, Dylan enojado con ella, una semana de entregas finales en la escuela... la pobre chica estaba al borde de una crisis depresiva... si tan solo alguien se hubiera detenido a observar. Ella no podía gritar, la aterraba menos la ansiedad que el juicio de la sociedad si viera que no era la chica tierna que pretendía ser.
La castaña se encontraba sola en casa, mala decisión de sus padres.Es sorprendente como en la situación equivocada, la acción más simple y tonta, puede hacer estallar una bomba.
Mientras ella navegaba por Facebook intentando despejar su mente, el mensaje llegó:
Unknown: Eres una falsa y tonta, nadie te compra tu portada de niña bonita. Por eso tu novio te dejo, al fin abrió los ojos igual que Dylan y vieron que todo lo finges para no estar sola, pues ni tu te soportas. Ya me entere que eres una maldita depresiva. Córtate las venas y ya muerte por favor, haznos a todos un favor. Seguro que es de familia y por eso tu hermano se suicido.
Es decepcionante lo mala que puede llegar a ser la gente, esas palabras acabaron de hundir a la chica de ojos zafiro. Sin pensarlo demasiado se acercó a la cocina, tomó la botella de vodka de su padre; y se dejo llevar. Media botella corría por su sistema cuando la idea cruzó su mente." Si con un antidepresivo me siento mejor, si me tomo un frasco podré dejar de atormentarme, por fin podré volver a ser feliz..." al menos eso creyó.
A arduas penas y totalmente mareada llegó al baño y de atrás del espejo sacó un frasco completo de su medicina. Tardo en abrirlo pero cuando lo logró, no vacilo ni un segundo. Volvió a la cocina y uso el vodka para pasarse las pastillas.Quizá para ti suene tonto, y esta bien. Quizá nunca te encontraras en el abismo de la depresión peleando con uñas y dientes para salir de ahí, no es un juego de niñas que quieren llamar la atención. Quien de verdad lo sufre, cambiaria todo lo que posee por dejar de sentirse estancado.
Unos instantes más tarde, el mareo pasó de ser efecto del alcohol a ponerla a tambalear... en sus últimos segundos de conciencia tomó su teléfono y como pudo... llamó a Dylan:
- Dy, se que estassss molesto conmigo, pero yo te amo ¿si? Eress el único que me entiende.
-Bonn ¿que tomaste?¿por qué hablas así?
- Tranquilo amigo, solo bebí un poquiiiito de vodka, y déjame contarte un secreto. Ya no tengo depresión. Ese frasco completo de antidepresivos es la soluciooonnn
-¡ BONNIE LILIAN CONTRERAS! TIENE QUE SER JODA ¡ES QUE! ¡CARAJO! ¿NO PIENSAS?¿ASCASO TE QUERES MORIR?
Bonnie comenzó a sollozar al otro lado del teléfono
-¡NO! No entiendes, motivos no me faltann, pero ¡NO! Yo solo quiero dejar de sentirme así- comenzó a sollozar con mayor intensidad- odio estar triste siempre, intento sentirme mejor, ser optimistas, pero solo no funciona nada ¡TODO ME SALE MAL! No fue intencional Dyls...- su voz se desvaneció en la última palabra.
Bonnie había tocado fondo, su cuerpo inconsciente cayó en seco contra el suelo.
-¡¿BONNIE!?, CARAJO... CONTÉSTAME.
Dylan salió de su casa a toda velocidad se dirigía a la de la castaña...
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Who knows?
Short StoryUn pedazo de mi alma, un desahogo de todo, quizá algunas fantasías e hipocresías. Léeme y húndete conmigo. Prometo no solo hacerte querer llorar. -Beth