Uno de esos días cualquiera de 1882, Nietzsche recibió al cartero esperando al menos algo de beneficios de sus escritos, pero solo llegó correspondencia para Salomé.
--Lou, ha llegado una carta para ti de un tal Sigmund Freud.-- cuando Fredrich dijo lo anterior Salomé apareció al instante.
--¡Dámela!-- abrió el sobre y leyó la carta de su interior en tan solo unos minutos.
--Tengo curiosidad, ¿quién es ese Freud?-- preguntó Nietzsche.
--Es un psicoanalista maravilloso.-- respondió mientras guardaba la carta con cariño.
--¿Y de qué podrías hablar tú con ese psicoanalista?-- ella soltó una carcajada.
--Tiene gracia que lo menciones, en mi última carta le hablé de ti y dice que está deseando que publiques tu siguiente escrito porque quedó impresionado con La gaya ciencia. --Nietzsche se dió por satisfecho con aquello.
--¿Te interesa el psicoanálisis?-- Lou asintió.
En efecto, Salomé estaba bastante interesada en el funcionamiento de la mente humana, en 1911 conoció a Sigmund en persona y se convirtió en la única mujer aceptada en el Círculo Psicoanalítico de Viena, cuatro años después comenzó a dar su propia consulta en Gotinga.
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Nietzsche, cómo muere Dios
Historical FictionRepresentación hipotética de la vida del filósofo Friedrich Nietzsche, con la autorización y beneficio de absolutamente nadie. "El destino de los hombres está hecho de momentos felices, toda la vida los tiene, pero no de épocas felices". ...