Si Bangtan tuviera poderes

Jeon Jungkook

editado

Poder: Telekinesis
Edad: 21

Jeon Jungkook, un pequeño mañoso que quería todo en el momento en que lo pedía.
Cinco años tenía y una bolsa de caramelos quería.
Sus padres no se la quisieron dar y un escándalo empezó a armar.
En el momento en el que él gritó y saltó, todo objeto a su alrededor también se levantó.

Así es como aquel pequeño mañoso descubrió su poder maravilloso.

~Momento de estupidez fuera~

Con la mente controlaba las cosas, lo descubrió haciendo un berrinche y por eso sus padres también lo notaron, ellos temían pero debían esperar, por lo menos hasta los catorce años.

Jungkook creció creyendo que aquellos poderes habían sido obra de un sueño, estaba decepcionado, claro, él decía que era como Matilda pero más cool por el simple hecho de ser más bonito, o por lo menos eso dijo él mientras caminaba como una diva.
A sus cinco años, según su madre, era fácil que la imaginación y sueños te atrapen así, por eso no debía sentirse mal, era una mentirita piadosa.

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Cuando tenía diez años, volvió a tener una "ataque" de telikinesis, ya había tenido pero ni él lo había notado, pero ésta vez si...

– Ya déjame en paz! -Jungkook lloraba al ser agarrado con fuerza por el cuello de la camisa-

– Miren como llora el maricón -aquel tipo lo sacudió bruscamente y lo tiró al piso-

– ¡Ya! -Kookie lo miró fijamente e hizo un rápido y corto ladeo de cabeza, mientras se escuchaba algo tornar y un desgarrador grito por parte de Yeonju, el chico que lo molestaba-

– ¡Mierda, mi brazo! -estaba inmóvil y era notoria la quebradura-

Ese día Jungkook se sintió culpable pero bien a la vez.
Pero ahora había algo...
¿enserio tenía superpoderes?.

Era demasiado raro para ser real, era casi imposible según él, aunque seria increíble tenerlos.

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Cuando tenía trece años, fue llevado a la casa de los Kim, más bien, con las dos familias Kim las cuales le explicarían algo que él prefería no escuchar.

¿una maldad?, ¿y eso como seria?, ¿los matarían?, ¿les harían daño?, ¿les quitarían sus poderes?, ¿los secuestrarian?

Todas esas preguntas pasaban por la cabeza del pequeño Jeon, pero se sentía mejor al haber hecho aquella promesa con sus hyungs.

Todos para uno y uno para todos.

Ese era el dilema de los Kim y el pequeño Jeon, y Kook juraba mantenerlo hasta cuando pueda.

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– Como que el maestro esta tardando, ¿no? -dijo Nam- Jungkook ve a llamarlo

– E-entró con un chico hyung

– Sólo vé pequeño -Jin le sonrió a Kook-

– Está bien -Jungkook corrió dentro del lugar y escuchó a G-Dragon hablar con alguien, así que sin querer interrumpir entró- Señor, Jin y Nam lo esperan y yo igual -salió del lugar con rapidez y fue con sus hyungs, pensando en aquel chico castaño, era lindo...- dice el maestro que ahora viene -sonrió- ¿No conocen al chico que entró con él?

– No, ¿Quién era? -Jin lo miró-

– No lo sé, pero era bonito -Kookie se sonrojó-

– Chicos, empecemos -El maestro los miró-

– Hyung, ¿Quién era aquel chico? -Kook preguntó tímido-

– Oh!, se llama Taehyung, comenzará a entrenar los días que viene su amigo, otro alumno

– y...¿Cuántos años tiene?

– Tiene dieciséis, ¿Por qué tanta curiosidad?

– A Kook le gustó el chico -Namjoon lo burló y sonrió divertido-

– Oh, pues, intenta hablarle cuando puedas -El maestro rió- okey ya, empezaremos con Jungkook.

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Cuando tenía dieciséis, Jungkook comenzó a salir con un chico bastante parecido al que había visto tres años atrás, cabello castaño, ojos color miel, porque sí, lo volvió a ver pero más de cerca y siempre buscó a alguien similar, porque suponía que el "original" era más hetero que Yeonjun, así que perdió las esperanzas en poder hablarle y tener algo, ¿Por qué se fijaba en alguien que ni siquiera conocía?, No estaba seguro, pero lo que si sabía es que le gustó desde el primer momento y lo quería...

En fin, estaba de novio con un idiota que fingía quererlo por tener buen cuerpo para "follar", eso decía el chico y Jungkook no notaba que le estaba haciendo daño, ignoraba el hecho de que el chico siempre tratara de tocarlo, no lo notaba y Nam junto a Jin se cansaban de decírselo.

No lo había notado hasta que aquel chico se subió sobre él, comenzando a hacer fricción entre sus partes y a besar su cuello salvajemente, Jungkook jadeó de sorpresa y lo empujó levemente.

– No hagas eso Yugyeom (nada que ver oc), no quiero

– vamos precioso, déjame hacerte mío -el chico acarició su parte íntima- déjame tocar tu hermoso cuerpo

– no, no, no quiero, sueltame -Jungkook forcejeó y comenzó a llorar- no me hagas daño, no me toques así -Yugyeom había comenzado a sacarle la ropa mientras lo tocaba sin piedad- no me hagas cosas por favor -sollozo-

– serás mío -sonrió-

– ya déjame -El menor no dejaba de llorar, pero sin esperarlo y logrando mirar a Yugyeom a los ojos, aquel mayor fue empujado por quién sabe qué con demasiada fuerza- mis poderes... -susurró y lo siguió mirando, mientras negaba con la cabeza así el otro chico se estampaba con pared y pared- no vuelvas a tocarme. -se vistió rápidamente y se fue de aquella casa.-

Desde ese día Jungkook no volvió a relacionarse con casi nadie, no quería volver a confiar, no quería que ésta vez pase a mayores, pero por lo menos tenía control sobre sus poderes para defenderse.
A causa de aquello, a Jungkook le atemorizaba llegar a tener relaciones alguna vez, ¿Y si lo lastimaban?, ¿Y si eran bruscos? , ¿Y si no lo querían?...

Así creció el pequeño Jeon, con miedo.

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Cuando tenía veinte comenzó a trabajar de profesor de canto, no ganaba mucho, claro, pero amaba estar con aquellos niños que lo miraban con admiración por el simple hecho de hacer lo que le gusta, cantar, componer.
Recientemente había compuesto una canción llamada "Euphoria" que se la estaba enseñando a sus alumnos, ellos amaban esa canción y lo hacían realmente bien, era increíble.

Al fin a los veintiuno, mientras entrenaba, se le acercó Namjoon para ir a la sala principal.

– el maestro nos necesita

– ¿Para qué?

– ...llegó la hora Kook, llegó la hora de sabetr para qué nos entrenan.