Zootopia: Regreso al trabajo

Capítulo 10

La coneja seguía observándolo con curiosidad, no estaba entendiendo ni una pizca de lo que su mejor amigo le explicaba. Ni siquiera su sueño había comprendido.

-Escucha, nena. Los animales de Las Madrigueras acaban de verse afectados por el robo del único banco en esa zona, ¿no es así?. Muchas personas tenían ahí una de sus únicas fuentes de ingreso que podían utilizar para sus granjas, sus cosechas o sus empleos. Personas se verán muy afectadas si no ayudamos a restablecer el dinero del banco, pronto.

Judy había entendido, era una buena idea de todas formas.

-Nicholas Wilde, no sabía que hicieras obras de caridad- le golpeaba el brazo.

-En realidad, no. No las hago. Pero, si nos hacemos cargo de esto podríamos vigilar muy de cerca a Leodoro. Siendo los organizadores del baile podremos estar pendiente de con qué clase de gente se involucra, su comportamiento y tal vez podríamos obtener algún tipo de información valiosa.

-Dos pájaros de un tiro, ¡Nick, eres brillante!- comentaba su amiga dándole un abrazo.

-Ejem,- decía mientras aguantaba un poco aquel incómodo abrazo- Claro que lo soy.

-¿Cómo pensaste en eso?- preguntaba muy emocionada al soltarlo.

Nick abrió los ojos de golpe, ya le había dicho que en un sueño con sus ex novias, se encontraba en un baile pero notablemente Judy no lo entendió. Nick se estaba sintiendo completamente estúpido al haber recordado su pesadilla con su amiga. Jamás borraría era imagen de su mente, pero ella no podría saberlo.

-Ahm... En mi sueño, en un baile. Ya te lo había dicho, Pelusa.- contestaba nervioso.

-Bien, ¡hay que decirle a Bogo!- decía Judy adelantándose. Salió hacia la recepción en busca del jefe.

-Si, hay que decirle... ¿¡Qué!?- sobresaltaba Nick mientras la seguía con prisa.

-¿Qué sucede?- decía Judy cruzando los brazos.- ¿Planeabas organizar esto tu solo?

-Qué graciosa, creía que estábamos juntos en esto, Pelusa.- decía apuntándose a ambos mientras fruncía el ceño.

-Nick,-tal vez no aclaró muy bien las cosas- estoy contigo. Pero, sin la autorización de Bogo, ¿cómo piensas que esto saldrá bien?

-¿Alguna vez ha salido bien algo después de informárselo a Bogo?- preguntaba Nick, con su característica sonrisa traviesa, y la ceja alzada.

Judy no había entendido, y no comprendía lo que su amigo estaba queriendo explicarle, -¿Recuerdas el caso de los Aulladores?- seguía explicando.- Bogo no quería siquiera que te presentaras al trabajo, y aún así lo hiciste, lo conseguiste.

-Lo conseguimos.- corrigió Judy.

-Lo conseguimos, juntos. Como equipo, y lo más importante: sin Bogo.

-Pero eso era diferente, ¿dónde planeas hacer todo este "baile" sin que Bogo esté informado? ¿Planeas que lo hagamos debajo de la tierra?

-Hey, escucha. Entendiste mal.- el zorro llevó a la coneja a uno de los asientos que estaban en la sala de espera de la comisaría, y se sentaron ahí. No había personas ahí, así que era un buen lugar para responder todas las dudas que Judy tenía en su cabeza.- Le diremos a Bogo sobre el baile, sí. Necesitamos, ahora más que nunca, el apoyo de toda la comisaría, pero mientras todos los demás del departamento de policía se encargan del evento, de atender a los invitados, tu y yo estaremos atendiendo otro asunto: a Leonzález. Nos encargaremos de qué acciones realiza, su comportamiento y sobre todo con qué animales se relaciona, ¿entendido? No podemos hablar de esto con Bogo porque, ¿debo recordarte por qué tuve esas "vacaciones" en Las Madrigueras"?- decía mientras reía nervioso.