Si Bangtan tuviera poderes

Kim Namjoon

editado.

Poder: Fuerza sobrehumana
Edad: 24

Namjoon era un niño de simples 10 años en ese entonces.
Un día como cualquiera se enojó con sus compañeros al recibir sus burlas por ser el único que no había podido aprobar su prueba, se había quedado hasta tarde viendo videos y se había olvidado de estudiar, además, recordaba que se le había caído el vaso de agua sobre su hoja la cual su mamá le había dicho que saque de ahí porque la iba a mojar.
Ya no aguantaba, quería irse o quería golpear a todos, no lo hizo, obviamente, pero al llegar a su casa comenzó a revolear todo y a golpearlo, todo iba bien, hasta que...

- AAAAAAAAAA -se escuchó aquel grito de enojo en toda la casa más un gran golpe, llamando la atención de los padres del niño-

- Hijo!, ¿Qué pa...? -su madre se quedó callada al instante- ¿Hijo, cómo demonios se rompió la mesa? -

- No lo se mamá, fui yo -se miró las manos-

- La mesa es de vidrio reforzado, ¿cómo es que lo rompiste?

- No lo se mamá, perdóname

- Vé a tu cuarto, ahora -Ella lo obligó y Namjoon obedeció-

Hasta ese día todo había ido bien, después de lo que había pasado con la mesa, sus padres se comportaban raro e iban con él a todos lados, como si tuvieran miedo.

~♡~♡~♡~♡~♡~♡~♡~

Tenía catorce años y ya era hora de que sus padres le dijeran la verdad.

- Mamá, papá -llamó el joven- Quiero hablar con ustedes -los dos adultos se miraron algo inseguros- Quiero saber que me han estado ocultando por cuatro años debido a...esa fuerza sobrehumana, ese superpoder, no es normal.

- Hijo, aún eres joven -le dijo la mujer-

- ¡No!, ¡No soy joven cuando ya sé que tengo algo diferente a los demás, tengo super fuerza, no soy joven para saber la razón!, ¡apenas la sé controlar y como si fuera poco mis padres me ocultan algo relacionado con algo sobrehumano! -Dijo enojado- ¿Qué es lo que está pasando? -

- Hijo siéntate -su padre ordenó y él obedeció- Hijo...existe un mal en éste mundo, una persona con mucha maldad que planea absorber el poder de cada persona que lo tenga, y tú eres uno de ellos

- ¿Eso quiere decir que hay más personas como yo? -El adolescente sonrió-

- Que traigan a Seokjin y a Jungkook -le dijo su padre a la mujer-

- Pero Jungkook aún no lo sabe, debe tener por lo menos catorce y recién tiene once -Respondió-

- Entonces a Seokjin -Dijo-

- Papá, mamá...¿Quién es Seokjin?

- Ya lo vas a conocer -Sonrió- Y sabrás que hay más gente como tú

Esa misma tarde Namjoon conoció a Seokjin, el cual le explicó ese mal que había y del que se debía cuidar, también prometieron ser amigos y cuidarse entre sí, incluyendo cuidar al pequeño Jungkook cuando lo sepa.

~♡~♡~♡~♡~♡~♡~♡~

Tenía dieciséis y recién estaba aprendiendo a controlar bien sus superpoderes, la fuerza sobrehumana, por más fácil que parezca, es difícil de controlar, más cuando la persona se encuentra en un estado de ánimo no positivo.
El maestro se hacía llamar G-Dragon, podía entrenar a cualquiera, cualquiera sea su superpoder él podía hacerlo, por ejemplo, Jin cuando supo sobre el peligro que corrían siendo perseguidos por esa "maldad", empezó a ser entrenado al instante por lo peligrosos que podían ser sus poderes en ocasiones.

- En posición Namjoon -El joven se puso frente a una pared armada especialmente para que él entrenara- Controla a tu gusto la fuerza, como te enseñé, destruye la pared

- Si maestro -Namjoon suspiró y golpeó la pared, destruyendola-

- Bien, bien, ahora tu consigna es no destruirla -El maestro con un simple movimiento de manos logró armar de nuevo el paredón-

- Si maestro -Namjoon se preparó y golpeó, logrando romper un poco los ladrillos-

- No, no, no, sólo golpeala, no la destruyas

- Si maestro -cuando el hombre ya lo volvió a restaurar, volvió a golpear aquel paredón, sin hacerle daño pero quedando con los nudillos algo raspados-

- Bien, tus nudillos están así porque golpesaste con fuerza normal, casi ni usaste tus superpoderes, lo hiciste bien -El maestro sonrió- puedes irte Nam

- Gracias maestro, lo veo mañana -Saludó con la mano y se fue de ahí, chocando con un chico algo malhumorado que lo ignoró y entró, suponía que iba a entrenar, así que sólo siguió su camino a su casa-

~♡~♡~♡~♡~♡~♡~♡~

FUERZA SOBREHUMANA DETIENE CAÍDA DE UN TREN EN LO ALTO

Decía en todos los periódicos y programas noticieros, televisión, radio, diarios virtuales, etc.
Namjoon quería en ese mismo momento golpearse a sí mismo, pero, ¿Qué querían que haga?, un tren estaba a punto de caer y muchas personas estaban dentro de éste, así que con ropa absolutamente negra que por suerte llevaba puesta, se puso frente al tren y lo detuvo, casi sin esfuerzo y ahora estaba recibiendo un regaño por parte de sus padres, los otros Kim y, ahora que el hijo de éstos lo sabía, los Jeon.

- Namjoon, tienes veinte años, deberías estar enterado de todo lo que puede pasar -Le dijo el padre de Jin- te arriesgaste, la maldad puede estar en donde menos te lo esperas, además, se rasgaron tus ropas, se te podría haber visto algo -Negó y todos lo miraron- ¿Qué?, eso también importa -El señor Jeon suspiró-

- El punto es que te podría haber reconocido alguien

- Pero no pasó, ¿no es así?, ya, lo siento, pero no iba a dejar que tantas personas salgan heridas a casusa de una caída que podía ser evitada

- Sólo decimos que podrías haberte puesto en peligro hijo -Su madre agarró sus manos-

- WOOOW, NAMJOON ERES GENIAL -gritó Jungkook mientras sonreía y aplaudía, él estaba más concentrado en la televisión que en otra cosa-

- Kookie, hijo, ven -Jungkook se acercó a ellos- tú no cometas el error de Nam, ¿si?, no quiero que te arriesgues

- Si mamá, Namjoon es un tonto -El nombrado le tiró una almohada pero él fue más rápido y la detuvo mirándola fijamente, devolviendosela- A mi no, tonto -Rió al ver la cara de Nam al recibir el golpe-

~♡~♡~♡~♡~♡~♡~♡~

Namjoon mantenía una vida normal con sus dos amigos y yendo a la Universidad, en donde tenía a los chicos quienes lo controlaban para que no golpee a los idiotas de sus compeñeros, lo normal.

Ésta es parte de la vida de Kim Namjoon, el joven de veinticuatro años el cual tiene una fuerza sobrehumana la cual casi ni usa, o por lo menos no por el momento.