Destino (Sinbad x tú)

Temporada 1: Mi historia

Narras tú

Hace mucho tiempo era una niña que fue bendecida por el ruhk, todos los de mi ciudad natal me querían vender a los mejores impostores para obtener mi poder, en determinado momento mi familia tomo la desición de escapar, tan solo contaba con 3 años de edad cuando ocurrió todo esto, aunque casi no tengo recuerdos de lo sucedido.

"3 años después, Capital del Imperio Reim"

En el transcurso del viaje fui perdiendo mi familia hasta quedarme sola, fue en esos momentos que maldecia mi destino tan cruel, que me permite sentir agonía y tristeza creando un sed interminable de tener el poder suficiente para modificar todo esté destino.
Llegué a la cuidad del Imperio Reim cuando caminaba entre la gente, me sentía vacia dentro de mi, para mi corta vida no existía nadie en el transcurso, aunque estuviera rodeada de personas no era nada.

Llegué momentos más tarde a un bosque, decidí descansar un rato y comer algo que había robado en el paso de la cuidad.
A la cercanía escuche unas voces, me acerqué un poco para escuchar de lo que estaban hablando.

-Es cierto que hay una chica con un poder poco peculiar.

- Sí eso es lo que dicen entre todas las aldeas cercanas a reim, dicen hasta que es una rareza según por la leyenda que está escrita.

- Solamente son puras mentiras.

-No, enserio e incluso la menciona la señorita Scheherazade.

-Entonces es verdad.

-Sí e incluso se puede vender a grandes cantidades de dinero por tan solo obtenerla.

-Pero como la localizamos.

-Dicen que es de cabello totalmente negro, con tez blanca y unos ojos pocos peculiares que son como el color rojo carmesí y mencionan que tiene la edad de 6 años.

-Ooo estaría muy bien encontrarla en éstos momentos, te imaginas que obtendríamos si la conseguimos capturar.

-Sí, dinero, mujeres y alcohol por doquier.

Empezaron a reír por esa conversación tan estupida de vender la libertad de alguien por una cosa inmunda como el dinero, decidí irme de ahí pero por accidente tropecé y caí.

"Narrador"

Los soldados escucharon el ruido y fueron a ver quien era, antes que pudieras levantarte, te agarraron los soldados e intentaste escaparte pero fue envano.
Empezaron a revisarte y se dieron cuenta que tu eras la magi que mencionaban entre las aldeas.

-Creo que tenemos el premio gordo.

-Sí tuvimos la suerte de encontrarla.

Tenías miedo de lo que sucedería, romperias la promesa que hiciste a tu madre antes de que muriera, el sacrificio que hicieron tu familia para que escaparas de la garras de esos hombres tan codiciosos, empezaron a brotar leves lágrimas ya no sabías que hacer, maldecias tu destino una y otra vez, acomulaste todo tu ira y coraje en un solo grito.

-¡Déjenme en paz!

Forcejeaste más fuerte y lograste escapar, empezaste a correr como si no hubiera un mañana.
Los soldados iban detrás de tí, no querías parar tenías que lograr tu promesa, no te importaba la forma en la que fuera lo debías que cumplir.
Tan envuelta estabas en tus pensamientos que no te diste cuenta que estabas en un acantilado apunto de caer, llegaron esos hombres te estaban rodeando para que no escaparas de ninguna manera, tú única opción era arrojarte por el acantilado pero no sabrías como resultaría si lo hacías, pero no tenías otra opción.

En un momento a otro sentiste como caías al mar y te hundias poco a poco, sabías que en determinado momento no sobrevivirias a todo esto a lo cual empezaron a brotar todos los recuerdos de tu pasado y voces llenas de esperanza y felicidad.
Cada vez te sentías vacía y llena de tristeza, no pudiste cumplir con una cosa y ahora estás en el borde de la muerte, perdias tus fuerzas cada vez, por lo menos sabías que volverias a ver toda tu familia.
Pero algo dentro de tí aún no se resignaba a tu fracaso a lo cual pediste desde lo más fondo de tú alma un deseo que nadie más escucharía.

"Si solo tuviera una segunda oportunidad, desearía vivir aún"

Tu vista se volvió borrosa y te dejaste llevar por la profundidad del mar, pero como si alguien escuchara tus plegarias el mar te llevó a una costa, tu cuerpo inerte se encontraba sobre la arena.
Pasaron algunas horas, empezaste a despertar pero no tenías la fuerza suficiente para levantarte, volteaste a un lado a lo cual visualizaste a un niño, tal vez menor que tú.
No podías pronunciar ninguna palabra, solo salió de tu boca un hilo de voz.

-Por favor......ayúdame.

Te desmayaste nuevamente y no supiste nada más, solamente había oscuridad a cambio, solo se escuchó una voz que era la petición de tu madre.

"Cumple con tu sueño cariño"

>Continuara