Paris de sombras

1 Clara tiene que aprender

No sabía en donde se encontraba, pero de algo estaba segura...

Aquella sensación de desconfianza y sombría que sentía a su alrededor no le daba buena espina.

A su alrededor solo había oscuridad, sin embargo, frente a sus pies se encontraba algo ¿Era acaso eso un nudo? ¿Una pelusa?

Parecía ser un enredo de telarañas.

Sin importar que su razón y lógica gritaba a kilómetros que eso era peligroso, su cuerpo tan solo siguió el recorrido del hilo de telaraña. Era como sí sus instintos supieran que el peligro era existente, pero que a la vez estos mismos instintos dijeran que debía darle la cara.

A medida que sus pies pisaban el hilo con un temor de salir de sobre él como sí está fuera una cuerda floja, a la vez se lograba escuchar de fondo una pequeña risa.

La risa era pausada y seca, mientras que de fondo se lograba escuchar una extraña y corrompida balada muy lenta y la cual le sonaba irritante.

- 🎶Clara... Clara... tiene que aprender...🎶 - de fondo la voz aguda y sin alegría de una mujer resonaba sobre ese mundo de oscuridad, donde lo único con color era esa telaraña blanca que sus pies se apresuraron en seguir- 🎶Clara... Clara... tiene que aprender🎶.

Su miedo se incrementó, pero como sí su sistema de defensa fallara, siguió corriendo en dirección de aquello que le era el provocador del miedo.

A medida que se acercaba a su destino sobre ese hilo blanco, noto como este comenzaba a mancharse con un tinte rojo el cual cada vez se opacaba más...

En un pequeño arrebato de irritación ante la canción retorcida de aquella voz, la azabache habló a la oscuridad del lugar sin dejar de correr:

- No soy Clara - su voz reboto con eco en aquel lugar donde no se divisaba nada.

- 🎶Clara... Clara... tiene que aprender...🎶 - la voz contraria resonó con más fuerza.

- ¡No soy Clara! - grito cerrando sus ojos con fuerza y agachando su mirada a sus pies mientras estos no dejaban de correr.

En un momento en el que sus pisadas se detuvieron, se atrevió a levantar lentamente la mirada de esa telaraña manchada de carmesí. Mirando el recorrido que seguía el hilo, vio como este se enredaba alrededor de un cuerpo gris y oscuro que se encontraba tirado en el suelo.

El cuerpo se encontraba sucio y desnudo, lo único viéndose relativamente sano era la cabellera larga y negra que cubría el cuerpo y que no dejaba ver el rostro del ser, además de un moño rojo opaco que se amarraba al cuello de aquella extraña mujer. Tenía una apariencia humana muy marchita, como sí la muerte y la oscuridad succionaran la vida de aquel ser que no paraba de cantar.

- 🎶Clara... Clara... tiene que aprender...🎶 -rio ligeramente la mujer, haciendo que a la azabache se le erizara la piel.

- No soy Clara...- menciono en un hilo de voz que apenas salió por culpa del miedo.

- 🎶Oh Clara...🎶 - menciono levantando el rostro y mostrando como uno de sus ojos era rojo y el otro era totalmente negro del cual salía una extraña sustancia del mismo color.

La azabache se tapó la boca ante el terror causado por esa apariencia, logrando que la mujer solo sonriera con malicia para luego volver hablar, pero esta vez con una voz más grabe y descompuesta.

- ¿Quieres volver a jugar?

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- ¡AHH!