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Capítulo 14 La sorpresa

Pataleé y me removí como pude y de repente pensé que lo más seguro es que fuera Sonia porque tampoco me apretaba demasiado fuerte la cara.

Me metió en uno de los baños de los chicos y cerró la puerta para después taparme los ojos

-Sonia venga ya, ¿de qué va todo esto?- dije riéndome mientras quitaba sus manos de mis ojos. Me giré y la persona que había allí no era ni mucho menos mi mejor amiga

Narra Luke

"Ya la he llamado más de diez veces y sigue sin contestarme...."

No lo aguantaba más, me estaba preocupando. Esa llamada tan rara en la que decía que no podía más y se había puesto a llorar.. Me preocupaba que hubiera hecho una locura. No sabía que hacer, me estaba desesperando. Seguía en la cama, me levanté y me vestí para intentar calmarme un poco. Tomé una decisión. Cogí mi movil, y mi cartera, junto al pasaporte. Mientras me dirigía al aeropuerto llamé a Sonia, la mejor amiga de Samy.  Me explicó que se había ido a vivir a Portugal en verano, era la excusa perfecta.

-¿Si?

-¿Sonia? Soy Luke, perdona si te interrumpo o algo pero ¿me podrías hacer un favor?- no escuché nada por la otra línea- ¿Sonia estás ahí?

-S-sí perdona- parecía nerviosa- dime que puedo hacer por ti

-Sam me tiene muy preocupado, creo que ahora mismo necesita a alguien a su lado. Estoy de camino al aeropuerto para coger un vuelo a España. Quiero que sea una sorpresa para ella, ¿podrías decirle que vas a visitarla?

-¡Qué idea tan genial! Se lo diré cuando llegues, ella no suele tardar en llegar a los sitios

-Muchísimas gracias Sonia, eres una amiga de verdad

-De nada, avisame cuando llegues para llamarla.

Colgué y compré el billete. Dos horas desde Londres a Madrid y otras dos de Madrid a Almeria. Estaba harto de aviones pero merecía la pena. Cuando llegué al aeropuerto cogí un bus que me llevo a la estación, que estaba más en la ciudad. Llamé a Sonia

-Ya estoy aquí, estoy en la estación de autobuses

-De acuerdo, prepárate que la llamo

-Vale, oye cuando llegue y te llame para preguntarte donde estás, dile que en los baños

-De acuerdo, mucha suerte

Me fui a los baños y estuve allí vigilando por si aparecía. Al cabo de unos 5 minutos la vi allí. No tenía muy buen aspecto, se notaba que había estado llorando pero seguía siendo ella... Samy. "Despierta Luke no te quedes mirándola como un tonto"  vi que llamaba por télefono y al colgar se dirigía hacia donde yo estaba. Me escondí detrás de una pared y antes de que entrara al baño la agarré por detrás tapándole la boca. La metí en uno de los baños de los chicos y no paraba de patalear pero de repente se calmó. Le tapé los ojos, ella dijo en español algo que no entendí y entonces se giró.

Narra Samy

Era imposible. No no no y no.

-¿Qué haces aquí?-pregunté

-Yo también me alegro de verte- dijo él entonces con una sonrisa burlona

Me tiré a sus brazos y él me acogió abrazándome más fuerte de lo que yo lo hacía. Volvía a tenerlo cerca... A sentir su olor, su tacto, su calor. Me transmitía una fuerza interior que me hacía más feliz. Nos quedamos así durante minutos, yo en su pecho y el acariciando mi cabeza. Me separé para preguntarle

-Luke, ¿qué haces tú aquí? ¿Por qué has venido?

-La razón por la que estoy aquí la tengo enfrente mía. Samy, me tenías preocupado, esa llamada... ¿Qué pasó?

No me había acordado de eso hasta ahora y entonces me volví a hundir. Volví a caer en la realidad. Me pegué a la pared y fui bajando hasta que me quedé sentada y las lágrimas salían solas, otra vez.

-Eh, estoy aquí Samy. Si quieres desahogarte estoy contigo-dijo mientras se agachaba y se sentaba al lado mía. Yo simplemente apoyé la cabeza en su hombro y me puse a jugar con sus manos mientras se lo explicaba todo. Cuando terminé, me cogió la cara con las manos y me puso mirándole de frente, esos ojos azules... Podría quedarme refugiada en ellos de por vida.

-Estoy aquí. Tienes a gente que te quiere, ni se te ocurra olvidarlo. Puede que no estemos cerca pero aún así estamos a tu lado blondie- me secó las lágrimas con los dedos y me dio un beso en la mejilla- anda vámonos a que te de un poco el aire

Salimos del baño y nos fuimos a comer al fosters hollywood. Estaba más tranquila, la compañía de Luke me reconfortaba mucho. Fui al baño del restaurante, tenía la cara horrible. Me la lavé, y me volví a maquillar. Ahora mucho mejor. La mancha de batido de fresa tendría que esperar a la lavadora. Pasamos una cena memorable, Luke no paraba de hacerme reír y de verdad que se lo agradecía. Cuando terminamos ya eran las 10 y mi madre me llamó para recogerme

-Luke, ¿te quieres quedar a dormir a casa?

-¿Qué? Eh.. Yo...

-Bueno, cuando llegue mi madre le pregunto

Nos fuimos andando hasta donde había quedado con mi madre y cuando llegó le expliqué quién era Luke y que si se podía quedar a dormir. Mi madre dijo que sí, cosa bastante extraña por su parte.

Llegamos a mi casa y Luke casi no entraba por la puerta, me hacía mucha gracia. Cada vez que me reía de él, me hacía cosquillas para que me callara. Nos quedamos hablando hasta las 12 y mi madre dijo que ella ya se iba a dormir. Utilizamos la habitación de mis hermanos para dormir porque las camas eran mas grandes y asi Luke podría dormir con los pies dentro del colchón. Seguimos hablando y riendo hasta que vimos que eran las 3 y decidimos dormir. No sabía si alegrarme o no de que fuera invierno y no se fuera a dormir en boxers, sinceramente.

-Luke-dije en voz baja

-Dime- me respondió el imitándome. Reí.

-Gracias, de verdad. Te debo mucho por lo que has hecho hoy- le sonreí y cerré los ojos, lo noté moverse en su cama

-No me tienes que dar las gracias, pequeña- lo tenía en mi oreja, susurrándome aquellas palabras. Abrí los ojos y lo tenía a centímetros de mí. Nos quedamos mirando, ojos, labios, labios, ojos. Los dos lo sabíamos pero Luke se apartó

-Buenas noches- y me apretó la mejilla

-Buenas noches- suspiré. El corazón me latía tan fuerte que tenía miedo de que lo escuchara.

Le dedico este capítulo a Pula, que no podía aguantar sin saber quien era la persona misteriosa, gracias por el apoyo