He de probar de la fruta prohibida, el dulce veneno penetra en mis venas...una sensación hermosa que se volvió embriagadora.
Con mis manos abrazó el cuerpo frente a mi, de tibio a frío, creando belleza de la inmundicia humana.
Una muñeca dócil, fiel a mis deseos, ojos vacíos, piel palida y sin vida.
Una lástima mi linda muñeca a comenzado a perder belleza, es tiempo de conseguir otra.
Volví a probar el fruto prohibido, por mis venas corre una sangre distinta, he salvado a una persona, la he vuelto parte de mi.