No te prometo un para siempre.

Capítulo 8: Líos.

Capítulo 8:

                Miré el móvil, 32 llamadas perdidas y 67 whatsapp  de Kat. La llamé.

-          Kat, ¿Qué quieres?

-          Marilyn ¿Dónde estás? Me tienes preocupada y no has ido ni a clases, te espera una buena temporada a la sombra señorita.

-          Mira Kat, no me rayes y ahora no vengas haciendo el papel de madre del año, nunca te has preocupado por mí así que no sé de qué vas ahora.

-          Ya hablaremos tú y yo cuando llegues a casa.

Colgó. La notaba muy alterada, nunca la había visto así. Quizás había sido muy dura con ella, pero si nunca se había preocupado por mi ¿por qué lo hacía ahora? ¿Había madurado y quería hacer el papel de madre que nunca había hecho? No entendía nada pero no paraban de venirme preguntas a mi cabeza sobre Kat y su sobreprotección repentina, me había pasado con ella, bastante, a lo mejor sólo estaba preocupada, estamos en una ciudad nueva  y era normal que se preocupase por mí. Me sentía como una idiota y una borde. Rompí a llorar.

-          Eh pequeña, ¿qué pasa? ¿a qué vienen esas lágrimas? – Dave estaba preocupado, nunca lo había visto así.

-          Creo que me he pasado con mi madre, ella sólo quería saber si estaba bien y la he tratado fatal Dave. – Volví a llorar. – He estado muy distante con ella en los últimos años pero desde que llegamos aquí la trato como un felpudo, Dave ayúdame.

-          Cariño, llorando no solucionarás nada. Deberíais sentaros a hablar y contarle todo lo que me has contado a mí, como te sentiste cuando ocurrió todo y como te sientes ahora. Debéis cerrar esos capítulos que tanto daño os están haciendo a ambas y créeme, os sentiréis mejor.

-          ¿Puedes llevarme a casa?

-          Claro que sí, ahora mismo nos vamos.

Recogimos nuestras cosas y fuimos a despedirnos del resto.

-          Chicos, nos vamos. – Dijo Dave con prisa.

-          ¿Ya? Pero si aún es temprano. – Preguntó John un poco extrañado.

-          Lo siento pero mi madre está en plan loca tocapelotas, se ha enfadado porque no he ido a clase y me espera charlita ahora. De veras lo siento.

-          Marilyn, ¿Quieres que vayamos todos y le decimos que ha sido culpa nuestra, que te hemos engatusado? No nos importa amor. – Me preguntó Martha preocupada.

-          ¡No!, es mejor que hable ella sola, como sabéis tienen muchos temas que aclarar. – Aclaró Dave.

-          Tía, si necesitas ayuda o algo no dudes en llamar. Suerte cariño. – Dijo Addie, la notaba bastante preocupada.

-          Gracias amores, os digo después por Whatsapp. – Dije mientras me despedía de ellos y me marchaba con Dave.

Subimos al coche, Dave arrancó el coche y puso la radio. Nos esperaba un largo camino hasta mi casa pero se hacía más ameno  con el disco Born to Die de fondo mientras charlábamos.

-          ¿Qué le vas a decir a tu madre?

-          No lo sé, es lo que estoy pensando pero es que hay tantas cosas que decir, tantas incógnitas que aclarar que no sé por donde empezar.

-          Empieza por el principio, por la raíz de vuestros problemas pero hazme caso y no pierdas los estribos, que te conozco. –Dijo con una sonrisa al acabar la frase. – Cuéntale como te sentiste cuando pasó todo, los años que llevas callándote tus sentimientos, sufriendo en silencio. Cuéntale lo mal que lo pasaste con la separación, con la muerte de tu padre, con la mudanza aquí, Marilyn, cuéntale todo.

Al acabar la frase las lágrimas inundaron mis ojos, no podía más. Mi alma rota por todo mi pasado ansiaba por tener aquella conversación con Kat, con mi madre, no podía más y me hundí, hundida como aquel barco débil que no aguanta el fuerte oleaje que lo mece, como aquella piedra que lanzamos al agua, yo era el barco, yo era la piedra.