¿Quién?¿Tú? [Chilanube/Chamcloud]

¿Conexiones?

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Hyung.. No lo beses... A ti no te gusta él.

WooJin se despertó de golpe, secando rápidamente sus mejillas húmedas debido a sus lagrimas. Se sentó en su cama un poco confundido y en ese entonces llegó su madre, entrando por la puerta de su habitación, sentándose  en la orilla de su cama.

—¿Qué pasó hijo?¿Te encuentras bien? Oí tu llanto desde la habitación—Su madre acariciaba sus mejillas.

Él no dijo nada, simplemente la abrazó. Sintiéndose aún más confundido de haber estado pensando en alguien, pero no tenía idea de quién, le dijo a su madre que no se preocupara, que había soñado con algo muy triste y a pesar de tener casi 18 años era un niño aún. Su progenitora asintió convencida,  le dio un beso de buenas noches y se fue. Pero una pregunta quedó en su cabeza desde entonces.

¿Por qué lloraba por ese tal “Hyung”?

En ese entonces, el teléfono de su casa resonó. Siempre era una mala señal que llamaran tan tarde a su casa. En especial si un llanto casi desgarrador se escuchó por todo el lugar, acelerando su corazón.

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SungWoon se separó del chico a su lado, con los labios un tanto húmedos e hinchados, sorprendido por sus recientes acciones. Se suponía que no debía llamar ni hablarle al chico que armó un gran escándalo en su casa hace un año atrás y ahí estaba él.

En su pecho se instaló la sensación de culpa, no quería lastimar a su madre cuando le dijera que había vuelto con TaeHyun, después de todo, le prometío mediante una gran charla que habían tenido, que no volvería a repetirse esa situación y que la próxima vez que se enamorara, el chico sería bueno; No podía negar que los labios de su ex, se sentían bien sobre los suyos, pero el estar sobre sus piernas en el sofá sin nadie en casa no era algo correcto y su subconsciente lo obligó a separarse.

—Debo irme ya—Repentinamente recordó que tenía un proyecto por el cual trabajar.

Noh TaeHyun, conocido por su alta capacidad de convencimiento, estaba efectuando su mirada especial con él, su gran debilidad.

—Quédate aquí hoy. Antes te quedabas a dormir—Picó sus costillas con suavidad, haciéndole reír un poco.

—Debes detenerte. —SungWoon acarició su mejilla—. Ha sido agradable recordar aquel tiempo, pero me tengo que ir. Nos hablamos luego.

Iba a levantarse, pero TaeHyun sujetó sus muñecas y comenzó uno de sus juegos un tanto molestos para su gusto.

Tardó unos quince minutos el salir de aquella gran lujosa casa. Sabía que Taehyun vivía en la parte más rural porque su familia quería darse el lujo de residir entre árboles y aire fresco. Clima ideal y característico del lugar donde había crecido; Las afueras de Ilsan.

Estaba un poco oscuro y el cielo adquirió ese tono azul opaco que le ponía a pensar en todo tipo de cosas. En su infancia tan amada, en su pre adolescencia, esa etapa donde simplemente jugaba y era apasionado por todo lo que hacía, también sus amores fueron con tal grado de emoción. Cuando creció todo fue variando al punto de dar un giro en ciento ochenta grados.

Su autobús había llegado, para su desgracia era el chófer malhumorado que a pesar de saludarlo con un cortes buen día o buenas noches, aquel amargado hombre simplemente tomaría su dinero y avanzaría el vehículo por el recorrido establecido.

Antes de ponerse sus auriculares, una canción se escuchaba de fondo, y sólo pudo sonreír al notar que esa era una canción que cantaba para unos pequeños niños, incluido el amigo malhumorado de Jaehwan y Daniel que parecía haberse olvidado de él. Suspiró notando lo mucho que habían cambiado las cosas, pasando por alto el a o atente remordimiento que se entrecruzaba con sus pensamientos.

Su corazón le decía que no debía volver con Taehyun, pero lo trataba tan bien y rememoraba el pasado. Nadie lo hacía sentir así, de no ser por su ex, sentiría ese vacío irremediable que experimentaba al levantarse cada día.

Llegó hasta su casa, quitándose los zapatos para cambiarlo por unos más cómodos al entrar. Se escuchaba el ruido de la ducha sonar y su madre estaba arreglada pero vestida de luto.

—¿Mamá?¿Qué haces aquí?—Preguntó con un tono evidente de molestia—Su madre sólo dejó ver su expresión dolida, limpiándose las lágrimas que brotaban de sus párpados.

—¿Qué pasó? —Insistió nuevamente.

Ella sólo empeoró su llanto. Podía asegurar que algo malo pasaba,  pero su madre no decía nada. Avanzó hacia él y lo abrazó.

Era extraño. Primero Jisung y SeongWoo estaban ocupados con sus novios, ignorando su existencia con sus cabezas llenas de amor. En cuanto al trabajo, era lento pero seguro, ese chico Hwang MinHyun era un casanovas de primera, al punto que iba al mismo gimnasio que su amigo de baile Jaehwan, es más, creía que había química entre ellos dos. Luego, el chiquillo malhumorado WooJin –Nunca más olvidó su nombre–, se sintió indeciso entre sentarse o no con él en el autobús de regreso a casa y no era sicopata ni nada por saber que el lindo chico salía a las cinco quince, justo media hora despues de su clase de teoría musical. 

Ahora su madre, quien casi no venía a casa, estaba llorando al verlo pero no entendía muy bien el porqué.

—Hijo. Vístete. Vamos a ir al funaral de la señora Wong—Su madre dejó de abrazarlo y empapar sus ropas, haciéndole caer en cuenta de algo importante.

La señora Wong había fallecido...

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[Holaa, más misterios y sorpresas se van a ir desarrollando en esta super historia de la otp más real de todas. Y líos con los triángulos amorosos también. Gracias a todos los que me leen de forma anónima y a los que comentan y dejan su estrellita. Los adoro.😍❤️🎀]

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