Con cada paso que resonaba en la madera, el corazón de Zach saltaba, de pánico, como si hubiese robado un banco y estuviesen apuntó de pillarlo.
Helena encontró la llave y se dirigió, junto a Theo, al baño, Zach escuchaba los pasos, tenía el corazón en la boca.
Tocaron la puerta nuevamente.
Helena—¡Zach!,¿que pasa?¡abre la puerta!—
Zach—¡n-no!—dijo apenas.
Theo—¡Zach!,¡estas preocupándonos!—
Zach—¡no voy a salir!—
Helena—¡esta bien!—
Zach suspiro aliviado.
Helena—no quisiste por las buenas, así que lo haremos por las malas—susurro de tal forma que solo Theo logró escuchar.
Theo asintió.
Helena insertó la llave en la cerradura, Zach al escuchar eso, junto sus piernas con su pecho y las abrazo con sus brazos.
Helena y Theo lo vieron allí sentado, todo sudado.
Los dos chicos lo miraron con confusión, en eso se escucha una campanilla resonar, Helena saco su teléfono.
Helena—ahora vuelvo—
Theo se acercó a Zach y se sentó junto a él, Zach, estaba rojo de vergüenza, Theo paso su brazo por los hombros del chico.
Zach sintió su erección agravarse.
Theo—¿que ocurre amigo?—
Zach—no es nada...—
Theo—sabes que puedes decirme lo que quieras—
Zach—solo, no te enojes, ¿vale?—
Theo—esta bien—sonrió de lado con ternura lo cual le causó confianza a Zach.
Zach soltó sus piernas y dejo a la vista su erección que a la vista de Theo, era una minoría en lo normal.
Theo—¿solo era eso?—dijo soltándose a reír.
Zach—bueno....—
Theo—¿que ocurre?, oye tranquilo viejo, es algo normal, le ocurre a todos, son las hormonas—
Zach—claro— "es normal cuando es hormonal, no con tu mejor amigo".
Theo—¿pensabas en Lindsay?—
Zach—no de hecho—
Theo—¿entonces?—
Zach—eso es lo menos importante—
***
Theo—pues si, bueno yo....podría ayudarte.—
Zach—¿q-que?—se sonrojo, creyó haber escuchado mal.
Theo—como escuchaste Zach—
Zach—¿como piensas hacerlo?—dijo avergonzado.
Theo puso su mano en la pierna, la acarició, subió su mano.
Zach—T-Thiago....¿q-que haces?—
Los vellos de Zach se pusieron de punta y se puso tenso.
Thiago volteó y empezó a lamer el cuello de Zach.
Él soltó un suspiro, sintió la mano de su amigo meter su mano en su pantalón, saco su miembro y empezó a masturbarlo, Zach moría de vergüenza y de placer, a la vez, le gustaba la sensación.
Soltaba gemidos de placer.
Theo—¿te gusta cierto?—le susurro en su oído y luego le mordió.
Zach—s-si—
Theo—¿quieres mas?—
Zach—s-si....—dijo en voz baja.
Theo—¿que dijiste?, no te escuche—
Zach—¡s-si!—
Theo—mas bien, ya que no iba a parar—se puso encima de el y cerró la puerta con el pie.
Le bajo el pantalón completo, saco su miembro y empezó a masturbarlo.
Se mordió el labio para no soltar mas, ya que tenía miedo porque su hermana estaba arriba.
Theo—vamos, sigue gimiendo—dirigió su mano a su boca y la abrió.
Él soltó un gemido agudo.
Theo—bien, vamos a hacerlo Zach, Zach....¡Zach!—empezó a gritarle y a agitarlo.
Zach confundido empezó a reaccionar, todo se distorsionaba, hasta que vio esos atrevidos ojos azules.
***
Theo—¿Zach?¡Zach!—lo abrazo.
¿Estuvo soñando todo ese tiempo?, de cierta forma se sintió decepcionado, luego recordó que había sido su mejor amigo con el que había soñado, al mejor amigo desde bebes, al cual de cierta forma había rechazado indirectamente.
El es gay, no es que piense que eso este mal, solo que antes no veía correcto que a su amigo le gustara el, así que se ingenió para crear un plan y no lastimar a su mejor amigo, le consiguió novio, ¡el novio!,¡vaya! Se había olvidado de eso. Ahora se sentía mal de haber hecho eso.
¡¿Que estaba diciendo?!, ¡basta!
No es como si le gustara su amigo....¿es cierto?¡¿cierto?!
Se sentó y vio a a Theo, su hermana y una chica rubia.
Tenían una cara de preocupación.
Helena—¿te encuentras bien Zach?, te desmayaste—
Theo—¡cuando abrimos la puerta estabas en el piso!—
Zach recordó su sueño y se sonrojo, miro su entrepierna y se alegro de ver que la manta cubrió lo que había provocando el sueño, se alegro al saber que solamente había soñado que su mejor amigo se había dado la incómoda situación de que el lo abrazaba y decía que tener una erección era normal.
Helena—espero que te haya hecho bien, te pusimos una compresas en tu pequeño problema—dijo riendo.
No había pasado, ¿o si?.
Theo—bueno Zach, es completamente normal que pase eso y espero no te avergüences—
Si había pasado, Zach quería ser tragado por la tierra en ese instante.
El timbre sonó.
Entraron dos chicos Luka y Dean.
Luka—amigo, la puerta estaba abierta—
Dean—así que entramos, lo siento—
Luka—no me arrepiento de nada—
Dean—ya hablamos de esto Luka—
Luka—si claro—dijo irónicamente.
Dean—¿que te dije en el auto?—dijo molesto.
Luka—escuche casa, auto, allanar y Zach—dijo riendo.
Dean—¡la siguiente escúchame!—
Luka—a Zach no le molesta ¿verdad Zach?—ambos voltearon a ver al chico, quien se encontraba tirado en el piso entre los brazos de Theo.
Luka—¡siento que nos perdimos de algo!—
Zach—¡claro que no!—
Dean—bueno, deja las cosas Luka, y voy a usar tu baño Zach—
Zach—claro—
Zach quería levantarse, sin embargo le gustaba que haga eso, abrazarlo, era una de las cosas que hacia antes de que le consiguiera un novio.
Luego de unos segundos se levantó, ya no estaba la vergonzosa erección.
Todavía había una pregunta que tenía en mente, ¿quien era la rubia?.
Se sentó alado de su hermana, la cual hacia una mueca de desagrado, porque Luka estaba hablando con Eleonor.
Zach—oye Lena—
Helena—¿que quieres Zach?—
Zach—¿quien es la sexy rubia?—
Helena—ella es Eleonor—dijo aún mas enfadada con Zach.
Zach—tranquila bichito, estoy jugando—la abrazo.
Mientras esos dos jugaban bruscamente, Theo, se encontraba, pensando y mirando a Zach, se veía muy lindo cuando sonreía, no tenía nada de miedo en decirlo, solo que no lo diría, si por el fuese, ya le habría dicho a Zach que le gusta.
Sin embargo, Zach ya tenía una vida hecha, no podía llegar de un día para el otro y darle un giro de ciento ochenta grados a todo lo que conocía Zach.
Zach tiene novia, amigos, es un alumno ejemplar, el capitán de la mayoría de los equipos deportivos, es honesto, tiene una familia que lo acepta como es y lo más importante, el no es "marica", uno de los adjetivos que usan para dirigirse a el todo los días.
Realmente lo molestaban por ser como es, sin embargo el nunca le dijo nada a Zach, porque sabía que al primer idiota que se le topase enfrente, lo golpearía, se metería en problemas y no le gustaría mucho a Theo.
A los ojos de Theo, Zach, era perfecto, incluso con sus imperfecciones.